El aviso de unos ocean¨®grafos hace cinco a?os sobre el sumergible Titan
Varios expertos expresaron sus preocupaciones ante la falta de garant¨ªas de seguridad del submarino, e incluso enviaron una carta a la empresa pidiendo que permitieran una auditor¨ªa independiente

El tiempo se acaba. Los equipos de rescate trabajan a contrarreloj para conseguir, en primer lugar, encontrar el submarino Titan que perdi¨® comunicaci¨®n en el fondo del oc¨¦ano, cuando se dirig¨ªa hacia los restos del Titanic -a 3.800 metros de profundidad-. Y, en segundo lugar, tratar de evaluar la viabilidad de una misi¨®n de rescate. Los cinco tripulantes de la nave ten¨ªan un m¨¢ximo de 96 horas de ox¨ªgeno. Plazo que se cumple ma?ana. Esto quiere decir que hoy es el ¨²ltimo d¨ªa en el que sigue existiendo una posibilidad, por remota que sea, de recuperar con vida a los infortunados n¨¢ufragos -entre los que est¨¢, por cierto, el director ejecutivo de la empresa OceanGate, Stockton Rush-.
De cualquier modo, parece harto improbable que a estas alturas se pueda salvar la vida de los cinco de abordo. Entre otras cosas, porque una operaci¨®n de recuperaci¨®n en esas profundidades -aunque se supiera la localizaci¨®n exacta del veh¨ªculo- puede durar d¨ªas. Y, como ya se ha se?alado, no quedan, ni por asomo, d¨ªas de ox¨ªgeno en la peque?a cabina. Por lo tanto, salvo milagro, parece que las maniobras de las autoridades servir¨¢n, a lo sumo, para recuperar los restos.
Mucho se ha hablado en los ¨²ltimos d¨ªas sobre las causas que podr¨ªa haber tras este triste suceso. A pesar de que casi todo el mundo est¨¢ de acuerdo en que la mala suerte ha jugado un papel esencial en el fatal desenlace de la expedici¨®n del Titan, tambi¨¦n hay muchos que apuntan que este escenario habr¨ªa sido evitable si la empresa hubiera escuchado a los expertos. Ya en el a?o 2018, cuando se fueron conociendo cada vez m¨¢s detalles del proyecto, varias personas destacadas del campo de la exploraci¨®n oce¨¢nica enviaron una carta a OceanGate expresando preocupaci¨®n ante la falta de garant¨ªas en materia de seguridad de la peque?a nave.
Se?ales ignoradas
Hubo repetidos llamados para que los responsables aceptaran una auditor¨ªa independiente que evaluara pormenorizadamente el submarino, para determinar as¨ª si era o no apto para navegar a profundidades abismales. No obstante, la compa?¨ªa se neg¨® en redondo, alegando que estos procesos de escrutinio externo son demasiado largos y demorar¨ªan los plazos de la exploraci¨®n y estudio de los restos del Titanic. OceanGate lleg¨® a asegurar que su veh¨ªculo ten¨ªa unas garant¨ªas de seguridad que exced¨ªan la capacidad de an¨¢lisis de los organismos competentes, al incorporar tecnolog¨ªas sin precedentes y apenas conocidas.
Y esto no fue todo. Un empleado de la empresa, David Lochridge, expres¨® hace un tiempo preocupaciones similares sobre la seguridad del Titan. La respuesta de la empresa fue despedirlo fulminantemente por, seg¨²n ellos, haber incumplido su contrato al desvelar detalles confidenciales de un proyecto en desarrollo. Todo parece indicar que fueron muchas y repetidas las se?ales de peligro que, simplemente, fueron ignoradas o incluso silenciadas por los responsables de la exploraci¨®n.