Un estudio revela cu¨¢ntas personas siguen usando el teletexto en Espa?a
De acuerdo a la informaci¨®n de un an¨¢lisis realizado por RTVE, cerca de dos millones de personas lo siguen consultando.
En el a?o 1977 un novedoso invento para la ¨¦poca revolucion¨® la peque?a pantalla. Desarrollado por John Adams para la BBC y bajo el nombre de Ceefax, a Espa?a lleg¨® once a?os m¨¢s tarde con el nombre de teletexto. Una especie de internet de entonces en el que poder consultar desde la programaci¨®n de la televisi¨®n, el hor¨®scopo, las noticias del d¨ªa e incluso los resultados de f¨²tbol y otros deportes.
A trav¨¦s de una serie de ¨ªndices, se pod¨ªa obtener esta informaci¨®n en forma de gr¨¢ficos y mensajes escritos. Hoy en d¨ªa, con casi todo lo que necesitamos a golpe de dedo en nuestro tel¨¦fono, parece inexplicable que todav¨ªa haya quien lo consulte. Pero nada m¨¢s lejos de la realidad. El teletexto sigue operativo en Espa?a (al igual que en Alemania, en otros pa¨ªses ha ido desapareciendo).
De hecho, seg¨²n un estudio de TVE, cerca de dos millones de personas lo sigue utilizando. En ¨¦l se a?ade que hasta un 99,3% de los hogares espa?oles cuentan todav¨ªa con teletexto. Entre los usos m¨¢s comunes, aseguran, est¨¢n la consulta del hor¨®scopo y el intercambio de mensajes. Sobre esto ¨²ltimo, comprob¨® que algunos presos de la c¨¢rcel de A Lama (Pontevedra) se comunicaban con el exterior en 2020 a trav¨¦s de este sistema.
Presente en TV e internet
A d¨ªa de hoy es posible usarlo de forma tradicional y a trav¨¦s de internet. De hecho, RTVE ofrece en su p¨¢gina web la opci¨®n de revisar este sistema de informaci¨®n, si bien la cantidad de esta es m¨¢s limitada. Parece, por tanto, que est¨¢ abocado a su desaparici¨®n m¨¢s pronto que tarde. Aunque como punto a favor encontramos los procesos cada vez m¨¢s automatizados para llevarlo a cabo, haciendo su coste algo asumible junto con la inversi¨®n publicitaria m¨ªnima que se mantiene.
Echando la vista atr¨¢s, el teletexto lleva en Espa?a algo m¨¢s de tres d¨¦cadas. A nuestro pa¨ªs lleg¨® en mayo de 1988. Con un decodificador o una televisi¨®n que contar¨¢ con ¨¦l, pod¨ªa consultarse esta nueva forma de informarse. Entonces, hasta la llegada de las auton¨®micas y de Antena 3 en 1990, apenas hab¨ªa dos canales en la televisi¨®n. Por ello, se decidi¨® nombrarlo inicialmente como ¡®Telecinco¡¯, pasando posteriormente a ¡®Teletexto¡¯ tras la llegada del canal del grupo Mediaset.
Su implantaci¨®n le cost¨® a Televisi¨®n Espa?ola, seg¨²n El Economista, cerca de 500 millones de las antiguas pesetas (unos tres millones de euros). Una inversi¨®n que, seg¨²n los datos de audiencia, result¨® totalmente rentable: m¨¢s de 10 millones de personas afirmaban usarlo para consultar las inversiones en bolsa, el tiempo, o el tr¨¢fico, entre otros servicios destacados.