Una mujer, dada por muerta, revive en un tanatorio de Zaragoza
La anciana mostr車 signos de vida horas antes de comenzar su velatorio y fue trasladada al hospital donde falleci車 por segunda vez.
Una anciana de 90 a?os ha muerto dos veces en tan solo 24 horas, tras mostrar signos de vida despu谷s de fallecer por primera vez. El suceso ocurri車 en Zaragoza, cuando la nonagenaria fue trasladada al Tanatorio de Torrero desde el Hospital San Juan de Dios de Zaragoza al confirmarse su primera muerte. Horas despu谷s, cuando ya estaba preparada para su velatorio mostr車 se?ales de vida y fue trasladada de nuevo al hospital, donde finalmente falleci車.
En torno a las 23:00, los responsables m谷dicos del Hospital San Juan de Dios de Zaragoza notificaron a la familia la muerte de la mujer por causas naturales. La trasladaron al tanatorio con intenci車n de realizar el velatorio al d赤a siguiente, sin embargo, el tanatopractor se percat車 de que la mujer respiraba y r芍pidamente activo los protocolos para que regresase al hospital por si necesitaba atenci車n sanitaria urgente.
Un suceso algo frecuente
Aunque el hecho de que la anciana falleciese dos veces en tan solo 24 horas, seg迆n ha afirmado el propio hospital de Zaragoza, es un hecho ※relativamente frecuente en pacientes cr赤ticos§. Esto se debe a que, en el caso de ciertos pacientes su cuerpo puede tener una reacci車n que haga que el coraz車n vuelva a funcionar durante un tiempo determinado.
Desde el hospital tambi谷n se ha informado que esta especie de espasmo en el cuerpo provoca la reactividad temporal del 車rgano, y aunque se dice ※que una persona sigue con vida, realmente no lo hace§.
El caso en manos de la Polic赤a
El Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Polic赤a de Arag車n ha abierto una investigaci車n en torno al suceso, para determinar si existi車 alguna negligencia o mala praxis por parte de los profesionales del centro m谷dico. Aunque en un principio se descarta desde la polic赤a cualquier tipo de responsabilidad penal, tratan de averiguar si el traslado al tanatorio pudo influir en la muerte final de la anciana.