?Tienes el segundo dedo del pie m¨¢s largo que el gordo? Puedes padecer la enfermedad de Freiberg
Se trata de una necrosis del segundo metatarsiano que habitualmente se aplana, pierde su forma correcta y dificulta el riesgo sangu¨ªneo en la zona. O al menos as¨ª lo ha indicado el ICOPCV.
Los dedos de los pies no siempre siguen un patr¨®n determinado. Y es que hay personas que tienen los dedos muy anchos, muy grandes, muy largos o muy peque?os. Aunque esto es algo normal, tambi¨¦n hay personas que tienen el dedo gordo del pie m¨¢s peque?o que el segundo dedo, es decir, que el segundo dedo del pie es m¨¢s grande que el resto.
Y este tipo de personas, seg¨²n el Ilustre Colegio Oficial de Podolog¨ªa de la Comunidad Valenciana (ICOPCV), son m¨¢s propensas a padecer la Enfermedad de Freiberg: una necrosis del segundo metatarsiano que habitualmente se aplana, pierde su forma correcta y dificulta el riesgo sangu¨ªneo en la zona.
Causas
Esto provoca hinchaz¨®n dorsal y dolor en el antepi¨¦ al caminar. Esta patolog¨ªa es com¨²n en mujeres durante el brote de crecimiento en la pubertad y cuando hay un acortamiento gemelar y marcha en puntillas. Ahora bien, otros factores vinculados a esta enfermedad son la pr¨¢ctica de deportes de gran impacto como son el baile, correr, saltar...
?El motivo? Est¨¢ claro: son din¨¢micas que realizadas con frecuencia favorecen el colapso ¨®seo. Este hecho, como era de esperar, ha generado un cierto debate en las redes sociales, sobre todo entre personas que s¨ª poseen esta peculiaridad en sus pies.
Diagn¨®stico y tratamiento
¡°El origen exacto de la enfermedad es desconocido. No obstante, la hip¨®tesis m¨¢s extendida es que la enfermedad se produce por microtraumatismos de repetici¨®n sobre la cabeza del segundo dedo del pie, produciendo un colapso de los vasos sangu¨ªneos que produce necrosis avascular¡±, ha explicado Jorge Escoto, miembro de la junta directiva del ICOPCV.
Para el diagn¨®stico, este pod¨®logo ha aclarado que adem¨¢s de la exploraci¨®n suelen necesitar radiograf¨ªas. Una vez confirmado, el tratamiento consiste en la realizaci¨®n de un estudio biomec¨¢nico, estudio de presiones plantares y la confecci¨®n de soportes plantares para descargar la zona metatarsal afectada.
Recomendaciones
Para este tipo de casos, los expertos recomiendan el uso de zapatos con una suela que tenga una buena capacidad de amortiguaci¨®n y as¨ª evitar la deformidad permanente de la cabeza metatarsiana intentando preservarla anat¨®micamente.
Las secuelas m¨¢s comunes de haber padecido la enfermedad son: artrosis de la articulaci¨®n metatarsofal¨¢ngica, metatarsalgia cr¨®nica, rotura de la placa plantar, deformidad del dedo (dedo en garra o martillo) o artritis.
¡°En algunos casos, se han de pautar analg¨¦sicos o realizar infiltraciones con corticoides y anest¨¦sico local. Tambi¨¦n puede requerir la inmovilizaci¨®n con yeso o con bota, muletas y descarga completa. Si el tratamiento conservador fracasase, se podr¨ªa llegar al tratamiento quir¨²rgico, pero no es lo m¨¢s habitual¡±, ha concluido Escoto.
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