El Real Madrid pierde en casa y se la jugar¨¢ en Estambul

Pues el tapado se destap¨®. El Darussafaka, ese equipo que lo tiene todo para ir a m¨¢s, dio el zarpazo en Madrid y obliga a los blancos a vencer en Estambul para volver a la Final Four. Tendr¨¢n que ara?ar al menos un triunfo en el Volkswagen Arena, donde cayeron por 13 en la fase liguera, y forzar como mal menor el quinto asalto en el WiZink Center.

De repente, este playoff de cuartos se ha puesto en chino para el Real. L¨ªder despu¨¦s de 30 jornadas y en una mala noche¡­ zas, 1-1 y todo en el aire. Una derrota que tiene m¨¢s de sorpresa a priori, antes de la eliminatoria, que a posteriori, tras el pistoletazo de salida. Porque ya el mi¨¦rcoles el equipo turco alarde¨® de arsenal y oblig¨® a los blancos a remontar 11 puntos. Este viernes repiti¨® dominio de la escena en la primera parte (25-34 y m¨¢s vigor), aunque no fue lo que le dio el triunfo, sino aguantar en pie el recital de un Llull majestuoso: 16 puntos con cinco triples, 2 asistencias y 19 de valoraci¨®n en los siete primeros minutos del tercer cuarto. Treinta tantos del Madrid en ese parcial. El Darussafaka se agit¨®, pero continu¨® en pie.

Wanamaker (21 otra vez), Wilbekin, Clyburn, Anderson¡­ potencia de fuego suficiente para contrarrestar la onda expansiva de Llull, que se apag¨® en el ¨²ltimo cuarto. Ah¨ª fue donde el equipo turco remat¨® un trabajo perfecto. Esta vez sus p¨ªvots, con un Zizic plet¨®rico, s¨ª fueron un factor de peso.

Un parcial de 0-9 a caballo entre el tercer y el cuarto periodo fren¨® en seco la inercia blanca: 68-72. Doncic, ?desacertado, se iba al banco y, tras una charla cari?osa de Laso, se tap¨® la cara con una toalla. Cuando se la quit¨® mostraba los ojos rojos por la frustraci¨®n; querer y no poder. Simb¨®lica imagen de la impotencia.

Pese el partidazo de Zizic, Ay¨®n no perd¨ªa el pulso con el croata, que sum¨® mucho en ausencia del mexicano. El ?Tit¨¢n era el sost¨¦n del Madrid, que esta vez lanz¨® mucho m¨¢s de tres pero con un porcentaje muy pobre (9 de 30). Y pese a todo, si hubiera mostrado m¨¢s tino desde la personal (err¨® nueve de sus 20 lanzamientos), la victoria ser¨ªa ahora suya. Logr¨® igualar a 78 a falta de 1:08, pero Wilbekin replic¨® con un tirito acrob¨¢tico con Llull casi colgado de ¨¦l. Luego, Carroll fall¨® dos triples y Llull otro mientras Rudy ca¨ªa abatido por el dolor tras un codazo en el hombro izquierdo.

Toca volar a Estambul con los machos bien apretados. Espera el nuevo rico, sin experiencia colectiva pero sobrado de talento. Y con piel de cordero: ¡°El Madrid a¨²n es el favorito¡±, repite Blatt. Aunque acumula v¨ªctimas en su educada cancha: CSKA, Fenerbah?e, Panathinaikos, Baskonia y el propio Madrid.