El Madrid de las haza?as pelear¨¢ por la Und¨¦cima

Sin Deck ni Poirier, sin el sancionado Yabusele, con un canterano como Ndiaye echando una mano y con Tavares y Hezonja cargando con toda la responsabilidad por dentro, el Madrid hizo sonar de nuevo la campana (66-78), esta vez en Kaunas, aunque se escuch¨® en toda Europa. Arranc¨® fuerte, vio c¨®mo el Barcelona le adelantaba y tuvo temple para no descolgarse, para resistir y pegar un zarpazo de 0-15 en el tercer cuarto que record¨® a la reacci¨®n de hace un a?o en Belgrado. Remach¨® en los ¨²ltimos seis minutos, con nueve puntos de Sergio Rodr¨ªguez en 1:25 combin¨¢ndose en varios pases con Llull. La vieja guardia. El remate a una resplandeciente noche blanca, en la que mucho de lo dem¨¢s lo sostuvo Tavares, que acab¨® eliminado a Sanli y casi a Vesely. El mejor interior del continente hizo 20 puntos (7 de 9 de dos), 15 rebotes y 4 tapones apuntados, cuatro, seguro, en el tramo cr¨ªtico, para 39 de valoraci¨®n. Entre los dos Sergios a?adieron 10 asistencias y Hezonja complet¨® una actuaci¨®n de estrella de rock con 14+9 y el triple de la puntilla: 66-76 a 35 segundos de la bocina. En el Bar?a, el barco se hundi¨® en la segunda parte (24-42), qued¨® solo Laprovittola cargando hasta la extenuaci¨®n, y Abrines. Ni Mirotic, en noche negr¨ªsima, ni Satoransky cuando hab¨ªa que apretarse los machos, ni Vesely¡­ No hubo rescatador. Jasikevicius tampoco supo c¨®mo meterle mano a la situaci¨®n. Faltaba Higgins, faltaba un bloque inequ¨ªvoco en su rumbo y se despe?¨® por la calle del triple (39 ensayados, solo el 35% acertados, 5 de 25 en la segunda parte; y un paup¨¦rrimo 10 de 30 de dos y 4 de 11 desde la personal). El Madrid pelear¨¢ el domingo, a las 19:00 horas ante el Olympiacos griego, por su und¨¦cima Copa de Europa en su vig¨¦sima final. Historia por hacer.

El baloncesto permite muchos caminos para alcanzar el objetivo, lo comprobamos en el primer cuarto, en el que el Madrid domin¨® en casi todos los aspectos, con Tavares cuid¨¢ndose much¨ªsimo de hacer una falta, y aun as¨ª y¨¦ndose hasta los 10 puntos y 6 rechaces en esos diez minutos, y con el Bar?a empatando el acto a 18 porque emboc¨® 6 de sus 9 triples (tres de Abrines) y le dio hasta igual no meter ninguna de dos hasta el minuto 12. Ndiaye, a todo esto, titular con 18 a?os y muy bien frente a Mirotic: le fren¨® en un par de acciones, le meti¨® un tiro y le sac¨® una falta. Sensaci¨®n de seguridad para unos, ten¨ªan la mirilla calibrada, y de frustraci¨®n para los otros, que no plasmaban el dominio.

En el segundo acto, Tavares se dio un buen respiro, Jokubaitis aprovech¨® para irrumpir con fuerza y estrenar el casillero azulgrana de dos y repetir a la siguiente antes de golpearse con el parqu¨¦ y romperse dos dientes. La balanza se desequilibraba. Musa no hab¨ªa entrado en juego en ataque, impreciso, Goss solo al principio y el Real no creaba. Causeur se com¨ªa un par de bolas, Rudy hac¨ªa dos aguas en sendos triples, luego repet¨ªa Hezonja, aunque el croata fuera al ¨²nico que se le ve¨ªa con capacidad de replicar. Y a Randolph, que sacaba tajada bajo canasta de los cambios defensivos con bajitos. En las filas cul¨¦s, al accidentado Jokubaitis le cog¨ªa el testigo Satoransky, muy incisivo hacia dentro (le echaron de menos cuando la meta asomaba). Y emerg¨ªa Kuric, en uno de esos d¨ªas en el que el tacto con el bal¨®n le acompa?aba. Hab¨ªa regresado Tavares, pero sin la contenci¨®n inicial. Carg¨® con el cuerpo contra Mirotic (primera falta) y luego se revolvi¨® exageradamente en una pugna con Nnaji (segunda personal). No pod¨ªa hacer la tercera, as¨ª que el Bar?a lo explot¨®. Se puso con +7 y, cuando llegaba el descanso, con +9 (42-33) antes de un triplazo de Llull: 42-36. El tim¨®n lo agarraban los de Jasikevicius pese a las 10 p¨¦rdidas y el 1 de 5 desde el tiro libre.

En la reanudaci¨®n volvieron a igualarse las fuerzas, Mirotic, ahora con Hezonja, no cog¨ªa la onda buena (0 de 8, concluy¨® con 1 de 10 casi desesperado), la defensa merengue dejaba de ser porosa y el acierto de los francotiradores azulgranas desaparec¨ªa. Tavares, de nuevo la figura sobre la que pivotaba todo. Su golpe en la mesa hac¨ªa ruido: 0-15 en cinco minutos y 47-54. En medio, una refriega. Vesely empujaba a Hanga y este le enganchaba del brazo cometiendo antideportiva. Ni los libres ni el saque posterior encendieron la luz del favorito. La muralla blanca crec¨ªa y le permit¨ªa alguna carrera, por la que Musa, incapaz de romper en est¨¢tico, se colaba en el Cl¨¢sico. Y buenos momentos de Goss, mientras que Jasikevicius hab¨ªa optado por sentar a Mirotic y poner a Kalinic de cuatro. Apenas cuatro p¨¦rdidas del Madrid en la segunda parte.

Kuric y Lapro recompusieron la figura propia desde el triple (58 iguales). El argentino no paraba de forzar faltas, granito a granito, haciendo granero y¡­ nuevo apag¨®n, esta vez general. En cuatro minutos, 3-0, restaban seis, seis para saber qui¨¦n se colar¨ªa en una nueva final de la Euroliga. Y para ese tramo hirviente, Chus Mateo lo tuvo claro, la vieja guardia al frente de las operaciones: Sergio Rodr¨ªguez, Llull y Rudy. Y saben qu¨¦, no defraudaron. Enormes. El Chacho puso en ¨®rbita la nave blanca con 9 puntos en 1:25, en un par de 2x2 fant¨¢sticos con El Incre¨ªble. Genio del baloncesto mundial, que dir¨ªa aquel. Y ese break, ese 60-67 enterr¨® las ilusiones europeas del Barcelona, del tercer a?o del proyecto de Jasikevicius. A la lona sin opci¨®n de levantarse, porque Tavares tampoco lo iba a permitir, arrasando con su imponente presencia, en el rebote, anotando y forzando faltas y con hasta cuatro intercepciones o tapones en esos instantes cr¨ªticos. Colosal. Los viejitos, que dir¨ªa Nocioni, tienen un baile m¨¢s, a por la Und¨¦cima, esta vez con Chus Mateo en el banquillo, que se lo ha ganado sin hacer ruido, sin una mala cara, ¡°desdramatizando¡±, como suele decir. Ha tragado quina esperando su momento y aqu¨ª lo tiene.