Ahora o nunca: los Clippers, con todo a por el t¨ªtulo

La parte final de la temporada se acerca. Con ello, la demostraci¨®n de qu¨¦ proyectos aspiran a ganar el t¨ªtulo y cu¨¢les no. La bola no miente, como dir¨ªa Rasheed Wallace, legendario jugador de los Detroit Pistons. Algunos hicieron los deberes antes del 9 de febrero, fecha que marcaba el cierre de mercado, y otros no. Algunos se quedaron con las ganas de aspirar a m¨¢s y otros reforzaron sus debilidades, aquello que le faltaba, para entrar a batalla con la mejor armadura posible. Este es el caso de los Clippers, que a?adieron piezas a un plantel que ya invitaba a la ilusi¨®n, pero que recog¨ªa dudas de a?os anteriores.

La cuarta temporada del megaproyecto de Steve Ballmer, propietario de la franquicia, y Michael Winger, m¨¢nager general, promete cumplir con las expectativas puestas desde 2019 y salir de un bucle infinito del que parec¨ªa imposible escapar. La llegada de Kawhi Leonard tras conseguir el anillo con los Raptors la temporada anterior y un Paul George que quer¨ªa redimirse del mal sabor de boca que se le qued¨® en Oklahoma pon¨ªan los focos en la otra parte de la ciudad californiana.

Cuando los nombres acaparan portadas d¨ªa s¨ª y d¨ªa tambi¨¦n, los focos no se marchan, y brillan m¨¢s que nunca. Las esperanzas crecen y, con ello, la presi¨®n. La NBA ha demostrado que tener m¨¢s de dos o tres estrellas en tu equipo no te garantiza ning¨²n ¨¦xito. El caso reciente de los Brooklyn Nets es buen ejemplo de ello. Para conseguir el campeonato, los secundarios toman un papel especial. Sin ellos, no se entiende el ¨¦xito. El equipo angelino se ha reforzado de perlas con jugadores de gran nivel. Tienen mejor equipo que nunca. El problema, es que est¨¢ en el Oeste m¨¢s competido del ¨²ltimo lustro.

El cambio de cromos no les ha podido salir mejor. John Wall y Reggie Jackson, sus bases hasta el momento, hicieron las maletas rumbo Houston, donde Wall ser¨¢ cortado y buscar¨¢ una nueva aventura, y Denver, lugar en el que Jackson puede jugar un papel fundamental desde el banco. En su lugar llegaron un Bones Hyland procedente precisamente del conjunto de Colorado, casi regalado (a cambio de dos segundas rondas), y Russell Westbrook, que no se mud¨® de Los ?ngeles y se fue al rival de los de oro y p¨²rpura.

A nivel contractual, un gran movimiento. Hyland mantiene su contrato de los Nuggets (2,2 millones de d¨®lares esta temporada) y firman a un Westbrook con mucho por demostrar despu¨¦s de su paso por los Lakers. S¨ª es cierto que el base, desde su salida de Oklahoma, ha estado relacionado en un mayor n¨²mero de noticias y estad¨ªsticas negativas que positivas, pero los Clippers parecen un lugar donde liberarse.

Se le acabaron los aliados al base de 34 a?os. Los equipos no quieren apostar por un jugador que resta m¨¢s que suma en cancha, y que, aunque a veces pueda aportar, las franquicias no se terminan de fiar. Paul George, que vio su mejor versi¨®n a nivel individual al lado de Westbrook, le recibe con los brazos abiertos. ¡°Podemos jugar bien con ¨¦l y es algo de nuestro juego, como abrir espacio en la pista¡±, coment¨® el alero a los medios tras conocer la noticia.

M¨¢s profundidad que nunca

A ellos se les suman Eric Gordon y Mason Plumlee, dos piezas veteranas que vienen a reforzar facetas que ya ten¨ªan cubiertas y otras que estaban hu¨¦rfanas. El que fuera escolta de los Houston Rockets durante siete temporadas asegura puntos desde el banco. Complementar¨¢ as¨ª a un Norman Powell que, hasta ahora, ten¨ªa este rol, y a un Hyland que ya se destac¨® desde su etapa en la universidad de VCU (Universidad de la Mancomunidad de Virginia) como desatascador de partidos y cuyo estilo se asemeja al del streetball callejero. Espect¨¢culo asegurado tambi¨¦n en la segunda unidad de Tyronn Lue.

El caso de Plumlee es distinto. Los Clippers necesitaban un interior de garant¨ªas que pueda dar descanso a Zubac y aporte cuando est¨¦ en cancha. El ex de los Hornets es el indicado. Trabajo en los aros, puntos debajo de la canasta, facilidad para generar ventajas a partir de sus bloqueos y experiencia. ¡°Ech¨¢bamos de menos a un jugador que pudiese suplir a Zu (Ivica Zubac). Ahora puede tener descanso en lugar de jugar m¨¢s minutos¡±, coment¨® Kawhi Leonard tras la victoria en Phoenix antes del par¨®n del All-Star.

A las llegadas se suman las salidas y los ya presentes. Luke Kennard, que sali¨® en el cierre de mercado direcci¨®n Memphis, puede ser una baja sensible. Gordon, Hyland y Powell tratar¨¢n de suplir el acierto de un tirador que marca el segundo mejor porcentaje desde el triple (46,2%) desde el triple en toda la NBA. Los Clippers son el 5? mejor equipo en este apartado (38,1%), por lo que baja del ex de Pistons puede parecer asumible.

Precisamente Gordon vuelve a la que fue su casa entre 2008 y 2011. ?l mismo defini¨® lo que puede aportar el pasado 13 de febrero, cuando concluy¨® su primer entrenamiento con la camiseta angelina en las instalaciones de Playa Vista. ¡°Todo el que no sea ninguno de ellos (Kawhi y George), tiene que estar preparado y tomar decisiones r¨¢pidas como tirar o ir hacia el aro¡±, apunt¨®.

¡°Tenemos todo lo que necesitamos. Tenemos directores de juego, anotadores, defensores... Nos falta encontrar una identidad de grupo¡±, coment¨® George en el vestuario tras el triunfo ante los de Arizona. Quiz¨¢ el problema pueda pasar por ah¨ª. Con el Kawhi Leonard m¨¢s sano, o el que aparece de manera m¨¢s regular, de los ¨²ltimos meses, la hoja de ruta va tomando forma. Hasta entonces, sin un l¨ªder, los resultados depend¨ªan del nivel de Paul George o grandes actuaciones espor¨¢dicas de alguno de los compa?eros.

Las piezas siempre han estado ah¨ª. Los Clippers han contado con una de las plantillas m¨¢s profundas durante las ¨²ltimas campa?as. Covington, Mann, Batum, Marcus Morris, un gran talento por desarrollar como BJ Boston, con cualidades en ataque espectaculares, y jugadores como Nate Darling, que est¨¢ haciendo una gran campa?a en los Ontario Clippers de la G-League, Moussa Diabate, franc¨¦s de 21 a?os y Amir Coffey, capaz de meter 35 puntos en un partido NBA (vs Oklahoma en abril de 2022) capaces de, por si hiciera falta, contribuir en lo que queda de temporada regular. En playoffs, al limitarse la rotaci¨®n, ser¨¢ la hora de los fichajes y los veteranos del vestuario.

Saber hacia d¨®nde ir y conocer la funci¨®n de cada uno en el camino. La manera en la que se forjan los equipos campeones es por haber pasado mil batallas juntos, por sufrir en los malos momentos y festejar en los buenos. Por primera vez, desde que, en 2019, los Clippers volviesen a amenazar el trono de la NBA, las esperanzas pueden materializarse en resultados. Han conseguido el plantel m¨¢s vers¨¢til, experimentado y talentoso desde que el objetivo es el campeonato. Es el momento que parec¨ªa imposible alcanzar, la hora de salir del bucle infinito de la decepci¨®n y reconducir un proyecto que a¨²n tiene mucho que decir.