Messina y Mirotic, doce a?os despu¨¦s
El entrenador italiano y el ala-p¨ªvot montenegrino se reencuentran en Mil¨¢n, donde tratar¨¢n de hacer ¡®click¡¯ con la Euroliga como gran obsesi¨®n para los dos.
As¨ª es la vida: en 2023, Ettore Messina y Nikola Mirotic se reencuentran en Mil¨¢n, doce a?os despu¨¦s de su experiencia juntos en Madrid y en un momento cr¨ªtico para ambos. El t¨¦cnico (63 a?os) tiene la obligaci¨®n de devolver al Armani al primer competitivo despu¨¦s del desastre de la ¨²ltima temporada. El tiempo corre en su contra. Es, desde luego, uno de los grandes entrenadores de la historia del baloncesto europeo, pero por ahora no ha alcanzado el gran ¨¦xito continental en sus cuatro a?os en Mil¨¢n. Y ha pasado ya un cuarto de siglo desde su primera Euroliga (1998) y tres lustros (2008) desde la cuarta y ¨²ltima. Dos con la Virtus, dos con el CSKA¡ y nada m¨¢s. Pero si hay un nombre relevante de la competici¨®n que tiene una cuenta pendiente con ella es Mirotic, que sigue sin poder sumarla a su palmar¨¦s. No pudo con un Real Madrid que adem¨¢s la gan¨® en 2015, la primera temporada sin ¨¦l (se hab¨ªa ido a la NBA). No pudo con el Bar?a a pesar de tres visitas consecutivas a la Final Four.
M¨¢s de una d¨¦cada despu¨¦s y ya veteranos (63 el entrenador, 32 el ala-p¨ªvot) y con suficientes cicatrices despu¨¦s de tantos a?os en la ¨¦lite, Messina y Mirotic se vuelven a encontrar tras un culebr¨®n que acab¨® donde empez¨®: el Mil¨¢n fue el primer pretendiente que son¨® cuando se abri¨® el mel¨®n de la salida de Mirotic del Bar?a, entre la fat¨ªdica Final Four de Kaunas y el inicio de la final de la ACB. Entonces, Messina dijo que su club ¡°no pod¨ªa competir¡± econ¨®micamente por un jugador que ha acabado all¨ª despu¨¦s de negociar con Olympiacos, Panathinaikos, Estrella Roja o un Partiz¨¢n que tuvo casi atado al montenegrino. El reencuentro llega, para los dos, en un momento dif¨ªcil. Messina pas¨® un trago con un Mil¨¢n que en la pasada Euroliga lleg¨® a perder nueve partidos seguidos y acab¨® fuera de cuartos de final (un desastre) y en negativo (15-19). Mirotic acab¨® de muy mala manera su etapa en un Bar?a obligado a reducir presupuesto, incapaz de seguir absorbiendo su contrato y en shock despu¨¦s de la dur¨ªsima derrota en semifinales de la Final Four, contra el Real Madrid. El triunfo en la final de la ACB, con MVP para Mirotic, suaviz¨® el mal sabor de boca.
¡°Su fichaje es un gesto de amor de nuestro propietario, un est¨ªmulo para todos. Vamos a subir el nivel¡±, dijo un Messina que tambi¨¦n ha sugerido ya que ve a Mirotic como tres, alero puro, y no solo como ala-p¨ªvot: ¡°Ya jug¨® ah¨ª en la NBA y en el Bar?a. Probaremos, y si hacemos que los rivales tengan que adaptarse a nuestro f¨ªsico, mejor. Tambi¨¦n vamos a tener bases con m¨¢s f¨ªsico ahora¡±. El t¨¦cnico de Catania habla de Flaccadori y Maodo, que llegan para reforzar una rotaci¨®n exterior en la que finalmente sigue Kevin Pangos y en la que est¨¢n Billy Baron, Devon Hall, Giordano Bortolani¡ El equipo solo tiene ahora para el puesto de alero a Shavon Shileds. Sin Gigi Datome, que se retira tras el Mundial, Mirotic puede hacerse ah¨ª un hueco para dejar sitio a una tremenda bater¨ªa interior: Nicolo Melli, Alex Poythress, Johannes Voigtmann, Kyle Hines, Ismael Kamagate, Guglielmo Caruso... y Mirotic, claro, que sigue siendo esencialmente un ala-p¨ªvot.
Y que ha reconocido ya que era un punto a favor del Mil¨¢n la opci¨®n de reunirse con Messi: ¡°Esto feliz de jugar para Coach Messina, ya coincid¨ª con ¨¦l cuando era joven¡±. Mirotic se refiere a otro tiempo. Para ¨¦l, para Messina¡ y para el Real Madrid. Fichado en 2005, con 14 a?os, pas¨® por el Sub-20 y el LEB Bronce del equipo blanco y jug¨® la temporada 2009-10 en Palencia (LEB Oro), cedido. En la temporada anterior, con Joan Plaza, hab¨ªa debutado con el primer equipo del Real Madrid. Un 15 de marzo de 2009, contra el UCAM Murcia en Liga. Y once d¨ªas antes, en Euroliga nada menos que en un Cl¨¢sico, ganado (90-79) por el Bar?a en el Palau. Eran tiempos de superioridad del Bar?a y cierto complejo en un Real Madrid que quiso poner la ambici¨®n que hab¨ªa faltado los a?os anteriores con la llegada, en el verano de 2009, de Messina.
La p¨¦sima experiencia de Messina en Madrid
El italiano firm¨® por tres temporadas a raz¨®n de unos dos millones anuales. El objetivo era devolver al Madrid al primer plano continental y cambiar la inercia azulgrana de las competiciones dom¨¦sticas. El equipo llevaba 16 a?os sin ganar la Copa (desde 1993) y trece sin jugar una Final Four de la Euroliga (desde 1996). Pero la pol¨ªtica deportiva no acompa?¨®, falt¨® inversi¨®n y una direcci¨®n clara (durante la primera temporada llegaron, sobre la marcha, Jaric, Tomic, Almond¡) y Messina fue perdiendo el hilo del club, cada vez m¨¢s distanciado de la afici¨®n y el entorno y finalmente enfrentado al vestuario hasta su salida, de forma abrupta, en marzo de 2011 y despu¨¦s de una calamitosa derrota contra el Siena (77-95). Se ayudante, Lele Molin, cogi¨® al equipo y lo meti¨® en la Final Four del Sant Jordi, donde el Maccabi fue un rival inaccesible en semifinales.
En su poco m¨¢s de temporada y media, Messina perdi¨® dos finales de Copa contra el Bar?a, no meti¨® al equipo en la final de la ACB 2010 y en Europa tambi¨¦n perdi¨® en cuartos contra la mejor versi¨®n de siempre de los azulgrana, el Barcelona campe¨®n de la Euroliga en 2010. Para muchos, le falt¨® tacto y conexi¨®n con un club como el Real Madrid. Y tambi¨¦n, desde luego, la potencia de fuego que hab¨ªa tenido en Bolonia (Gin¨®bili, Rigodeau, Jaric, Andersen, Smodis¡) y Mosc¨² (otra vez Smodis y Andersen adem¨¢s de Papaloukas, Langdon, Lorbek, Siskauskas, Lorbek¡). Fue un divorcio feo, sin buenas caras y con sensaci¨®n de fracaso para las dos partes. Al Real Madrid, al menos, le dur¨® poco porque en 2011 comenz¨® la era Pablo laso.
Una de las mejores cosas que dej¨® Messina en su corta y mala etapa blanca fue la confianza en Mirotic. Despu¨¦s de esas pinceladas antes de irse a Palencia, fue con Messina en la temporada 2010-11 cuando el ala-p¨ªvot se asent¨® en el primer equipo del Real Madrid y fue de menos a m¨¢s hasta que despunt¨® definitivamente un 26 de enero con 16 puntos, 4/4 en triples y 26 de valoraci¨®n en una victoria de prestigio en Siena. En junio ser¨ªa drafteado (pick 23), aunque no salt¨® a la NBA hasta 2014. En esa temporada, que comenz¨® con 19 a?os, ya promedi¨® 8 puntos y 4 rebotes en Liga y unos n¨²meros similares en Euroliga.
Doce a?os despu¨¦s, vuelven a encontrarse. Con la Euroliga como obsesi¨®n y en busca de un click que veremos si llega en Mil¨¢n. Buscan ¨¦xitos y buscan paz. As¨ª que, si se mira as¨ª, seguramente estaban destinados a encontrarse. Y condenados a entenderse. As¨ª es desde que el Bar?a, atrapado por los contratos que nadie le oblig¨® a firmar, decidi¨® que su futuro ya no pasaba por el descomunal (aunque a veces distante) talento de Nikola Mirotic.