Derrota con honor ante Olympiacos

Volvi¨® a perder el Bar?a en el Palau pero, esta vez, no se vio ni un pa?uelo, no se escuch¨® ni un pito. Todo lo contrario. El p¨²blico despidi¨® a los suyos con aplausos pese a la derrota porque en el deporte hay maneras y maneras de perder. Gan¨® el Olympiacos en un partidazo del Bar?a. El talento de los griegos, que parece que no se acaba nunca, se impuso a un trabajo colectivo e individual m¨¢s que notable de los azulgranas. Punter (20 puntos y 31 de valoraci¨®n) tir¨® del carro hasta el final pero una canasta de Fournier les priv¨® de la pr¨®rroga. Williams-Goss y Vezenkov, determinantes en una victoria muy ajustada.

La titularidad de Parra hizo sospechar a todos que ser¨ªa el encargado de defender a Vezenkov, pero en realidad fue Parker, s¨ª Jabari Parker, quien se emparej¨® con el jugador rival m¨¢s peligroso. Una decisi¨®n t¨¦cnica que sali¨® relativamente bien, pues pese a que Vezenkov anot¨® en dos destellos de calidad, el buen tono del Bar?a mantuvo a raya a un Olympiacos que es, no olvidemos, el mejor ataque de la competici¨®n. El ex-madridista Williams-Goss castig¨® con penetraciones y asistencias a un Bar?a con problemas en est¨¢tico pero con sus anotadores bastante afinados (18-22). El norteamericano est¨¢ cubriendo de maravilla las bajas de Walkup y Vildoza. Y eso no es poca cosa.

El impacto de Metu y sobre todo de Brizuela, con dos triples, nivelaron el encuentro ya en el segundo cuarto. Ambos equipos tuvieron problemas con el rebote ofensivo, pero el ataque de Olympiacos fue netamente superior en est¨¢tico. Probablemente, el ataque de Olympiacos es netamente superior a cualquier defensa de la Euroliga. El gran potencial ofensivo azulgrana les mantuvo siempre cerca en el electr¨®nico (34-36) en un Bar?a que, en los dos primeros cuartos, no ech¨® especialmente de menos a Vesely. Llegaron a ponerse por delante los locales y gracias a un Metu espl¨¦ndido lograron mantener la ventaja al descanso (47-45).

La primera parte excelente del Bar?a tuvo continuidad a principio del tercer cuarto con los mejores minutos de los de Pe?arroya (56-47). El acierto excepcional desde fuera le permiti¨® al Bar?a vivir c¨®modo en el intercambio de golpes. El talento de Vezenkov, con siete puntos consecutivos, volvi¨® a acercar a los suyos. Dos fallos groseros de Fall en ataque contribuyeron de manera evidente a igualar el encuentro. Pero la solidez del Bar?a no se quebr¨® (65-66).

El problema de un partido tan igualado y el problema de enfrentarse a un rival tan fuerte como Olympiacos es que en un par o tres de posesiones pueden poner tierra de por medio. McKissic mediante, en poco m¨¢s de un minuto, dieron la vuelta al encuentro (67-74). Las soluciones individuales del Bar?a dejaron de funcionar ante una defensa m¨¢s coral de los griegos y el riesgo de descolgarse a seis minutos de final era real (70-78).

Bajo la batuta de Williams-Goss, imprescindible para su equipo, los visitantes entraron por delante a los ¨²ltimos dos minutos pero ya sin una ventaja significativa (82-84). Como siempre el Bar?a apost¨® por Punter para jugar las posesiones clave (sali¨® bien) mientras que a Olympiacos le entraron las prisas y, curiosamente, la desorganizaci¨®n. A 18 segundos para el final, 88-88 con bal¨®n para los de Bartzokas. Y resolvi¨®, esta vez, el talento de Fournier.

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