Liz Cambage (33+15) acaba con el sue?o de una gran Espa?a

Un volc¨¢n llamado Liz Cambage (33 puntos y 15 rebotes) termin¨® con el sue?o de Espa?a en el Mundial. Diva, s¨ªsmica, algo provocadora, enemiga n¨²mero uno del Santiago Mart¨ªn la tremenda australiana nacida en Londres super¨® el trabajo de gigante a una Selecci¨®n que se dej¨® la vida y a la que es imposible ponerle un pero. Cambage, sin embargo, fue incontenible y se fue cobrando, una por una, a las p¨ªvots espa?olas (Ndour, Nicholls) hasta el triunfo final. Le sobraron algunos gestos pero hay que reconocer su condici¨®n de jugadora superior. La Selecci¨®n no podr¨¢ repetir final de Mundial y le espera el bronce contra B¨¦lgica pero deja aroma de equipo campe¨®n y carism¨¢tico que, gracias a sus partidos ante Canad¨¢ y Australia, ha terminado conectando con la afici¨®n, que le despidi¨® con una ovaci¨®n emotiv¨ªsima. Cuando un equipo lo da todo, no est¨¢ obligado a m¨¢s. Seguro que tambi¨¦n lo har¨¢ por el bronce contra B¨¦lgica.

El partido tuvo una pel¨ªcula apasionate. Espa?a empez¨® con las constantes vitales baj¨ªsimas y Australia, como un reloj. Con Cambage al mando y con alternativas en su juego, el 6-21 inicial dejaba un mal cuerpo horrible. Hab¨ªa que ensuciar y agitar el partido como fuese y para eso, en el rol de mejores actrices secundarias, Cristina Ouvi?a y Queralt Casas se han licenciado en este Mundial. Con un coraz¨®n que no les cabe en las camisetas, Espa?a fue recortando uno a uno los puntos de ventaja de las Opals con ¨¦xitos incluso colaterales. En pleno subid¨®n espa?ol, Cambage cometi¨® una pol¨¦mica segunda falta que le sac¨® de sus casillas y le mand¨® al banquillo. La p¨ªvot nacida en Londres, un torbellino incontrolable, ven¨ªa caliente de una acci¨®n anterior y se march¨® al banquillo con 20-27 se?al¨¢ndose la camiseta y toc¨¢ndose la oreja derecha. Si quer¨ªa ruido, lo consigui¨®. Cambage termin¨® de meter a la afici¨®n en el partido y Espa?a aprovech¨® su ausencia para empatar (30-30) despu¨¦s de dos triples m¨¢gicos de Alba Torrens que pusieron la piel de gallina. Una canasta al l¨ªmite de esa clutch player que es Anna Cruz puso a Espa?a, en estado m¨¢ximo de calentura, por delante al borde del descanso confirmando una primera remontada ¨¦pica (35-34).

La segunda parte empez¨® con Cambage en el centro del escenario, centro de iras de la afici¨®n por sus feos gestos en el banquillo. Tenerife le pitaba hasta los tiros del calentamiento en un intento de sacarla del partido¡­ Mondelo puso m¨¢s madera: Ouvi?a&Casas, titulares. Espa?a perdi¨® algo de ¡®flow¡¯ pero supo mantener el partido igualado. Su problema eran las faltas. En el minuto 27, y con 46-46, Laura Gil, Nicholls y Ndour ten¨ªan cuatro faltas personales pero, cosas incre¨ªbles del baloncesto, Espa?a volte¨® esa situaci¨®n l¨ªmite, Bea S¨¢nchez le sac¨® la tercera a Cambage y acab¨® el cuarto con Laia Palau metiendo un triple magistral (58-50). Pero en dos minutos esa diferencia se hab¨ªa esfumado (58-59).

Lleg¨® el momento del parte de bajas. Ndour se fue con cinco faltas a 6.35 del final y Nicholls, a 3:44. A todo esto, Cambage hab¨ªa cometido la cuarta a 4:46 y el partido avanz¨® hacia un final dram¨¢tico pero el apag¨®n ofensivo de Espa?a desde el 61-61 contrast¨® con la luz de la incontenible Cambage. Ella se llev¨® las iras del p¨²blico, pero tambi¨¦n el trofeo a mejor jugadora del partido. El volc¨¢n Cambage apart¨® a Espa?a de su sue?o mundialista pero nunca la sacar¨¢ de los corazones de la gente de Tenerife.