La administraci¨®n que protagoniz¨® la mayor estafa de la Loter¨ªa de Navidad con ¡®El Gordo¡¯: as¨ª fue el ¡®Caso Esc¨¢mez¡¯
En 1951, un lotero vendi¨® miles de participaciones falsas de un n¨²mero que fue agraciado con ¡®El Gordo¡¯.
Cada a?o, la Loter¨ªa de Navidad nos regala cientos de historias de esas que recordamos con el paso de los a?os. Muchas de ellas, son emocionantes y bonitas. Algunas, como la de la mujer que se encontr¨® un boleto premiado, son curiosas. Otras cuentan como las malas intenciones de una sola persona pueden robar la ilusi¨®n a miles de familias. Un ejemplo de esto ¨²ltimo es el conocido como el ¡®Caso Esc¨¢mez¡¯, que es considerada la mayor estafa de la Loter¨ªa Nacional en Espa?a.
Qu¨¦ es el ¡®Caso Esc¨¢mez¡¯
En 1951, Miguel Esc¨¢mez, responsable de las administraciones sevillanas de ¡®La Europa¡¯ y ¡®Do?a Francisquita¡¯, tram¨® un plan para ganar miles de pesetas. El lotero andaluz imprimi¨® miles de participaciones de loter¨ªa falsas para los n¨²meros 02704 y 02703 que vendi¨® a personas de toda Espa?a. La idea parec¨ªa sencilla: vender por una peseta participaciones falsas de un n¨²mero que no iba a tocar... pero toc¨®.
El 02704 fue agraciado con ¡®El Gordo¡¯, y a Esc¨¢mez se le torci¨® el plan. Solo hab¨ªa comprado un billete del n¨²mero, pero hab¨ªa vendido miles de participaciones. Por lo tanto, el n¨²mero de participaciones era tremendamente superior a las que correspond¨ªan a los d¨¦cimos ganadores.
Su primera respuesta fue pagar a los beneficiados con el dinero que hab¨ªa recaudado, pero como es de esperar, no ten¨ªa fondos suficientes para pagar a las miles de personas que reclamaban su premio y las denuncias comenzaron a llegar. La Brigada de Investigaci¨®n Criminal le descubri¨® r¨¢pidamente, poniendo fin por completo a su plan.
?Cu¨¢nto dinero estaf¨®?
La Polic¨ªa nunca pudo confirmar el n¨²mero exacto de participaciones falsas que imprimi¨® y puso a la venta Esc¨¢mez, que declar¨® haber vendido m¨¢s de 60.000, y se habl¨® de casi 5.000 personas afectadas. A cada una de esas participaciones adquiridas por una peseta le correspond¨ªan 7.500, que convertidas a la actualidad ser¨ªan 2.700 euros. Es decir, miles y miles de personas de toda Espa?a cre¨ªan haber ganado m¨¢s de 2.500 euros a cambio de una peseta, pero su sue?o dur¨® muy poco tiempo.
Todos ellos fueron citados por la Polic¨ªa en la comisar¨ªa de la calle Peral para denunciar la estafa, pero por desgracia para las familias poco pudieron hacer para recibir el dinero de un premio que no exist¨ªa. El reparto se demor¨® m¨¢s de 10 a?os, la Audiencia rechaz¨® atribuir la responsabilidad subsidiaria al Estado, y el dinero de los ¨²nicos billetes ganadores que pose¨ªa el lotero tuvo que repartirse entre todos los beneficiarios.
Estas fueron las condenas
La Secci¨®n Segunda de la Audiencia Provincial de Sevilla dict¨® sentencia 5 a?os m¨¢s tarde, en julio de 1956. Miguel Esc¨¢mez fue condenado a doce a?os de c¨¢rcel por el delito continuado de falsificaci¨®n para cometer la estafa y otros diez por apropiaci¨®n indebida para sumar un total de 22 a?os en prisi¨®n.
Tambi¨¦n fueron condenados Manuel Barba y Antonio Garc¨ªa, los trabajadores de sus administraciones, a los que la Audiencia consider¨® c¨®mplices. Estos recibieron penas de ocho a?os, y se emiti¨® una orden de embargo sobre los bienes de todos los implicados. La investigaci¨®n policial demostr¨® que los tres art¨ªfices de la estafa, que se culparon mutuamente, mandaron pidieron a una imprenta las participaciones falsas, que no ten¨ªan n¨²mero de foliaci¨®n.
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