Alta tensi¨®n en la Bah¨ªa

El campe¨®n fue el campe¨®n en Navidad. Y se pareci¨® a s¨ª mismo incluso sin el jugador que lo define y que es imposible de replicar, Stephen Curry, y sin el que fue su segundo mejor hombre en las ¨²ltimas Finales, Andrew Wiggins. Dos bajas de larga duraci¨®n (el alero lleva ya diez partidos seguidos sin pisar las pistas) que tienen a los Warriors como los tienen: 16-18, intentando no perder de vista la zona de play in del Oeste (como m¨ªnimo) hasta que vuelva Curry, alfa y omega. Y eso despu¨¦s de pasar por encima (123-109) de Memphis Grizzlies (20-12 ahora), una alternativa joven de ese mismo Oeste que se gan¨® (gracias al efecto megaestrella de Ja Morant) su primer billete para un partido en 25-D. Para los Warriors, era el d¨¦cimo seguido.

Y el duelo tuvo mucho de eso: el novato, nervioso, contra el que se las sabe todas. Una recreaci¨®n en miniatura de la ¨²ltima semifinal del Oeste (desde entonces no se hab¨ªan visto las caras) que acab¨®, tambi¨¦n, con m¨¢s l¨ªos que emoci¨®n en el resultado final (4-1 entonces para el que estaba a semanas de ser campe¨®n). Estos dos equipos acumulan cuentas pendientes, y tienen otros tres partidos de regular season por delante: el 25 de enero repiten en la Bah¨ªa, en marzo se ver¨¢n las caras dos veces en Tennessee.

Ser¨ªa la Navidad, la llegada de un rival al que les gusta ganar o simplemente la seguridad del Chase Center, pero el caso es que los Warriors se parecieron a los Warriors, dejaron la sensaci¨®n de que est¨¢n pendientes del regreso de Curry y Wiggins, y si puede ser de un retoque en el mercado invernal, para volver a ser el favorito de su Conferencia cuando asomen los playoffs, lleguen a ellos desde donde lleguen. La cuesti¨®n ahora es llegar. No habr¨ªa dudas si solo jugaran en casa: 13-2 por 3-16 a domicilio. La disparidad es llamativa, extrema. Los Warriors jugaron con el colmillo retorcido, concentrados e intensos. Separando la parafernalia y el trash talking del juego, o propulsado a este con todo eso otro. Los Grizzlies, en cambio, se metieron en la guerra que menos les conven¨ªa: protestas, l¨ªos con unos ¨¢rbitros con momentos muy caseros, muchas faltas personales, t¨¦cnicas, ansiedad por responder r¨¢pido a cada gesto del rival¡­

Draymond Green y Klay Thompson, c¨®mo no, dirigieron la lecci¨®n a unos Grizzlies que cayeron en casi todas las trampas. El primero, que en este punto de su carrera en el que alterna noches espl¨¦ndidas con debacles estruendosas (y marca habitualmente la temperatura de su equipo), jug¨® a su mejor nivel, como si estuviera en playoffs: 3 puntos pero 13 rebotes, 13 asistencias y el control emocional de un partido que manej¨® desde esa extra?a permisividad arbitral que muchas veces recibe. Klay meti¨® 24 puntos pero con 25 tiros, y acab¨® vacilando a un Dillon Brooks hart¨ªsimo: ¡°Los ¨¢rbitros permitieron que la cosa acabara as¨ª. Klay hizo todo el rato lo mismo, pero parec¨ªa que yo ten¨ªa que ser el malo. Ha sido un circo, ten¨ªan que haber puesto otros ¨¢rbitros¡±. Para los Warriors, en todo caso, las mejores noticias estuvieron seguramente en los buenos minutos de los secundarios: Donte DiVincenzo (19 puntos, 5/9 en triples) y una segunda unidad que aguant¨® el tipo con Ty Jerome, Moses Moody, Anthony Lamb, Jonathan Kuminga y un James Wiseman que no anot¨® pero sigui¨® la senda buena en defensa. No es poco. El resto, lo bueno y lo malo, lo puso Jordan Poole, que sali¨® como un tiro (17 puntos en el primer cuarto), acab¨® con 32 puntos y fue expulsado a ocho minutos del final por dos t¨¦cnicas.

Con el doble de triples (18 por 9), los Warriors aseguraron el triunfo en el tercer cuarto y llegaron al +20 en el ¨²ltimo, disfrutando de la irritaci¨®n absolutamente evidente de un rival descarrilado. Dillon Brooks se carg¨® de faltas, Jaren Jackson Jr se carg¨® de faltas. Una historia ya vieja. El ala-p¨ªvot es un jugador esencial con tendencia a irse de partidos importantes por esa falta de control. Le volvi¨® a pasar. Desmond Bane, que acaba de regresar despu¨¦s de 17 partidos de ausencia, estuvo a a?os luz de su nivel, y Ja Morant se estren¨® en Navidad con 36 puntos, 7 rebotes y 8 asistencias. Su partido fue imperfecto, pero durante muchos minutos ¨¦l fue la ¨²nica raz¨®n por la que su equipo se mantuvo vivo: 59-54 tras una primera parte de notable superioridad local. Santi Aldama anot¨® 9 puntos y captur¨® 2 rebotes, pero fue una de las v¨ªctimas del juego del gato y el rat¨®n en el que Green meti¨® a los ¨¢rbitros. Con los principales sanos (por fin) y en un partido que ten¨ªan marcado en rojo en el calendario, la revancha, los Grizzlies pegaron un buen patinazo, muy inferiores incluso sin el todopoderoso Stephen Curry enfrente. De esto tambi¨¦n aprender¨¢n, claro.