Cambio en la lista de ciudades m¨¢s pobladas de Espa?a
Zaragoza le ha arrebatado el cuarto puesto a Sevilla despu¨¦s de haber aumentado su censo en 9.423 residentes, muchos de ellos extranjeros.
La demograf¨ªa de Espa?a est¨¢ en constante cambio. Y en todas las direcciones. Hay ciudades que, azotadas por el fen¨®meno de la despoblaci¨®n y los desplazamientos hacia los epicentros econ¨®micos, ven su censo mermar a?o tras a?o. Otras, simplemente, est¨¢n estancadas y no experimentan modificaciones significativas a corto plazo. Pero tambi¨¦n las hay que multiplican sus gentes sin parar.
La lista de urbes m¨¢s pobladas del pa¨ªs siempre est¨¢ en disputa. Algunas tienen poblaciones tan parejas que la m¨¢s m¨ªnima variaci¨®n puede hacer que caigan o asciendan en la clasificaci¨®n. No es que importe demasiado ser el quinto, el sexto o el octavo. Pero una ciudad populosa es signo de fortaleza y bonanza econ¨®mica. De que las cosas funcionan y la gente quiere realmente vivir en ese sitio.
Esto es especialmente cierto si se atiende al n¨²mero de extranjeros que llegan a cada sitio. Porque uno puede haber nacido en una ciudad y terminar qued¨¢ndose, se viva bien en ella o no, por pura tradici¨®n o por no tener que rehacer los c¨ªrculos de allegados. Sin embargo, si alguien ha venido de fuera expresamente a vivir a un lugar, quiere decir que tiene un algo especial que le ha atra¨ªdo.
Aumento de extranjeros
Obviamente, Madrid y Barcelona siempre se llevan la palma. Pero un par de pelda?os por detr¨¢s hay una lucha igualmente interesante. Una que refleja crecimiento y bienestar. La del cuarto y el quinto puesto. Aunque no est¨¢n en el podio, siguen siendo importantes faros regionales que ofrecen oportunidades a cientos de miles de personas. Los protagonistas de esta competici¨®n son Zaragoza y Sevilla.
Tradicionalmente ha sido la capital andaluza la que se ha conocido como ¡°la cuarta ciudad de Espa?a¡±. De hecho, es algo que alguna gente dec¨ªa con cierto orgullo, como una muestra de pertenencia a la ¨¦lite. Pero se acab¨®. Al menos de momento. La revista Cifras ha revelado que se ha producido un adelantamiento de proporciones alonsianas. Los ma?os se han hecho con la plaza y tienen sus ojos en el bronce (pero paso a paso).
Este cambio, aunque puramente anecd¨®tico -las dos ciudades tienen una poblaci¨®n pr¨¢cticamente id¨¦ntica-, sirve para ilustrar algunas tendencias interesantes en la capital aragonesa. Por ejemplo, que de los 9.423 ciudadanos que ha aumentado la ciudad, muchos de ellos son extranjeros, que ahora mismo representan en torno al 14% del censo. En total, hay 694.109 personas viviendo en Zaragoza por las 693.229 de Sevilla. Una diferencia nimia, no obstante. Los sevillanos tendr¨¢n que aumentar su descendencia si quieren recuperar su lugar en el ranking.