El conclave m¨¢s largo de la historia dur¨® 1.006 d¨ªas, hubo cardenales muertos y todos terminaron encerrados a pan y agua
El proceso de elecci¨®n de Papa m¨¢s surrealista se produjo entre 1268 y 1271 y el elegido al final ni era cardenal ni estaba presente en el c¨®nclave.
El 7 de mayo comienza el c¨®nclave que elegir¨¢ al sucesor del Papa Francisco en el Trono de San Pedro. Terminar¨¢ en el momento en que uno de los cardenales reciba dos tercios de los votos. Lo esperado es que no se alargue m¨¢s all¨¢ de dos o tres d¨ªas. El Papa Francisco fue elegido en poco m¨¢s de un d¨ªa despu¨¦s de cinco votaciones. La elecci¨®n de su antecesor, Benedicto XVI, fue a¨²n m¨¢s r¨¢pida. Solo necesit¨® cuatro votaciones, en un d¨ªa.
El m¨¢s largo del siglo XX
Si comparamos este c¨®nclave con los celebrados hace un siglo, el n¨²mero de cardenales electores ser¨¢ m¨¢s del doble, de unos 60 a 133. Adem¨¢s, lo normal es que haya cuatro votaciones en un d¨ªa, dos por la ma?ana y dos por la tarde. Hace un siglo, lo m¨¢s habitual era que solo se votara dos veces al d¨ªa.
El c¨®nclave m¨¢s largo de los ¨²ltimos 150 a?os fue el que eligi¨® al Papa P¨ªo XI en 1922. Fueron necesarias 14 votaciones y cinco d¨ªas. Entraron 53 cardenales divididos en dos facciones irreconciliables. Cuando vieron que la elecci¨®n estaba atascada, buscaron una soluci¨®n de compromiso con el arzobispo de Mil¨¢n, Achille Ratti.
El c¨®nclave interminable
Pero para llegar a la elecci¨®n m¨¢s surrealista de la historia hay que remontarse al siglo XIII. Tras la muerte de Clemente IV, los cardenales se reunieron el 29 de noviembre de 1268 y no llegaron a un acuerdo hasta el 1 de septiembre de 1271. Necesitaron 1.006 d¨ªas para elegir a Gregorio X y por el camino fallecieron tres de los veinte cardenales.
La primera peculiaridad fue que el c¨®nclave se celebr¨® en Viterbo, a 80 kil¨®metros al norte de Roma. La sede papal se hab¨ªa trasladado all¨ª huyendo del campo de batalla en que se hab¨ªa convertido Roma por la guerra entre las familias de los G¨¹elfos y los Gibelinos.
De los 20 cardenales convocados, Rodolfo de Albano falleci¨® antes del inicio de las votaciones. Por tanto, solo hubo 19 electores que se dividieron en dos facciones m¨¢s pol¨ªticas que religiosas. Unos siete ¡®Carolinos¡¯, casi todos franceses, que eran partidarios de Carlos de Anjou, rey de Sicilia y N¨¢poles, y unos diez ¡®Imperiales¡¯, casi todos italianos, que eran partidarios del Sacro Imperio Romano Germ¨¢nico.
Cum clave, todos encerrados
Desde el 29 de noviembre de 1268, los 19 cardenales se reun¨ªan una vez al d¨ªa para votar en la catedral de Viterbo sin que ninguna de las dos facciones cediera. La presi¨®n exterior era asfixiante y lograr una mayor¨ªa de dos tercios, misi¨®n imposible. El atasco solo tuvo posibilidades de solucionarse cuando el general de la Orden de los Sevitas fue a Viterbo dos meses despu¨¦s del inicio del proceso para exigir que se resolviera de inmediato¡ y huy¨® a la carrera cuando todos propusieron lavarse las manos y elegirle a ¨¦l como nuevo Papa.
Un a?o despu¨¦s de empezar las deliberaciones, los cardenales se reun¨ªan para votar cada vez con menos regularidad y el proceso estaba parado. El magistrado y el prefecto de Viterbo tem¨ªan que la historia terminara en drama. Mantener a los cardenales y a su s¨¦quito estaba arruinando a la ciudad. Hubo que subir los impuestos y la poblaci¨®n amenazaba con un levantamiento. Hartos de la situaci¨®n, ordenaron que los 19 cardenales fueran encerrados bajo llave en el Palacio Papal de Viterbo. Ah¨ª naci¨® la palabra ¡®c¨®nclave¡¯ (cum clave, con llave). Tambi¨¦n se decidi¨® simplificar el men¨² de sus eminencias, para que el coste no fuera tan oneroso para las arcas de la ciudad.
Sin techo y a pan y agua
Pero los cardenales no se dieron por aludidos y el bloqueo continu¨®, as¨ª que en verano de 1270 la ciudad decidi¨® dar un paso m¨¢s. Se quit¨® el techo de los dormitorios y de la sala de deliberaciones del palacio ¡°para que el Esp¨ªritu Santo os ilumine¡± y redujeron la dieta de los electores a pan y agua. Por esas fechas, el cardenal de Ostia renunci¨® a su derecho a voto y abandon¨® Viterbo muy enfermo. Quedaban 18 electores. Las malas condiciones afectaron a la salud de m¨¢s cardenales. Stefan Vancza, primer cardenal h¨²ngaro de la historia, y Giordano dei Conti, vicecanciller papal, enfermaron y fallecieron. Quedaban 16.
Despu¨¦s de un a?o en esas condiciones, y temiendo que ninguno saldr¨ªa vivo de all¨ª, los 16 decidieron elegir a seis, tres de cada facci¨®n, para que eligieran un candidato con la bendici¨®n de los diez restantes. El 1 de septiembre de 1271 propusieron un nombre tan sorprendente como lo hab¨ªa sido todo el proceso: Teobaldo Bisconti, que no era cardenal ni estaba en el c¨®nclave. De hecho, estaba en Tierra Santa, en Acre, combatiendo en la Novena Cruzada. El 27 de marzo de 1272 fue coronado Papa en la Bas¨ªlica de San Pedro como Gregorio X.
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