Muere una mujer por un ataque de un caim¨¢n
La v¨ªctima, de 69 a?os, hab¨ªa salido a pasear a su perro por un campo de golf en Hilton Head Island (Carolina del Sur) cuando el reptil apareci¨®. Seg¨²n la polic¨ªa, permanec¨ªa junto al cad¨¢ver.


Los sucesos en Norteam¨¦rica siempre tienen otra vuelta de tuerca, mezcla de lo fatal y cinematogr¨¢fico que resultan all¨ª las an¨¦cdotas. Y cuando juega el factor animal, todav¨ªa m¨¢s. Estados Unidos es un pa¨ªs de contrastes, cuya extensi¨®n permite encontrar dentro de unas mismas fronteras la ciudad de los rascacielos y los bosques interminables e ind¨®mitos de Alaska. En no pocas ocasiones ambos mundos colisionan. La ¨²ltima ha terminado con una v¨ªctima mortal y hab¨ªa empezado con un apacible paseo junto a un perro.
Ha ocurrido en Carolina del Sur. Concretamente, en un campo de golf de Hilton Head Island. Una mujer de 69 a?os, que hab¨ªa salido a tomar el fresco junto a su mascota para que el canino realizara sus necesidades, se top¨® con un caim¨¢n. Seg¨²n el informe de la Polic¨ªa, aprobado por la oficina del sheriff del condado de Beaufort, el resultado fue terrible.
Reconstrucci¨®n de los hechos
Las autoridades hab¨ªan recibido este martes el aviso de un posible ataque de cocodrilo en el vecindario de Spanish Wells, donde se ubica el campo de golf, y cuando acudieron la imagen fue tan visual que hab¨ªa pocas dudas en el atestado. Eran las nueve y media de la ma?ana. El cuerpo sin vida yac¨ªa en el borde de las t¨ªpicas lagunas artificiales de estos campos deportivos, donde se hab¨ªa colado un reptil de enormes fauces. Y all¨ª permanec¨ªa, junto al cad¨¢ver. Impasible. La escena era sangrienta.
Todav¨ªa no se ha identificado a la v¨ªctima, pero, seg¨²n confirma el documento policial, todo apunta a que era residente del vecindario. La propia oficina del forense de dicho condado ha anunciado que, cuando se realice la autopsia, se podr¨¢ determinar la identidad de la persona. De momento, el rostro es una inc¨®gnita de mordeduras y desgarros.
De lo que no parece haber ninguna duda es de la reconstrucci¨®n de los hechos. ¡°Se realizaron esfuerzos de rescate y apareci¨® un caim¨¢n que estaba custodiando a la mujer, interrumpiendo los esfuerzos de emergencia¡±, reza el comunicado. Tras desplazar al peligroso reptil, se pudo recuperar el cad¨¢ver.
Dos v¨ªctimas en once meses
Con este, ya son dos las personas que han muerto en el mismo condado por ataque de caim¨¢n en menos de un a?o. Hace once meses, en pleno y caluroso agosto, una mujer de 88 a?os se resbal¨® en un estanque mientras cuidaba el humilde jard¨ªn de la residencia de ancianos donde viv¨ªa. Fue devorada. Desde aquel retrato brutal el centro de Sun City Hilton Head no ha vuelto a ser el mismo.
Se estima que hay unos cinco millones de caimanes americanos en estado salvaje, en 10 estados del sureste, llegando incluso a Oklahoma, pero, aun as¨ª, no suelen producirse de manera frecuente estos salvajes y feroces asaltos. De hecho, en Florida, cuya poblaci¨®n de caimanes supera el mill¨®n, el promedio de mordeduras no provocadas por a?o es de seis incidentes desde 1948. Da un total de 442 casos; de ellos, 26 con final tr¨¢gico. Similar al de la mujer que paseaba apaciblemente a su perro en un tranquilo vecindario Carolina del Sur y am¨¦n de los contrastes atroces y cinematogr¨¢ficos de un pa¨ªs que no deja de sorprender.