Thomasson y Pelos aparecen a tiempo para llevar al Granca a cuartos
No fueron los mejores pero s¨ª los encargados de alicatar la clasificaci¨®n insular. Le espera el Hapoel Jerusalem. Tobey, el sustento perfecto: 14+7.

Revolotean mariposas en el est¨®mago del Dreamland Gran Canaria y toda la gente que quiere al club. Sucede que el equipo insular, tras abatir hace un momento al Venezia (84-80), vuelve a clasificarse, como poco, para los cuartos de final de la Eurocup. Tras su ausencia del a?o pasado, vuelve a estar en disposici¨®n de pelear por ganar una competici¨®n que ya tiene en su palmar¨¦s.
De pronto, la v¨ªa Euroliga se abre de nuevo. Queda mucho pero tampoco tanto. En cualquier caso, toque pensarlo aunque sea de refil¨®n. Quien diga que no lo haga probablemente falte a la verdad. Mientras tanto, la hueste de Jaka Lakovic se dej¨® la victoria ante el equipo italiano para un ¨²ltimo minuto casi de infarto, donde el sentido de la palabra equipo se hizo m¨¢s presente que nunca, alicatando la clasificaci¨®n para cuartos de final dos jugadores que, en los 39 anteriores, tampoco es que fueran los mejores.
Ni que fuera el preludio de lo que vendr¨ªa despu¨¦s, el triple de Brussino que abr¨ªa el marcador de este partido empez¨® dando la primera pista. De hecho, acto seguido fue contestado, tambi¨¦n desde la periferia, por el ACB Kyle Wiltjer. En medio del intercambio de golpes inicial sucedi¨® que Ennis ya hab¨ªa puesto a los suyos por delante, 8-10, m¨¢s el Granca espabil¨® de pronto. Tras el empate de Tobey, Ngouama comenz¨® su recital desde la perfiera, lo que unido a dos postreros tiros libres de Brussino, le permitieron a los locales apilar un parcial de 17-6 para marcharse ganando 25-16 al final del primer cuarto.
Pero resulta que el Venezia se hab¨ªa puesto contest¨®n, y muy pronto pareci¨® dar Spahija con la tecla adecuada. De hecho, en menos de un minuto del segundo parcial ya oblig¨® a Lakovic a pedir tiempo muerte tras el centelleante 0-4 de salida de su equipo. Captaron a la perfecci¨®n los locales el mensaje de su entrenador, a la saz¨®n dirigido por el propio Spahija hace 24 a?os en el Novo Mesto. Ocurri¨® que, uno detr¨¢s de otro, Ngouama, Homesley y Tobey cantaron bingo desde el extrarradio, nueve puntos de la manera m¨¢s r¨¢pida posible, para volver a lanzar al Granca: 34-25.
Sin embargo, la hueste italiana siempre aparec¨ªa, insisti¨¦ndole a los locales en la necesidad de ganarle varias veces dentro del mismo partido si quer¨ªan meterse en los cuartos de final. El Gran Canaria dominaba pero el Venezia nunca se iba del todo, tampoco con otros dos triples consecutivos taladrando su aro, ahora firmados por Brussino y Shurna para el 42-34. La formaci¨®n italiana continuaba erguida y plantando batalla como aquella jabalina de Munford encestada desde el 6,75 antes de que Ngouama cerrara su antol¨®gica primera parte, 18 puntos para ¨¦l, de la mejor manera posible: reventando el aro y por el camino posterizando a Ennis para mantener de los suyos en una posici¨®n privilegiada, 46-39, antes del atronador bocinazo que anunciaba la llegada del descanso. No anot¨® m¨¢s.
El receso no le pudo sentar peor al Granca, que sali¨® tan aplatanado a disputar la segunda parte que, sin apenas darse cuenta, se vio con un 0-10 de parcial y la marea en contra con Parks liderando el abordaje con esos ocho puntos del tir¨®n as¨ª, de sopet¨®n, nada m¨¢s reanudarse el duelo. Bien es cierto que el Venezia se puso como mucho cuatro puntos arriba, 54-54 y 58-62, pero consigui¨® lo m¨¢s dif¨ªcil, que era meterse de nuevo en el partido.
De hecho, hasta bien entrada el segundo acto, ninguno de los dos equipos lleg¨® a irse m¨¢s all¨¢. Tampoco en el ¨²ltimo cuarto, donde el partido se puso precioso por emocionante. Brussino y Thomasson hac¨ªan gala de fundamentos individuales para alumbrar, aunque fuera un poco, el camino amarillo hacia una victoria que tanto se resist¨ªa. El segundo, desde la frontera, enchuf¨® para el 79-74 con apenas 100 segundos de juego por delante. Pelos le regal¨® una falta a Munford para que este apretara el marcador, 80-77, pero bien pronto enmend¨® su error. As¨ª, poquito despu¨¦s, Brussino le puso un llamativo tap¨®n a Parks para que, en el posterior ataque insular, el ala-p¨ªvot franc¨¦s clavara una daga desde la esquina, m¨¢s all¨¢ de la l¨ªnea, para sentenciar el partido. Un antih¨¦roe que siempre est¨¢. El triple final de Ennis, sombra aqu¨ª y despu¨¦s all¨¢. Puro maquillaje de un resultado que llevar¨¢ al Granca a jugarse la semana que viene una plaza en semifinales contra el Hapoel Jerusalem.
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