Pactos tras las elecciones generales del 23J: ?Cu¨¢les son los posibles acuerdos y apoyos para formar Gobierno?
El PP gana, pero sin opciones reales de gobernar por el desplome de Vox. El PSOE resiste el impacto del 28M y, aunque Sumar caiga, podr¨ªa reeditar un gobierno de coalici¨®n con las minor¨ªas.
Los bar¨®metros vaticinaron unos comicios en dos bloques y as¨ª ha sido. Han sido unas elecciones de horquillas cortas y resultados ajustados, de esas en las que nadie apuesta todo su dinero a un color. Aunque s¨ª hab¨ªa un favorito en las encuestas, el Partido Popular de Alberto N¨²?ez Feij¨®o (136) se ha quedado cojo en apoyos porque el escenario con el que le sal¨ªan las cuentas se ha venido abajo, am¨¦n del derrumbe de Vox (33). La coalici¨®n de derechas suma 169 esca?os. No da.
En Ferraz cambiaron la alegr¨ªa forzada de G¨¦nova por una cautela que fue de menos a m¨¢s en la escala de celebraci¨®n. Igual que su campa?a electoral. Hasta el punto que, con el escrutinio pr¨¢cticamente zanjado, la sensaci¨®n en las filas socialistas era de absoluta victoria. Y eso que han perdido (122). Sumar (31) ha celebrado tambi¨¦n, aunque de capa ca¨ªda por no llegar a los esca?os que s¨ª recogi¨® Unidas Podemos en 2019. Ambos partidos suman 153 asientos en el Congreso. Tampoco da.
Estos cuatro partidos son el veh¨ªculo al completo de gobierno, pero falta la llave de gobernabilidad que permita arrancar el motor de la legislatura. Para ello, depender¨¢n de otros partidos de muy diferente ¨ªndole y que abren la puerta a muy distintas posibilidades.
Amarga victoria del PP: ?qu¨¦ necesita?
El primer escenario posible, respetando el orden de la lista m¨¢s votada, es aquel que termina con Feij¨®o en la Moncloa. Como el Partido Popular no alcanza los 176 esca?os que marcan la mayor¨ªa absoluta del hemiciclo ni aunando los apoyos de la formaci¨®n de Santiago Abascal, y como tampoco parece probable que vaya a sumar los de otros partidos -a excepci¨®n de UPN-, abanderados por el PNV y seguidos por Coalici¨®n Canaria, cuya l¨ªnea roja est¨¢ en la presencia de Vox en el Ejecutivo, al l¨ªder gallego se le abre un horizonte que, muy en el fondo, ya conoc¨ªa.
Cuando Feij¨®o extendi¨® aquel documento en el ¡®cara a cara¡¯ a S¨¢nchez sab¨ªa que esto pod¨ªa pasar y quer¨ªa asegurarse la incertidumbre que ahora se ha instalado en las filas populares. B¨¢sicamente, necesitan la abstenci¨®n o el apoyo de un PSOE cuyo discurso est¨¢ lejos de aceptar esta propuesta. Desde el balc¨®n de la sede, Feij¨®o ped¨ªa el apoyo de los socialistas para evitar que las formaciones extremistas e independentistas bloqueen el gobierno. Y realmente ah¨ª est¨¢ la clave de la aritm¨¦tica electoral del 23J.
Dulce derrota del PSOE: ?qu¨¦ apoyos precisa?
S¨¢nchez tiene la opci¨®n de reeditar los pactos que ya le alzaron al poder hace cuatro a?os. Ser¨ªa, de nuevo, en forma de gobierno de coalici¨®n. Ya no con Unidas Podemos, sino con Sumar. Precisar¨ªa de los 7 esca?os de ERC (no le vale la abstenci¨®n), los 6 de EH Bildu (de nuevo, s¨®lo sirve un ¡®s¨ª'), los 5 de PNV, el ¨²nico voto del BNG y el hueso duro de roer: Junts. El partido de Puigdemont, quien ya ha hecho p¨²blico que ¡°no ser¨¢ a cambio de nada¡±. Pese a ello, la complicaci¨®n de S¨¢nchez en este punto es conjugar a Junts y ERC y a PNV y EH Bildu, partidos que rivalizan en Catalu?a y Pa¨ªs Vasco, respectivamente. Lo que uno recibe, tambi¨¦n lo tendr¨¢ que obtener el otro.
Un acuerdo con estas formaciones permitir¨ªa al PSOE prorrogar su mandato, materializando un final de campa?a de oro y logrando la movilizaci¨®n del electorado sobre la bocina. De no hacerlo, hay otro ¨²ltimo escenario: la repetici¨®n de elecciones, lo que probablemente conducir¨ªa a una concentraci¨®n del voto en PP y PSOE, a consecuencia de una supuesta ca¨ªda mayor de Sumar y Vox, plan que puede no disgustar a los dirigentes socialistas y populares. Pero eso ya es otra historia.