Yolanda D¨ªaz pone fecha de salida a su proyecto para las elecciones generales
Presentar¨¢ su candidatura para los comicios el domingo de la pr¨®xima semana en un acto de Sumar que se celebrar¨¢ en Madrid y contar¨¢ con la presencia de varias organizaciones sociales afines
Parece que llega a su fin la eterna pregunta sobre el futuro de Yolanda D¨ªaz. Centrada en sus tareas como ministra, la l¨ªder progresista se ha negado en redondo a caer en la tentaci¨®n de la elucubraci¨®n. Para algunos, por hacerse de rogar. Para otros, por responsabilidad y cautela. Son muchos los factores que se ten¨ªan que calibrar y acompasar para que se abriera ante D¨ªaz un escenario favorable y seguro. Pero ahora, haciendo acopio de las fuerzas reunidas, da finalmente el paso adelante.
No ha sido f¨¢cil el camino. Los palos en la rueda y las piedras en el tejado a menudo han venido de la que, al menos en teor¨ªa, era su propia trinchera. Son muchas y notorias las desavenencias entre la pol¨ªtica gallega y el sector Podemos. Un pulso del que a¨²n no se conoce vencedor. Lo ¨²nico que est¨¢ claro ahora es que D¨ªaz encabezar¨¢ una lista electoral en las pr¨®ximas elecciones generales. La pregunta es, todav¨ªa, si los integrantes de Podemos participar¨¢n de ella o har¨¢n caminito propio.
Para la formaci¨®n morada, que desde su nacimiento ha vivido tantas y tan profundas transformaciones, el objetivo primordial es mantener la hegemon¨ªa en el espacio a la izquierda del PSOE. Ser esa fuerza que tira de sus socios de gobierno en la direcci¨®n de la reforma social. Sin embargo, se notan nervios en el partido ante la gran popularidad de la vicepresidenta segunda. Porque Yolanda D¨ªaz, por muy aliada que sea, no es de Podemos.
Piezas colocadas
Sudores fr¨ªos tuvieron algunos cuando la ministra comenz¨® a tantear el tablero electoral para ver si un proyecto propio, diferenciado y m¨¢s amplio podr¨ªa consolidarse en la coyuntura pol¨ªtica actual. Y a¨²n m¨¢s fr¨ªos se volvieron cuando result¨® que la respuesta era un rotundo s¨ª. O as¨ª lo dibujan todos los indicadores. Sumar tiene espacio y adeptos. El problema es que una amplia fracci¨®n de su potencial electorado se solapa con el de Podemos. As¨ª que se abr¨ªan dos caminos, la divisi¨®n o la suma. La suma con Sumar.
Ione Belarra, Irene Montero o incluso Pablo Iglesias, recelosos de D¨ªaz pero sabedores de su fundamental capital pol¨ªtico, han intentado muchas veces llevarla a su terreno para extraer de ella un compromiso que, en una hipot¨¦tica coalici¨®n electoral, apuntale la preponderancia de Podemos. Sin embargo, esquiva y diestra para la ver¨®nica, la cabeza de Sumar se ha negado a firmar hipotecas antes de tiempo, y hasta la fecha ni siquiera ha dicho abiertamente que vaya a intentar hacerse con la presidencia del gobierno.
Sin embargo, ya ha habido movimiento y las cartas est¨¢n sobre la mesa. En su cuenta de Twitter, D¨ªaz ha dado indicios bastante elocuentes. ¡°El pr¨®ximo 2 de abril tenemos cosas nuevas que contarte¡±, reza el mensaje publicado en su muro¡±. Por si esto no fuera lo suficientemente claro, en un encuentro de Sumar en Sevilla dijo recientemente: ¡°En estos d¨ªas voy a tomar, quiz¨¢s, una de las decisiones m¨¢s importantes de mi vida¡±. Las piezas parecen estar colocadas, y D¨ªaz ha salido a ganar.