Se desatan las dudas sobre el uso en el mar del gigantesco portaaviones chino construido en tiempo r¨¦cord

Un nuevo barco avistado en el puerto de Guzgzhou, China, ha planteado muchos interrogantes entre los analistas militares, que siguen sin poder descifrar cual es el prop¨®sito concreto del nav¨ªo. Con una longitud de 200 metros y una anchura de 40 metros, el barco fue notificado por primera vez en octubre de 2024.

De acuerdo con las primeras estimaciones del medio The War Zone, el barco podr¨ªa ser un portaaviones o un buque de asalto anfibio similar a ¨¦l Hainan, uno de los nav¨ªos m¨¢s importantes para Pek¨ªn que fue exhibido durante cinco d¨ªas a finales de noviembre.

Las sospechas se confirmaron el 2 de diciembre, cuando el medio logr¨® obtener nuevas im¨¢genes del barco. Tomadas durante las primeras pruebas de navegaci¨®n del barco, los expertos dilucidaron una pista de aterrizaje, lo que parece indicar que se trata de un portaviones. En cuanto a la idea de que se trate de un buque de asalto anfibio, ninguna de las pruebas recabadas respalda esta teor¨ªa.

Gracias a las fotograf¨ªas sat¨¦lites del barco publicadas en X, los expertos han dividido su estructura en tres partes. La primera parte est¨¢ formada por la proa, que cuenta con una cubierta y un m¨¢stil com¨²n. La segunda parte se ubica en el centro de la nave y presenta una torre de control que podr¨ªa utilizarse para gestionar la llegada de aviones. La tercera y ¨²ltima parte se encuentra en la popa y alberga la l¨ªnea de aterrizaje y despegue.

Otro aspecto del nav¨ªo que ha desconcertado a algunos expertos es la velocidad a la que fue construido. Los primeros rastros de un astillero en el puerto de Guanzhou se detectaron a mediados de mayo de 2024. Para septiembre el barco ya estaba construido y se le estaban realizando las primeras pruebas.

Financiaci¨®n oculta

Los expertos de The War Zone no han conseguido descifrar el origen de la financiaci¨®n de este nav¨ªo. Algunos analistas creen que el barco puede haber sido encargado por el ej¨¦rcito chino para su uso militar, mientras otros aseguran que puede tratarse de un proyecto privado iniciado por la Corporaci¨®n Estatal de Construcci¨®n Naval de China, CSSC, la empresa nacional de construcci¨®n naval.

Sin embargo, todas las pruebas indican que, a¨²n si no se trata de un avi¨®n militar del gigante asi¨¢tico, el ej¨¦rcito chino puede recurrir a sus servicios para albergar helic¨®pteros armados e incluso drones durante futuras maniobras militares en el Pac¨ªfico o en Taiw¨¢n.

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