L¨ªo en los Knicks: Derrick Rose desaparece antes del partido

El 11 de diciembre los Knicks estaban 14-10 tras ganar a los Lakers y las cosas marchaban francamente bien, m¨¢s enfrascados en el posicionamiento de cara a los playoffs del Este que en las opciones de obtener un billete que ahora parece muy caro: 17-21 despu¨¦s de ocho derrotas en nueve partidos, un tramo nefasto en el que cualquier rastro de defensa ha desparecido literalmente del mapa y en el que nada sale como deber¨ªa. Solo Orlando Magic y los ya descartados que ocupan el furg¨®n de cola (Sixers, Heat, Nets) est¨¢n por detr¨¢s en la clasificaci¨®n de su Conferencia.

Los Knicks, y eso es lo peor porque en el Este una buena semana te devuelve a la relevancia como por arte de magia, est¨¢n perdiendo claramente el control de la situaci¨®n. La paliza que les dieron los Pelicans en el Madison (96-110) fue una obvia escenificaci¨®n, uno de esos sainetes hist¨¦ricos a los que, por desgracia, est¨¢n demasiado acostumbrados en la Gran Manzana, donde no ven un partido de playoffs desde 2013: abucheos del p¨²blico, expulsiones de Carmelo Anthony y Kyle O¡¯Quinn¡­ y espantada de Derrick Rose.

Porque Derrick Rose marc¨® el partido sin jugar al desaparecer durante la jornada de ayer lunes y no presentarse al partido sin dar ninguna explicaci¨®n a una franquicia en la que cundi¨® una obvia preocupaci¨®n: como no devolv¨ªa las llamadas ni hab¨ªa forma de saber de ¨¦l, los Knicks llegaron a comprobar si estaba en su domicilio. La alargada sombra de lo que era un misterio en el que los posibles malos presagios no estaban espantados marc¨® el partido, y seguramente ese estado de absoluta irritaci¨®n de sus compa?eros. Finalmente uno de ellos, su ¨ªntimo Joakim Noah (a su lado desde 2008), dio lo m¨¢s parecido a una explicaci¨®n que hay hasta ahora: ¡°Est¨¢ bien y es un alivio para todos nosotros. No quiero dar demasiadas explicaciones¡±. Parece ser, que aunque muy tarde, el jugador atendi¨® a los Knicks para confirmar el creciente rumor de que se hab¨ªa ido a su Chicago natal por un ¡°asunto familiar¡±. Su entrenador, Jeff Hornacek, se limit¨® a asegurar que habr¨ªa noticias m¨¢s temprano que tarde, pero la marejada de fondo es una relaci¨®n muy deteriorada entre ambos desde que las cosas dejaron de ir bien para el equipo en lo deportivo.

En ese estado de tensi¨®n casi irrespirable, los Pelicans ganaban 63-82 casi al final del tercer cuarto cuando Carmelo Anthony protest¨® lo que le parecieron dos faltas personales casi seguidas, ninguna se?alada, y fue expulsado. Y 63-85 poco despu¨¦s cuando Kyle O¡¯Quinn perdi¨® los papeles por completo y revent¨® un coast to coast de Anthony Davis con un hachazo tremendo por detr¨¢s que env¨ªo al ala-p¨ªvot contra la grada de fondo¡­ y a la sala de rayos X con la cadera maltrecha. A priori no hay lesi¨®n preocupante, alivio para unos Pelicans que bastante tienen tambi¨¦n con lo suyo, aunque nos quedamos sin saber d¨®nde habr¨ªa acabado la exhibici¨®n de Davis en el Madison, donde a todos los grandes jugadores les gusta dejar su tarjeta de visita: en 29 minutos y sin pisar la pista en el ¨²ltimo cuarto sum¨® 40 puntos, 18 rebotes y 3 tapones.

El triunfo deja a los Pelicans (15-24) a solo un partido de un rid¨ªculamente barato octavo puesto del Oeste, que ahora ocupan los Blazers y por el que tambi¨¦n se pelean Kings, Nuggets y hasta Lakers a nada que alarguen un poco su actual buena racha. Alrededor de Davis ha ido creciendo la rotaci¨®n con el regreso de Jrue Holiday y Tyreke Evans, la llegada de Motiejunas y la subida de prestaciones de Terrence Jones y el rookie Buddy Hield. Todav¨ªa no es suficiente, pero no est¨¢ mal. No tan mal como estaba al menos.

En los Knicks (6 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias de Hernang¨®mez en menos de 14 minutos), el desastre. Brandon Jennings ocup¨® el puesto de Rose y fue el mejor (20 puntos, 4 asistencias) en cuanto Carmelo se borr¨® (18 puntos) y en una noche para olvidar de Porzingis: 3/13 en tiros, 9 puntos, 4 rebotes. Ahora mismo, los Knicks son un agujero negro que se traga todo lo bueno que parec¨ªan manejar hace exactamente un mes. Y eso sin saber en qu¨¦ queda definitivamente este asunto de Derrick Rose¡­