La infinidad del Madrid aplasta al Granca

Ahora que vuelve en unos d¨ªas al Wizink al frente de otro banquillo, algo que parec¨ªa imposible, cualquier homenaje que se le brinde a Pablo Laso ser¨¢ poco. En estos momentos al mando del Bayern M¨²nich, desde que se puso al frente del Real Madrid en 2011 este se ha convertido en un equipo infinito. No deja de ganar, no deja de superarse. Todo le parece insuficiente por m¨¢s t¨ªtulos que gane o rivales que aniquile. Ya lo reconoc¨ªa Chus Mateo hace unos minutos. La obra iniciada por Laso contin¨²a inmortal e impoluta a d¨ªa de hoy. Una leyenda que no cesa.

Este mediod¨ªa, una vez m¨¢s, la hueste hoy dirigida por Chus Mateo volvi¨® a hacer lo que quiso, ahora a costa del aplastado Gran Canaria, regalando otra vez un baloncesto estupendo a ojos propios y ajenos, sin importar filias y fobias, solo el disfrute con el basket alegre. Todos gust¨¢ndose, todos anotando. Los muchachos de Jaka Lakovic apenas se dejaron ver, y hasta parece corto el 97-71 final.

Por m¨¢s que se supiera, no deja ser el Real Madrid una aut¨¦ntica apisonadora vestida de blanco. Su intensidad no obtiene respuesta de nadie, tampoco hoy del miedoso Dreamland Gran Canaria. Tan acobardado de inicio, el equipo de Jaka Lakovic se limit¨® a ser la comparsa del WiZink para regocijo de la hueste local, que en menos de lo que dura un pesta?eo ya se hab¨ªa puesto 14-0, con Hezonja, 15 puntos en el primer cuarto, y Causeur llevando las riendas en este inicio fulgurante. La primera canasta visitante, por medio de Pelos, lleg¨® cuando ya se hab¨ªan consumido m¨¢s de cuatro minutos de un partido que estaba decantado por muy pronto que fuera.

No se permit¨ªa ni un segundo de relajaci¨®n el Madrid, que cerr¨® este periodo inicial con otro triple de Hezonja para disparar a su equipo en el marcador: 31-14. El Granca sali¨® rendido desde el inicio, y apenas se pudieron destacar p¨¦rdidas de bal¨®n de todos los colores (8 en 20 minutos), muchos tiros forzados, un imperdonable abuso de la periferia (4/21 triples en la primera parte) y la sensaci¨®n de rendici¨®n m¨¢s absoluta. Por muy superior que fuera el Madrid, se impon¨ªa algo m¨¢s de agallas para hacerle frente al campe¨®n de Europa.

Si antes era Hezonja, el segundo cuarto comenz¨® con las habituales punzadas de Musa, que se casc¨® cinco puntos del tir¨®n, incluido el 2+1 que le sac¨® a un blando Landesberg, para darle al Madrid el primer +20 del duelo: 36-16. Los blancos segu¨ªan percutiendo muy a gusto y anotando debajo del aro del Granca con mucha facilidad pero lo cierto es que, de una vez, su rival empez¨® a encontrarse relativamente bien en ataque. Especialmente Happ, que se casc¨® 15 puntos pr¨¢cticamente seguidos, coronados con un mate brutal que posteriz¨® a Poirier, al que le amarg¨® la matinal, para darle algo de vida, m¨ªnima, a los suyos al descanso: 54-37. Se manten¨ªa el +17 al descanso, 54-37, as¨ª que no deb¨ªa inquietarse la hueste de Chus Mateo por este empate en el marcador del segundo cuarto (20-20).

Tampoco es que hubiera muchas dudas sobre la victoria blanca, pero en caso de que existiera alguna, se evapor¨® en menos de lo que dura un pesta?eo. El Gran Canaria ali?¨® de precipitaci¨®n su necesidad de remontar, como si quisiera hacer en cinco minutos lo que no fue capaz de hacer en los 20 anteriores, y ah¨ª capitul¨® definitivamente. Nada m¨¢s empezar el tercer cuarto se comi¨® un triple de Causeur, y la cuesta bajo ya fue definitiva. Cuatro puntos seguidos de Tavares, que ya se hac¨ªa notar m¨¢s all¨¢ de su colosal anatom¨ªa, segu¨ªan d¨¢ndole forma a la tunda que se estaba llevando su equipo: 67-39, la m¨¢xima diferencia del partido.

Algo asfixiado el Madrid, comenz¨® a picar piedra el Gran Canaria a base de tiros libres y de, por fin, haber ralentizado algo el ritmo de juego. Por c¨®mo hab¨ªa ido el partido hasta ese ep¨ªlogo del tercer cuarto, muy contento deb¨ªa sentirse por haberse puesto 71-53. M¨ªnima, casi imperceptible, pero lo menos hab¨ªa algo de luz al final del t¨²nel. Mantuvo algo de esperanza de poner en aprietos a los locales en alg¨²n arrebato de locura en ese ¨²ltimo cuarto al que se lleg¨® con un triple sobre la bocina de Abalde que desmoron¨® lo poquito que quedaba del conjunto grancanario.

El ¨²ltimo periodo, totalmente protocolario, fue un verdadero infierno para el Gran Canaria, demasiado endeble, muy acomplejado, ni una pizca de resistencia, mucho menos de orgullo. No cumpli¨® ni con lo que ¨²nicamente depend¨ªa de ¨¦l, que era lo que ped¨ªa Savan¨¦ a su equipo en Diario AS. Solo por parte de Happ, que devor¨® a Poirier una vez se liber¨® de la infinita figura de Edy Tavares: 26 puntos, 6 rebotes. El marcador final, un 97-71 de tron¨ªo, volvi¨® a evidenciar el abismo que media, a d¨ªa de hoy, entre el infinito Real Madrid y el resto de equipos de Europa.

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