Las potencias militares ordenan vigilar el s¨²persubmarino que China lanza al mar con direcci¨®n a Pakist¨¢n
Las Armada del Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n ha enviado el segundo de los nuevos submarinos de ataque de firma china para equipar al ej¨¦rcito de Pakist¨¢n.

China lleva a?os granjeando un aliado muy importante, a pesar de sus enemistades. En un paso significativo entre Pek¨ªn y Islamabad por reforzar sus buenas relaciones, el astillero chino Wuchang Shipbuilding Industry Group Company Ltd., ubicado en Wuhan, ha completado y enviado el segundo submarino de la clase Hangor destinado a la Armada de Pakist¨¢n. La ceremonia oficial se llev¨® a cabo en la Base Naval de Shuangliu, donde la nueva unidad recibi¨® el nombre oficial de PNS/M SHUSHUK, seg¨²n Asociated Press.
Este submarino di¨¦sel-el¨¦ctrico es parte de un acuerdo firmado en 2015, mediante el cual Pakist¨¢n adquirir¨¢ un total de ocho submarinos de la clase Hangor, una variante de exportaci¨®n del modelo chino Tipo 039A. Los primeros cuatro submarinos est¨¢n siendo construidos en China, mientras que los cuatro restantes se fabricar¨¢n localmente en un astillero en Pakist¨¢n, bajo un programa de transferencia de tecnolog¨ªa.
Un submarino polivalente
El PNS/M SHUSHUK es una embarcaci¨®n moderna dise?ada para operar en misiones de vigilancia, defensa y ataque. Tiene una longitud de 76 metros y un peso aproximado de 2.800 toneladas, y puede alojar a 38 tripulantes, incluyendo especialistas en operaciones submarinas.
Entre sus principales capacidades, cuenta con seis lanzadores de torpedos para atacar embarcaciones enemigas y est¨¢ equipado con misiles de largo alcance, lo que le permite enfrentar amenazas desde una distancia segura. Adem¨¢s, se cree que estos submarinos podr¨ªan llevar misiles de crucero Babur 3, con capacidad de ataque estrat¨¦gico, lo que aumentar¨ªa significativamente el poder militar naval de Pakist¨¢n. Un m¨²sculo armament¨ªstico que desde 1970 hasta 1990 se hab¨ªa nutrido principalmente de submarinos franceses clase Agosta, que a d¨ªa de hoy est¨¢n obsoletos.
Por ello, el pa¨ªs ha lanzado un doble plan de modernizaci¨®n: por un lado, actualizar algunos de los sumergibles m¨¢s recientes con la ayuda de empresas turcas, y por otro, adquirir nuevos modelos a China.
Un refuerzo clave en la regi¨®n que preocupa a Occidente
Este desarrollo subraya la profundizaci¨®n de los lazos diplom¨¢ticos y militares entre China y Pakist¨¢n en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Adem¨¢s de la colaboraci¨®n en la construcci¨®n de submarinos, ambos pa¨ªses han cooperado en la fabricaci¨®n conjunta de aviones de combate, como el JF-17, y en la realizaci¨®n de ejercicios militares conjuntos, fortaleciendo su alianza estrat¨¦gica en el ¨¢mbito de la defensa.
Algo que simboliza una amenaza para la influencia econ¨®mica de Occidente en la regi¨®n. Y es que, en enero de 2018, Estados Unidos anunci¨® la suspensi¨®n de gran parte de su ayuda militar a Pakist¨¢n, que superaba los 1.000 millones de d¨®lares, argumentando que Islamabad no estaba tomando medidas suficientes contra el terrorismo. Lo que inevitablemente ha generado unas fluctuaciones relacionales que China est¨¢ aprovechando al m¨¢ximo.
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