Grave problema en Corea del Sur: sube el n¨²mero de personas que no salen de su habitaci¨®n
Alrededor del 3% de la poblaci¨®n entre 19 y 39 a?os vive en absoluta soledad, un acto que viene motivado por una baja autoestima y que el Gobierno est¨¢ tratando de erradicar.
La sociedad cada vez m¨¢s individualista, en la que las relaciones sociales resultan m¨¢s costosas con el paso del tiempo, a la que caminamos ha encontrado su punto culminante en Corea del Sur. All¨ª, alrededor del 3% de la poblaci¨®n entre 19 y 39 a?os vive en absoluta soledad, aislados del resto. Lo hacen movilizados por la incapacidad que han encontrado para adaptarse a la sociedad y alcanzar el ¨¦xito que marcan los est¨¢ndares. Son conocidos como los ¡°hikikomori¡±, un t¨¦rmino acu?ado por vez primera en el Jap¨®n de los 90.
Corea del Sur, que batalla contra una de las tasas de fertilidad m¨¢s bajas del mundo, est¨¢ tratando de ponerle remedio. Y la v¨ªa que ha encontrado, por el momento, pasa por dar una serie de ayudas econ¨®micas a los j¨®venes de entre 9 y 24 a?os de edad que provengan de familias con bajos ingresos. Les dan unos 639.312 wones coreanos, es decir, algo m¨¢s de 450 euros mensuales, para que les sirvan de sustento. El objetivo que tienen las autoridades con ellos no es otro que impulsarlos a ¡°recuperar sus vidas diarias y reintegrarse a la sociedad¡±, de acuerdo al Ministerio de Igualdad de G¨¦nero y Familia surcoreano.
La ra¨ªz del problema: una baja autoestima
Uno de los rasgos en com¨²n que presentan estos j¨®venes ermita?os es la falta de confianza en las decisiones que han ido tomando en su d¨ªa a d¨ªa. Seg¨²n ellos, no han cumplido con los est¨¢ndares que la sociedad ha marcado para el ¨¦xito y consideran que no se han adaptado de manera correcta a la misma. Adem¨¢s, otros muchos han ido recibiendo cr¨ªticas por su bajo rendimiento acad¨¦mico a lo largo de su vida de estudiante. Un problema del que se torna muy dif¨ªcil hablar en un pa¨ªs marcado por la ¡°cultura de la verg¨¹enza¡±.
As¨ª lo ha expresado uno de los alrededor de 340.000 j¨®venes surcoreanos que sufren este problema, Yoo Seung-gyu, a la cadena brit¨¢nica BBC. ¡°La ¡®cultura¡¯ de la verg¨¹enza en Corea hace m¨¢s dif¨ªcil para los ermita?os hablar sobre sus problemas¡±, ha explicado. ¡°Un d¨ªa, simplemente llegu¨¦ a la conclusi¨®n que mi vida iba mal y me empec¨¦ a asilar¡±. Y, durante todo ese tiempo, ni siquiera sal¨ªa para ir al ba?o, porque no le apetec¨ªa ver a su familia.
Por otro lado, algo similar ha indicado una trabajadora de una de las organizaciones que buscan ayudar a estos j¨®venes, Kim Soo Jin. Seg¨²n ella, la juventud, en general, siente cierta opresi¨®n por los est¨¢ndares sociales. Y, cuando ellos mismos no cumplen con sus propias expectativas, ¡°piensan ¡®fall¨¦¡¯, ¡®ya llegu¨¦ tarde¡¯¡±, detalla la experta. ¡°Este tipo de ambiente social deprime su autoestima y podr¨ªa finalmente aislarlos de la sociedad¡±, concluye.
Otros tipos de ayuda
Sin embargo, los subsidios estatales no son la manera m¨¢s ¨®ptima para ayudarlos a salir de esta situaci¨®n. As¨ª lo han explicado las personas que trabajan de los programas de reinserci¨®n de los hikikomori en Corea del Sur. Seg¨²n estos, esta paga mensual puede ser un ¡°primer paso¡± con el que comenzar a hacer frente al problema. Sin embargo, conf¨ªa en que el dinero podr¨ªa servir para otro tipo de iniciativas, como financiar programas de ayuda, organizaciones o proyectos que puedan serles de utilidad.
¡°El siguiente paso¡±, de acuerdo a la directora jefe de PIE para la Juventud, Kim Hye Won, ¡°deber¨ªa ser la preparaci¨®n de programas nacionales, gratis y de alta calidad, para j¨®venes aislados¡±. ¡°Actualmente, hay un n¨²mero muy limitado de programas y centros donde los j¨®venes aislados pueden participar y tener un sentido de pertenencia¡±, ha apostillado, en declaraciones recogidas por la cadena brit¨¢nica. En cualquier caso, Hye Won asegura estar ¡°ilusionada¡± por saber que las autoridades surcoreanas se preocupan por este tema.