Los cimientos de Espa?a

Nunca se empieza por el tejado. Para alcanzar el ¨¦xito se debe partir siempre de unos buenos cimientos. Fuertes, s¨®lidos, robustos. Es un principio b¨¢sico que la Federaci¨®n Espa?ola de Baloncesto (FEB) tiene muy claro: si quieres grandeza con los mayores, tienes que cuidar y construir desde los peque?os, desde unas categor¨ªas inferiores que alimentan a las Absolutas con una filosof¨ªa de Familia que va de abajo hacia arriba, y que verano tras verano no paran de cosechar ¨¦xitos dentro de las canchas.

En los dos veranos siguientes a la pandemia por la COVID-19, las Selecciones inferiores de Espa?a han dominado el panorama europeo e internacional. Ocho finales de ocho posibles en 2022 con tres oros y cinco platas. Cinco de ocho en 2023 con dos oros y tres platas a los que hay que a?adir dos bronces. Entre esas medallas, cuatro mundiales con el primero puesto en el masculino Sub-19 de M¨¢laga tras ganar a Francia en la final y la segunda posici¨®n en el femenino de la misma categor¨ªa de Madrid despu¨¦s de caer por la m¨ªnima ante el ogro estadounidense como grandes hitos.

Enormes logros que no caen del cielo. ¡°Recogemos los frutos del trabajo que ha realizado mucha gente durante muchos a?os. El de los clubes es fundamental, tambi¨¦n el de las federaciones auton¨®micas, sobre todo, en las etapas iniciales. Tenemos los mejores entrenadores. Es indispensable la labor de los jugadores y jugadoras: su implicaci¨®n y su compromiso cada vez que vienen aqu¨ª es fant¨¢stico. Las propias familias, que se vuelcan con todo lo que les pedimos. De toda la familia del baloncesto espa?ol. Nosotros, simplemente, aglutinamos el trabajo de muchos para darle visibilidad y representar al baloncesto espa?ol en nombre de todos¡±, explica Jos¨¦ Ignacio Hern¨¢ndez a AS las claves del ¨¦xito en las categor¨ªas de formaci¨®n. El director deportivo de la FEB es el punto de anclaje de un trabajo ingente que sigue de forma directa a m¨¢s de 300 jugadores y jugadoras (a¨²n m¨¢s de manera indirecta).

El trabajo de los coordinadores

Una labor colosal que ser¨ªa imposible sin el esfuerzo de los coordinadores Elena Lahoz, David Soria, Manolo Aller y Anna Junyent. Ellos se encargan de la comunicaci¨®n con los clubes y con las federaciones, de monitorizar a estos j¨®venes internacionales, de controlar a cada una de las generaciones para ver qu¨¦ necesitan, qu¨¦ falta para mejorarlas a?o tras a?o. ¡°Tenemos una estructura bastante amplia para poder, obviamente, dar cada verano las mejores herramientas, las mejores condiciones de trabajo para que los resultados sean positivos en todos los sentidos¡±, contin¨²a Hern¨¢ndez, que vive desde este s¨¢bado el comienzo de un nuevo verano de selecciones con el debut de la Sub-17 en el Mundial masculino de Estambul (Turqu¨ªa). Mucha fe en estos chicos desde la FEB. Y tambi¨¦n en las chicas que disputar¨¢n el campeonato intercontinental en M¨¦xico del 13 al 21 de julio: ¡°Confiamos que puedan competir a gran escala tras los dos buenos europeos Sub-16 de estas generaciones¡±. Espa?a afrontar¨¢ seis torneos m¨¢s, europeos todos ellos, hasta el 24 de agosto cuando se cierre el continental femenino Sub-16.

¡°Afrontamos este verano con mucha ilusi¨®n, mucha responsabilidad y con ganas de seguir viendo el nivel y progresi¨®n de nuestros jugadores y jugadoras. Queremos intentar competir al mejor nivel posible despu¨¦s de los dos ¨²ltimos veranos tan exitosos y conseguir buenos resultados deportivos, que son importantes para nuestro baloncesto, pero siempre priorizando la formaci¨®n¡±, prosigue el salmantino, que quiere quitar presi¨®n tras el masivo bot¨ªn conquistado en los extraordinarios 2022 y 2023: ¡°Tenemos claro que el a?o que no se consigan tantas medallas, el trabajo ser¨¢ el mismo. Al jugador no se le exige en ning¨²n momento conseguir medallas¡±.

La labor invernal

Los resultados, las luces, los ¨¦xitos y la pompa lucen durante un periodo estival que ha dado a Espa?a 104 medallas en categor¨ªas de formaci¨®n (51 los chicos y 53 las chicas) desde la primera, una plata masculina, en 1973. La femenina, tambi¨¦n plata, lleg¨® en 1990 gracias a la Sub-18. Los primeros oros para ambas categor¨ªas, en 1998. Al sol de julio y agosto. Pero es durante el fr¨ªo y oscuro invierno cuando se ponen la bases con un trabajo ¡°muy intenso de seguimiento que es fundamental¡±. Lahoz, Soria, Aller y Junyent pican piedra todo el a?o, desde la Sub-12 cuando nace todo con un peque?o grupo para ver la estructura f¨ªsica que tiene la generaci¨®n. Sus ojos se posan en el gran n¨²mero de competiciones que hay durante el a?o en el territorio nacional: campeonatos de Espa?a de selecciones auton¨®micas y de clubes que otorgan un gen competitivo y de presi¨®n a los chicos y chicas que dan cierta ventaja de salida a las selecciones con respecto a otros pa¨ªses.

La labor de prospecci¨®n de la FEB ya no se circunscribe al ¨¢mbito nacional. Estados Unidos empuja fuerte y cada vez cuenta con m¨¢s representantes espa?oles. Las jugadoras siempre han sido las m¨¢s aventureras, pioneras y con n¨²mero superior al de los chicos, que empiezan a emigrar m¨¢s a tierras norteamericanas tras la aprobaci¨®n de los derechos NIL, que permiten a las universidad pagar a sus estudiantes-deportistas, y como puerta m¨¢s accesible a la NBA. ¡°Ahora mismo hay que cambiar tambi¨¦n un poco el espectro por ese motivo. Es verdad que el n¨²mero de jugadores es menor, pero hay un volumen importante en su seguimiento porque se marchan algunos (Aday Mara, Izan Almansa) con mayor incidencia en las selecciones nacionales y, por tanto, de nuestro baloncesto. En chicas, el seguimiento es sobre unas 25-30¡å, subraya Hern¨¢ndez, el hombre que forja unas categor¨ªas inferiores que en el futuro nutrir¨¢n a las Absolutas.

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