Georgia-Espa?a: golpe doloroso en Tiflis

¡°Sakartvelo, sakartvelo¡±. As¨ª gritan con el alma el nombre de su pa¨ªs en el Tblisi Arena los georgianos, que viven una explosi¨®n de exaltaci¨®n nacional estos d¨ªas en los que tambi¨¦n proclaman su vocaci¨®n europe¨ªsta. Para alimentar m¨¢s su orgullo, su selecci¨®n, a lomos de su triente McFadden-Shenglelia-Shermadini, y con un invitado especial, Andronikashvili, castig¨® a Espa?a en la pr¨®rroga con su primera derrota en la fase de grupos de clasificaci¨®n para el Mundial. No es alarmante, pero s¨ª un golpe doloroso. Espa?a jug¨® con ardor, o se entreg¨® y sac¨® esa fe que le ha convertido en una Selecci¨®n ¨²nica, pero cuando suben los escalones de calidad, como explicaba Scariolo en Zaragoza el pasado viernes, los errores se penalizan. Y no fue el d¨ªa de los bases. A Colom, tantas veces salvador, se le hizo peque?o el aro (0/7 en tiros); y dos p¨¦rdidas de Ferran Bassas en instantes muy concretos hicieron volar a Georgia a la victoria (82-76). Pese a que en el horizonte se otea alg¨²n rival d¨¦bil como Pa¨ªses Bajos en la siguiente fase, Esa?a viajar¨¢ con cierta obligaci¨®n a Riga para medirse a Ucrania. En Tiflis, la moneda cay¨® cruz.

Fue una tarde bien bonita de baloncesto en Tiflis. Una canasta sobre la bocina de Shengelia firm¨® el 37-31 con el que el partido se fue al descanso. Las cartas estaban sobre la mesa. El jugador de la Virtus, que en la previa hab¨ªa departido amigablemente con Scariolo en el lobby del hotel Courtyard Marriott de Tiflis, y Shermadini, ocho puntos cada uno, golpeaban los ri?ones de la Selecci¨®n, que trataba de multiplicarse en las ayudas pero que sufr¨ªa ante el talento de los jugadores franquicia de Georgia. La primera parte result¨® inc¨®moda para Espa?a, que tard¨® m¨¢s de 13 minutos en anotar su primer triple (Brizuela, 21-19) para una discret¨ªsima serie de 2/10. Scariolo, como suele, hab¨ªa trabajado el marco defensivo del partido. Sali¨® con Arostegui sobre McFadden y con ayudas sobre el poste de Shengelia, que prefiri¨® buscar al jugador liberado en los primeros minutos, pero luego cambi¨® de estrategia y decidi¨® amasar m¨¢s bal¨®n. Despu¨¦s de un primer cuarto pobre en anotaci¨®n (15-14, con canasta tambi¨¦n sobre la bocina de Bekauri).

El tercer cuarto tuvo un desarrollo algo sorprendente. Aunque la Selecci¨®n no terminaba de estar redonda y Georgia rasc¨® la m¨¢xima diferencia (41-33), un parcial de 0-8 rematado con un triple de Ferran Bassas dej¨® el partido empatado en el minuto 26 (41-41). Pradilla lo alarg¨® en una transici¨®n para poner por delante a la Selecci¨®n (41-43). A Georgia le penalizaron los minutos en el banquillo de la doble S (Shengelia y Shermadini). Espa?a los aprovech¨® relativamente, se llev¨® el parcial del cuarto (7-16) y apareci¨® en el ¨²ltimo cuarto con una m¨ªnima ventaja (44-47).

Ilias Zouros no tard¨® un segundo m¨¢s y meti¨® en la pista a McFadden, Shengelia y Shermadini. Georgia y Espa?a se cruzaron fuego. Un parcial local de 5-0 (51-50) fue contestado por otro de la Selecci¨®n (0-7), en la que figura de Arostegui empez¨® a emerger. El alero del Valencia hizo de chico para todo. Rob¨®, paso y anot¨®. Pero la Selecci¨®n no consigui¨® hacer la diferencia definitiva con el 53-59. McFadden meti¨® a Georgia en el partido con una canasta heroica y Shengelia devolvi¨® la ventaja a los cauc¨¢sicos. El partido abraz¨® la ¨¦pica en los ¨²ltimos minutos con canastones de Shengelia y un triplazo de L¨®pez Arostegui. Una p¨¦rdida de Ferran Bassas castigada con un mate de Andronikashvili pareci¨® poner el partido imposible a Espa?a (67-64), pero Brizuela se invent¨® un triple heroico (67-67) a 18 segundos del final que hizo callar a la enfervorecida marabunta. Shengelia se jug¨® el tiro final pero, a diferencia del primer y el segundo cuarto, fall¨® y el partido se fue a la pr¨®rroga con 67-67. La Selecci¨®n la empez¨® bien, con canastas de Guerra y Brizuela, pero justo cuando ten¨ªa el partido para rematarlo, Bassas, cansado, perdi¨® un bal¨®n en una transici¨®n. Andronikashvili castig¨® al base del Joventut con una canasta y lo remat¨® con un triple (80-76), que Bassas defendi¨® por detr¨¢s. No era el d¨ªa de los bases, no fue la tarde de Espa?a sino del orgullo goergiano. ¡°Sakartvelo, sakartvelo¡±, sigue retumbando el pabell¨®n a estas horas.