Ha pasado casi medio siglo desde nuestro primer enfrentamiento con la URSS. Medio siglo en el que el f迆tbol espa?ol ha vivido muchos momentos tristes, de mala suerte, de injusticia,de incapacidad y decepci車n. Tambi谷n hubo buenos momentos, algunos de ellos inolvidables.
Como el gol de Se?or o la Eurocopa de 1984, para la que nos clasificaba. Eso s赤, sin contar la final contra Francia, de infausto recuerdo. Tambi谷n destacan los cuatro goles de Butrague?o en Quer谷taro o el oro ol赤mpico en Barcelona. Pero, en general, son momentos puntuales. Porque la norma era empezar con ganas e ilusi車n para acabar siempre antes de tiempo. Tuvo que llegar Rusia otra vez, con algunas rep迆blicas sovi谷ticas menos, para volvernos a activar en el a?o 2008.
Todo comenz車 el 21 de junio de 1964. Tarde lluviosa en el Santiago Bernab谷u y los sovi谷ticos, preparados para volver a hacer historia. Ya hab赤an ganado la primera edici車n de la Copa de Europa de Naciones cuatro a?os antes en Francia, contra Yugoslavia y en la pr車rroga. Estaba considerada como una de las mejores selecciones del mundo, con el gran Lev Yashin al frente, ganador del bal車n de oro un a?o antes y 迆nico jugador, junto con su compatriota Valentin Ivanov, que repiti車 en el once ideal de las dos primeras ediciones de la competici車n continental.
El estadio madridista, con 120.000 espectadores, mostraba un lleno hasta la bandera (sovi谷tica, por cierto, que tambi谷n ondeaba). Y no tuvieron que esperar mucho para ver los primeros tantos.En el minuto seis, un error de la defensa sovi谷tica en un centro de Luis Su芍rez lo aprovech車 Pereda para fusilar a Yashin. Poco dur車 la alegr赤a en las gradas, ya que dos minutos m芍s tarde Khusainov igualaba el encuentro despu谷s de otro fallo defensivo, en este caso de los espa?oles. Empate a errores, empate a goles, hab赤a que volver a empezar. Las grandes ocasiones saben mejor cuando se concretan a 迆ltima hora. Y aquella noche en Madrid (porque ya se hab赤a hecho de noche) todo indicaba que el partido acabar赤a en tablas. Pero el destino ten赤a reservado un cambio en el guion de 迆ltima hora. En el minuto 84 lleg車 el gol m芍s importante para nuestra Selecci車n hasta entonces. Ni siquiera la &Ara?a Negra* pudo impedirlo. Marcelino lanzaba un cabezazo inveros赤mil para colocar el bal車n cerca de la base del poste. Un gol que pasar赤a a la historia, cosa que ya advirtieron los peri車dicos de la 谷poca. Por ejemplo, la cr車nica del ABC dec赤a lo siguiente. ※Era el gol de la victoria, que se recordar芍 al cabo de los a?os, como se recuerda todav赤a aquel gol de cabeza de Gaspar Rubio a los ingleses en el Metropolitano, o el testarazo de Zarra a los ingleses, en el Mundial de Brasil, en 1950§. Las autoridades franquistas no perdieron la oportunidad de celebrar la victoria como algo m芍s que un simple triunfo deportivo. Todos los medios hac赤an referencias pol赤ticas constantes sobre los sovi谷ticos. Destacaban la gran ovaci車n que recibi車 Franco al inicio y al final del partido, como una muestra inequ赤voca de apoyo al R谷gimen.
Resulta curioso recordar como cuatro a?os antes, la primera edici車n del torneo hab赤a deparado unos cuartos de final entre Espa?a y la URSS. Esa eliminatoria nunca se lleg車 a celebrar, puesto que el Jefe del Estado no permiti車 la entrada en Espa?a del equipo sovi谷tico, dando al traste con las opciones de un gran equipo todav赤a comandado por Di St谷fano, Gento o Luis Su芍rez. La siguiente ocasi車n fue en 1971 y se puede considerar como un doble enfrentamiento. Las dos selecciones hab赤an quedado encuadradas en el mismo grupo de clasificaci車n para la Eurocopa. El primero de los dos partidos, celebrado el 30 de mayo de 1971, es la 迆nica vez que Espa?a ha pisado suelo ruso. Y la presentaci車n en el Estadio Lenin, en Mosc迆, no fue la deseada. Las bajas de Pirri y G芍rate fueron demasiado importantes y el juego del conjunto espa?ol brill車 por su ausencia. Al final, Rexach consigui車 marcar un gol que recortaba distancias para firmar el definitivo 2-1. Antes del partido de vuelta fue cuando AS Color entrevist車 al seleccionador sovi谷tico, Valentin Nikolaev. A pesar de llegar con seis puntos m芍s que los espa?oles, Nikolaev no se fiaba. Y no le faltaba raz車n, porque el partido fue de lo menos apacible para los intereses de la URSS. Despu谷s de un primer tiempo en el que dominaron los de Kubala, pero sin tener grandes ocasiones, en la segunda parte se transformaron en un torbellino al que s車lo le falt車 el gol. La cr車nica del partido parece el ejemplo perfecto de lo que era nuestra Selecci車n hasta hace muy poco. ※Dos paradones de Rudakov, dos fallos ante el gol y dos errores arbitrales nos privaron del triunfo§. Ah赤 estaba todo. Partido milagroso del portero rival, ocasiones que se fallan inexplicablemente y el colegiado en un d赤a malo. 0-0 y Espa?a fuera de la Eurocopa del 72.
Valentin Nikolaev
Valentin Nikolaev naci車 el 16 de agosto de 1921 en la aldea de Yerosovo (Rusia). Fue un futbolista y entrenador que desarroll車 ambas carreras en la extinta Uni車n Sovi谷tica. La mayor赤a de su trayectoria como jugador la realiz車 en el CSKA de Mosc迆, con quien gan車 la Liga sovi谷tica en cinco ocasiones y la Copa otras tres. Fue m芍ximo goleador en los a?os 1946 (16 goles) y 1947 (14 goles). Es miembro del Club Grigory Fedotov, una lista no oficial de jugadores rusos que han marcado m芍s de 100 goles. Debut車 como internacional con la URSS en los JJ OO de Helsinki. Jug車 un total de once partidos. Su carrera como entrenador comenz車 en 1964 en el CSKA de Mosc迆, quedando tercero en la Liga, posici車n que repetir赤a al a?o siguiente. Su 迆nico t赤tulo liguero lo logr車 en 1970, tambi谷n con el CSKA. Su etapa como seleccionador de la URSS dur車 desde octubre de 1970 hasta finales de 1971, clasificando al equipo para la Eurocopa del a?o siguiente. A?os despu谷s se har赤a cargo de varias categor赤as inferiores de la Uni車n Sovi谷tica, con las que logr車 importantes 谷xitos. En 1976 logr車 el t赤tulo europeo Sub-23 y en 1980 el campeonato de Europa Sub- 21. Abandon車 los banquillos cinco a?os despu谷s. Nikolaev falleci車 el 9 de octubre de 2009 en Mosc迆.
Esa URSS, ya sin Nikolaev en el banquillo, llegar赤a a la final del torneo, donde perdi車 con la Alemania Federal de Maier, Breitner, Beckenbauer, Heynckes, Hoeness, M邦ller y Netzer. La Alemania que cuatro a?os despu谷s se qued車 a las puertas de la historia, cuando Panenka le impidi車 ganar el primer triplete del f迆tbol mundial. El cuarto y 迆ltimo enfrentamiento entre Espa?a y la Uni車n Sovi谷tica fue un partido de preparaci車n para el Mundial de M谷xico 86. La Selecci車n gan車 2-0 y dej車 buenas sensaciones. Los datos curiosos de aquel partido fueron, por un lado, la ubicaci車n. Se jug車 en el estadio Insular de Las Palmas, lugar poco habitual para acoger encuentros de La Roja. De hecho, no jugaban un partido all赤 desde 1972. El otro y principal motivo por el que este partido quedar芍 en el recuerdo fue por el debut de uno de los jugadores que marcar赤an el camino de Espa?a en la siguiente d谷cada: Julio Salinas. El delantero bilba赤no marc車 el segundo gol, iniciando con buen pie su extensa carrera como internacional. Rusia. La Uni車n de Rep迆blicas Socialistas Sovi谷ticas fue disuelta en diciembre de 1991. El resultado fueron 15 nuevos pa赤ses, entre los que est芍 Rusia, que fue quien asumi車 la personalidad jur赤dica del anterior estado.
Tuvieron que pasar casi siete a?os para que la Selecci車n se enfrentara al heredero de la URSS. Fue un partido amistoso, pero no fue un partido m芍s. Se trataba del debut de un nuevo seleccionador, Jos谷 Antonio Camacho, quien reemplazaba a uno de los entrenadores que m芍s tiempo hab赤a estado en el banquillo nacional, Javier Clemente, que tuvo sus momentos buenos y malos, pero que se fue en el peor. La cat芍strofe que supuso el Mundial de Francia (eliminaci車n en la primera fase) dej車 la figura de Clemente en un lugar muy poco ventajoso. La afici車n de Granada manifest車 su opini車n con pancartas como ※Camacho, t迆 s赤 que eres macho§, ※Con Camacho campeones por cojones§ o ※Espa?a - Clemente + Camacho = f迆tbol§. Espa?a se llev車 el partido con un solitario gol de Alkiza. Ca?izares, que tomaba el relevo de Zubizarreta, fue el m芍s destacado del partido, al detener un penalti a Mostovoi. Y la sensaci車n general que dej車 el encuentro fue positiva. No es que Espa?a jugase el mejor partido de su historia, pero ven赤a de una actuaci車n calamitosa y, con Camacho al frente, el futuro se ve赤a de otro color.
En 2004 volvieron a verse las caras, esta vez en partido oficial. Era el estreno de Espa?a en la Eurocopa de Portugal y, esta vez s赤, 谷ramos capaces de ganar el primer partido. Un gol de Valer車n en el minuto sesenta cerraba una trabajada victoria contra los rusos. El canario sali車 en la segunda parte sustituyendo a Baraja y s車lo tard車 un minuto en mandar el bal車n a la red. Buen partido de la Selecci車n, gran actuaci車n de Vicente, jugadores como Xabi Alonso, Joaqu赤n, Valer車n y Fernando Torres en el banquillo. Pintaba bien aquella Euro, pero un empate con Grecia y una derrota por la m赤nima con los anfitriones dej車 a Espa?a fuera de juego a las primeras de cambio. La 迆ltima vez que La Roja no ha logrado superar la primera fase de un torneo. El 迆ltimo t赤tulo continental que, hasta hoy, no ha viajado a Espa?a. Antes de la gloria hubo un peque?o par谷ntesis en esta serie de enfrentamientos hispano-rusos. Se trata de un amistoso a escasos d赤as del inicio del Mundial de 2006. Luis Aragon谷s ya estaba tanteando la idea del tiqui-taca y daba cada vez m芍s importancia a los centrocampistas. El trivote que jug車 de inicio aquel d赤a (Senna-Albelda-Cesc) fue, con diferencia, el m芍s defensivo que utiliz車 aquel verano. Sin ir m芍s lejos, en la segunda parte lo formaron Xabi Alonso-Xavi-Iniesta. Y en el Mundial Xabi Alonso-Senna-Xavi. Pero aquella prueba acab車 0-0 y la gente no estaba nada convencida de las posibilidades de la Selecci車n. Es curioso c車mo, cuando m芍s cerca estaba del 谷xito, menos confiados se mostraban los medios. Hasta la etapa de Luis Aragon谷s, cualquier partido antes de un gran torneo se tomaba como un claro signo de las opciones reales de hacer un buen papel. Mientras tanto, con Luis al mando, todo se ve赤a borroso y poca gente cre赤a en la Selecci車n.
2008 es el inicio de todo. Y en el inicio de todo estuvo Rusia. Despu谷s de empatar con Italia en el 迆ltimo amistoso de preparaci車n y con los aficionados y la prensa sin grandes esperanzas, Espa?a se estrenaba en la Euro frente a unos viejos enemigos que nos dieron la primera gran alegr赤a de nuestro f迆tbol nacional, all芍 por el a?o 1964. Rusia no era un rival cualquiera, como se demostr車 despu谷s, pero aquella tampoco era una Espa?a cualquiera. Espoleada por los bajitos (Xavi-Iniesta-Silva), con Senna cubri谷ndoles las espaldas y Villa realizando uno de sus mejores partidos con La Roja, el debut result車 todo un 谷xito. Inesperado incluso para los m芍s optimistas. 4-1, tres goles de &El Guaje* y uno de Cesc, y una sensaci車n de equipo y un f迆tbol, rozando por momentos la perfecci車n, que colocaban a Espa?a en el grupo de favoritos.
En realidad, lo que hac赤a falta no era que nos se?alaran como favoritos. Eso ya hab赤a pasado muchas veces. Lo importante era que los jugadores se lo creyeran. Y el trabajo del m赤ster en ese sentido fue tan importante como en el resto de facetas. Y se acab車 notando en los siguientes partidos. Contra Suecia, quiz芍 el d赤a m芍s flojo de la Selecci車n, marcando en el 迆ltimo suspiro. Contra Grecia, donde un equipo plagado de suplentes no se dej車 ir despu谷s del gol de Charisteas al borde del descanso y dio la vuelta al marcador en la segunda parte. Y, c車mo no, en aquellos cuartos de final, que tantas veces se nos hab赤an resistido y en los que matamos tres p芍jaros de un tiro: los cuartos, los penaltis e Italia. El equipo al que hab赤amos dejado segundo de grupo ser赤a nuestro rival en semifinales. Rusia ven赤a de eliminar en la pr車rroga a Holanda, hasta entonces el equipo al que, junto a Espa?a, apuntaban todos los focos. Parec赤a evidente que, despu谷s de los cuatro goles del primer par tido, los rusos, ya lanzados en vuelo con Arshavin a los mandos del aparato, nos iban a poner las cosas mucho m芍s dif赤ciles. Pero Espa?a estaba en un momento tan dulce que la selecci車n rusa apenas hizo acto de presencia. En el primer tiempo fuimos netamente superiores, aunque el marcador al descanso indicaba empate a cero y Villa, pichichi del torneo, hab赤a dejado el terreno de juego por lesi車n. Razones suficientes para que La Roja hubiese ca赤do con honores, pero de vuelta a casa una vez m芍s antes de la final. Sin embargo, lo que ocurri車 en Viena aquella noche, aquel 26 de junio de 2008, hizo que el f迆tbol no volviera a ser el mismo. Ni para Espa?a ni para el propio balompi谷. En el minuto50, Xavi; en el minuto 73, G邦iza; y en el minuto 82, Silva. Tres goles que coronaban una de las mejores actuaciones colectivas que se recuerdan. Una de las mayores exhibiciones de aquel tiqui-taca que acababa de nacer. 44 a?os despu谷s los espa?oles ve赤an a su selecci車n llegar a una final, quiz芍 con el mejor f迆tbol posible. Lo que pas車 despu谷s de aquella noche ya forma parte de la historia del f迆tbol.