El Bar?a alcanza la velocidad de crucero

Se anticipaba un partido igualado, duro, f¨ªsico pero nada de eso sucedi¨®. La Virtus aguant¨® el tipo diez minutos en una actuaci¨®n lamentable, en un partido para olvidar de los italianos, que se rindieron antes de hora. El Bar?a, adem¨¢s, ray¨® la excelencia. Buenos tiros de tres, gran defensa y jugando con la capacidad de castigar las carencias del rival. Un partido redondo, f¨¢cil y c¨®modo. Tanto, de hecho, que los azulgranas se dejaron ir al final.

A la Virtus le cost¨® algunos minutos amoldarse al Bar?a. Permitieron los italianos demasiado en el inicio, con tiros f¨¢ciles para Laprovittola y Mirotic que no perdonaron. Son los dos jugadores con mayor capacidad anotadora del Bar?a y dejarles c¨®modos es un suicidio para cualquier equipo. Shengelia y Teodosic ya mostraron que la Virtus ten¨ªa algo que decir en el partido pero tras un intercambio de posesiones r¨¢pidas el Bar?a cogi¨® la delantera (6-14). C¨®modos en ataque, la preocupaci¨®n era cerrar el rebote defensivo y controlar a la Virtus por dentro.

Una preocupaci¨®n que ven¨ªa ya de antes de empezar el partido. Coincidieron en la convocatoria Nnaji, Vesely, Sanli y Tobey y eso no es casualidad. Y que los cuatro hombres grandes del equipo, con permiso de Mirotic, jueguen el mismo partido no es usual. Y raz¨®n ten¨ªa Jasikevicius, pues cuando la Virtus super¨® la primera presi¨®n hizo da?o por dentro. De hecho, tuvieron un tiro para ponerse por delante (23-24).

Pero cosas del baloncesto, fue sentir el aliento de los de Scariolo y despegar el Bar?a. Quiz¨¢s tard¨® demasiado en pararlo el t¨¦cnico de la Selecci¨®n (el parcial era ya de 0-16) pero es que a su equipo le llovieron los puntos en contra. Abrines, que hace ya varios partidos que est¨¢ en un momento de forma espl¨¦ndido, les castig¨® de tres. Y Satoransky. Y Laprovittola. El Bar?a jug¨® casi a placer hasta el 23-40 castigando todas las carencias defensivas de los italianos. El apag¨®n de la Virtus fue de los que cuestan partidos. Y la actuaci¨®n de Abrines de los que los ganan.

Le quedaba a la Virtus tirar de orgullo, recortar ligeramente la desventaja y meterle el miedo en el cuerpo al Bar?a pero nada de eso sucedi¨®. La desastrosa defensa local, rozando la desidia, dio todav¨ªa m¨¢s facilidades al Bar?a. El vergonzoso tercer cuarto de los italianos fue simplemente incomprensible, propio de un equipo que ha bajado los brazos. ?El problema? que quedaban 20 minutos por jugar. Lleg¨® el Bar?a a tener dos balones para ponerse 40 arriba, 33-70, en la victoria m¨¢s c¨®moda de los azulgranas en toda la temporada.

El ¨²ltimo cuarto, un tr¨¢mite, cay¨® claramente del lado local. Poco import¨®, la victoria sigui¨® siendo muy c¨®moda y siempre qued¨® la sensaci¨®n que, de haberlo necesitado, el Bar?a habr¨ªa hecho mucho m¨¢s. Simplemente la desidia cambi¨® de bando, para el enfado de Jasikevicius. Probablemente el ¨²nico barcelonista que se march¨® ligeramente contrariado tras la victoria en Bolonia.