La adaptaci¨®n al Panathinaikos de Ataman: ¡°No ser¨ªa f¨¢cil aunque fueras Curry o LeBron¡±
Ergin Ataman batalla para dar el ensamblaje necesario a un Panathinaikos que aspira a todo en la Euroliga pero es m¨¢s de nombres que un equipo.
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El Panathinaikos contin¨²a en su intento de mejorar las prestaciones ofrecidas hasta ahora. El megaproyecto que ha surgido en Atenas despu¨¦s de casi una d¨¦cada de bandazos se ha reducido a muy poco en los dos meses de vida desde que ha echado a andar. El resurgimiento de este seis veces campe¨®n de la Copa de Europa, tres en cuatro a?os a principios de siglo, a golpe de talonario no es f¨¢cil de asumir entre los jugadores que deben hacer la magia.
Una colecci¨®n de cromos en la que Kostas Sloukas es la joya de la corona por dos razones: se lo quitaron al Olympiacos y lo hicieron pag¨¢ndole 10 millones netos para los pr¨®ximos tres a?os. Uno de los p¨ªvots dominantes el a?o pasado, Mathias Lessort, potenci¨® la pintura. Kyle Guy, querido por medio continente, es la apuesta como tirador experto. Por fuera, Grant y Vildoza para producir junto a Sloukas; por dentro, Balcerowski y Juancho (ahora lesionado; tiene para al menos dos meses de baja) para ayudar a Lessort. Papapetrou y Mitoglou han regresado para dar el toque griego al plantel. Todo ello, una inversi¨®n que ni mucho menos va a estar amortizada como no lleguen los t¨ªtulos.
El Panathinaikos intenta situarse en el primer plano despu¨¦s de varios a?os observando que su masa social no acude con el mismo volumen ni ganas al pabell¨®n como en los buenos tiempos. Las plantillas han ca¨ªdo tanto que el valor del club de cara a propios y extra?os ha menguado. Esta mala racha, debida a una inversi¨®n menor en el ¨²ltimo lustro, hizo que Dimitris Giannakopoulos, folcl¨®rico propietario, saca millones de donde antes no hab¨ªa.
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Al frente de este tinglado se ha puesto Ergin Ataman, otro actor del baloncesto europeo al que le gusta el lodazal. Viene con la vitola de grande en el pa¨ªs rival, Turqu¨ªa, despu¨¦s de ser campe¨®n con el Efes en 2021 (ante el Bar?a) y 2022 (ante el Madrid). En su habitual gusto por pisar charcos ya ha calificado el juego de su equipo como ¡°terrible¡± u ¡°horrible¡± en una derrota en la liga griega y apunt¨® a Hernang¨®mez sin mencionarle despu¨¦s de la derrota en el Palau contra el Bar?a (¡°espero que encontremos la manera de mejorar el juego, especialmente con jugadores que tienen mucho nombre pero de momento no me han demostrado ni el nivel ni la calidad que esperamos de ellos¡±). Lo que han comprado es lo que ha llegado, sin dobles caras ni o¨ªdos regalados.
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El entrenador, despu¨¦s de que las primeras semanas hayan sido movidas, ha reclamado uno o dos fichajes a la direcci¨®n deportiva para hacer progresar al equipo. El primero, no sabemos si ¨²ltimo, ya lleg¨®. Kendrick Nunn, tambi¨¦n pretendido por sus rivales del Olympiacos, llega para reforzar la direcci¨®n en el parqu¨¦.
Llegado desde la NBA, donde sobre todo destac¨® en las Finales de 2020 en la burbuja jugando para Miami Heat, ha apostado por jugar overseas despu¨¦s de infructuosos pasos por los Lakers y los Wizards. Esta experiencia en el extranjero le llega a los 28 a?os, en plena madurez, y Ataman le ha advertido de que el cambio de un estilo a otro de baloncesto no es nada sencillo. ¡°Aunque fueras Stephen Curry o LeBron James no ser¨ªa sencillo adaptarse en una semana o diez d¨ªas, para el jugar y para que nosotros lo encajemos en el sistema. Nunn es un gran jugador con enorme calidad, pero necesita tiempo para involucrarse en el equipo y entender a los compa?eros. Cuando comprenda eso nos va a dar mucho¡±, apunt¨® el turco. Nunn debut¨® en la competici¨®n dom¨¦stica con -4 de valoraci¨®n, de ah¨ª el capote.
El combinado, con cuatro derrotas en sus ocho partidos jugados de Euroliga, necesita mejorar sus n¨²meros colectivos para alcanzar las diez primeras posiciones de la Euroliga, las que dan derecho a las eliminatorias, cuando expire la fase regular. Los ajustes, de no ir rodada la cosa a partir de aqu¨ª, s¨®lo acaban de empezar.