Los privilegios que perder¨¢ VOX en el Congreso por bajar de 52 a 33 esca?os

La ca¨ªda de Vox ha sido una de las pocas conclusiones meridianas a las que se puede llegar despu¨¦s del inestable 23J. Si en 2019 la formaci¨®n liderada por Santiago Abascal lleg¨® a alzarse con 52 esca?os, los ¨²ltimos comicios se han estancado en los 33. Siguen siendo la tercera fuerza pol¨ªtica del pa¨ªs, pero el escenario que se presenta por delante, as¨ª como sus posibilidades dentro del hemiciclo, se ven seriamente mermadas.

Aunque la cantidad en que un partido tiene representaci¨®n en el Congreso es determinante per se, sobre todo por la capacidad de influir m¨¢s o menos con el voto a favor o en contra de aquello que ocupe la agenda legislativa, o en la propia aprobaci¨®n de los presupuestos, dentro de la C¨¢mara Baja hay mecanismos concretos a trav¨¦s de los que se pueden ejercer las labores de control de acci¨®n del Gobierno. Precisamente ah¨ª es donde Vox ha perdido fuerza: perder¨¢ la capacidad de hacer dos cosas que han marcado su papel los ¨²ltimos cuatro a?os.

Ni recurrir leyes al TC, ni aprobar mociones de censura

En primer lugar, no podr¨¢ recurrir leyes al Tribunal Constitucional. El m¨ªnimo necesario son 50 esca?os, por lo que se queda lejos de poder aplicar este proceso. No se trata de que haya perdido la capacidad absoluta de presentar recursos, ya que siempre puede convencer a otro partido, presumiblemente el Partido Popular, para que le apoye en sus tareas. El asunto es que Vox ya no podr¨¢ hacerlo por su cuenta, en solitario, como s¨ª pod¨ªa antes.

El segundo escal¨®n es el de la moci¨®n de censura. Tampoco podr¨¢ presentarlas en solitario -como ocurri¨® con el ¨²ltimo intento, encabezado por Ram¨®n Tamames-. En esta legislatura, si Vox quiere echar a rodar este mecanismo constitucional deber¨¢ asegurarse los votos favorables de otra formaci¨®n. M¨ªnimo, debe sumar 35. As¨ª lo ha se?alado la periodista de El Objetivo, Mar¨ªa Blanco, en un tweet que ya suma casi un mill¨®n y medio de personas alcanzadas.

Tal y como se?ala, la p¨¦rdida del privilegio de poder llevar a cabo estos dos procesos por su cuenta obliga al partido de Santiago Abascal a replantear su estrategia de oposici¨®n electoral. ¡°Teniendo en cuenta que recurri¨® m¨¢s de 40 normas y present¨® 2 mociones de censura¡­, desaparecen dos de sus grandes bazas pol¨ªticas¡±, concreta en el tweet. Esto, al mismo tiempo, le obliga a entenderse con otros partidos si desea llevar a cabo la misma l¨ªnea de pol¨ªtica o, por el contrario, asumir un rol diferente en el uso de las competencias del Congreso.