El Movistar Estudiantes sobrevive en el barro
Los colegiales enlazan su sexta victoria tras derrotar a un Hestia Menorca que trat¨® de minar el ritmo del col¨ªder durante todo el partido.
Otro partido, otra victoria. La sexta seguida. La s¨¦ptima en ocho jornadas. Col¨ªder junto al San Pablo Burgos. El Movistar Estudiantes sigue su galope particular en busca del horizonte deseado: el ascenso a la Liga Endesa. En esta ocasi¨®n, en este domingo fr¨ªo de Madrid, su v¨ªctima fue el Hestia Menora (81-56), un reci¨¦n ascendido forjado con mimbres del Ramiro: desde Javier Zamora, su entrenador, hasta el cedido Emil Stoilov pasando por Diego Alderete (el hermano de H¨¦ctor), Pablo Su¨¢rez y ?lex Tamayo. V¨ªctor Arteaga, cinco temporadas como colegial, tambi¨¦n intenta remontar vuelo en la isla balear.
Un partido de reencuentros. Especial para la afici¨®n estudiantil por ver lo que pudo ser y no es. Emotivo para los canteranos exiliados por regresar a la casa en la que crecieron. En la que se formaron. Muchos abrazos. Muchos saludos. Muchos recuerdos. Pero eso fue antes de que el bal¨®n volara porque desde ese momento todo lo que era bello y hermoso acab¨® en el barro, el que coloc¨® Zamo para tratar de detener al Estudiantes, que en sus dos ¨²ltimos encuentros en casa promediaba 98 puntos y que llegaba despu¨¦s de endosarle 80 al Fuenlabrada en la ¨²ltima jornada.
Y funcion¨®. Muchas minas en defensa que frenaron la libre circulaci¨®n colegial: solo 17 tantos en el primer cuarto y 15 en el segundo. Al descanso, un 32-25 ilusionante para el Menorca. Marcador bajo como en su triunfo ante el Leyma Coru?a. El Estu solo hab¨ªa repartido 3 asistencias en 20 minutos. 3 de 8 desde el triple. Los ataques menorquines consum¨ªan, casi siempre, los 24 segundos. Nada de velocidad ni de alegr¨ªa para el contrario. Pero tanto esfuerzo, con muchas variantes, zonas y cambios, carg¨® de faltas al Hestia, que hizo 16 (al final, 28) y llev¨® a los madrile?os 18 (26) veces a la l¨ªnea de personal. Para muestra, un bot¨®n: Carrera anot¨® los 9 primeros puntos locales, 7 desde el tiro libre. Tomaic, otro ejemplo, con cuatro infracciones en tan solo 4:30 en cancha. Los baleares se engancharon a la inspiraci¨®n de Lo, que hizo 13 tantos con un 3 de 6 desde el triple ante la complacencia rival. No sal¨ªan a puntearle. Que el senegal¨¦s lanzara (y encestara) era un da?o menor siempre que Clevin Hannah no entrar en juego¡ y el base estadounidense fue borrado: solo 3 puntos en 30 minutos asfixiado por Adams Sola y Alec Wintering, que tambi¨¦n tuvo tiempo para ser el m¨¢ximo anotador del duelo con 16 tantos.
A pesar de esta labor de desgaste menorquina todo apuntaba a que el Estu ten¨ªa la victoria en su mano. Solo faltaba el empuj¨®n. Y lleg¨® r¨¢pido. En el primer minuto del tercer periodo, Carrera de inicio y Larsen despu¨¦s dispararon el marcador por encima de los 10 de diferencia (36-25). Unos poco intercambios de golpes m¨¢s y apareci¨® Wintering para poner el +14 (48-34). Carrera, desde el triple, rompi¨® la barrera de los 20 de diferencia (58-37). La puntilla. Pedro Rivero sac¨® a todos sus titulares de la cancha y dej¨® a la unidad B (A en cualquier otro equipo) aumentar la distancia con Leimanis al frente. Hugo L¨®pez tuvo muy buenos minutos ante Stoilov (incluso descerraj¨® un triple). M¨¢s abrazos. M¨¢s saludos nada m¨¢s terminar un enfrentamiento que deja a los ramire?os de nuevo l¨ªderes por el average de la LEB Oro con un balance de 7-1, el mismo que el del Burgos. El duelo sigue su curso.
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