Un paso por los maravillosos ochenta
630.000 visitantes, aficionados al baloncesto en peregrinaci¨®n, reclamaban un lugar mejor. Y este lleg¨®, con una inversi¨®n de 11 millones de d¨®lares, en 1985. Unas instalaciones futuristas junto al r¨ªo Connecticut, arquitectura moderna y un lugar para la informaci¨®n y el ocio. Eran los tiempos en los que arreciaba la era Magic Johnson-Larry Bird y se caldeaba la eclosi¨®n de Michael Jordan. La atracci¨®n favorita de los aficionados era la Spalding Shootout, que les permit¨ªa lanzar tiros a canasta sobre una plataforma en movimiento. En 2002, lleg¨® la mudanza definitiva, por ahora: edificio de 47 millones un poquito m¨¢s al sur, con 7.400 metros cuadrados, una lujosa tienda de regalos, exposiciones interactivas, salones para actos y eventos y una pista a tama?o real en la que se puede jugar. Ese curso de 2002, el de la inauguraci¨®n, introdujo en el Hall of Fame a Magic Johnson, Drazen Petrovic, los Harlem Globetrotters¡