El ¡®no¡¯ a la amnist¨ªa ¡®barre¡¯ en las autonom¨ªas

La ley org¨¢nica de amnist¨ªa, que busca la ¡°normalizaci¨®n pol¨ªtica, institucional y social en Catalu?a¡±, a falta todav¨ªa de que recorra a¨²n un largo camino pol¨ªtico y judicial, ha provocado en Espa?a (no sabemos qu¨¦ ocurrir¨¢ en Catalu?a) de todo menos normalizaci¨®n. El PSOE, que hab¨ªa negado por activa y por pasiva la posibilidad de una amnist¨ªa, de repente se vio en una situaci¨®n en la que, o bien aceptaba las condiciones de los partidos independentistas, o ten¨ªa que volver a presentarse a unas elecciones. S¨¢nchez opt¨® por el pragmatismo y, a pesar de sus ¡°convicciones pol¨ªticas y morales¡±, pact¨® una ley que ha sido presencia obligatoria en los discursos de cualquier pol¨ªtico durante las ¨²ltimas semanas.

El PP, triunfante perdedor de las elecciones, a sabiendas de lo pol¨¦mico del acuerdo, ha llevado a cabo durante las ¨²ltimas semanas, junto con VOX, una de las oposiciones m¨¢s duras que se recuerdan a un Gobierno que apenas cumple un mes en el cargo. Entre acusaciones de traici¨®n y de atentado contra la democracia, las derechas han reunido a miles de personas en sendas manifestaciones convocadas a lo largo de toda Espa?a. Pero los obst¨¢culos que est¨¢ encontrado la ley de amnist¨ªa no han sido solo de opini¨®n p¨²blica, el PP, que controla tanto el Senado como la mayor¨ªa de ayuntamientos y gobiernos auton¨®micos de Espa?a, ha puesto en marcha toda su maquinaria pol¨ªtica para frenar esta medida que consideran que atenta contra la separaci¨®n de poderes.

Rechazo preventivo

Dos meses antes de que el pol¨¦mico texto de 23 p¨¢ginas fuera presentado ante el Congreso el PP, intuyendo las intenciones de S¨¢nchez, present¨® una iniciativa en todos los parlamentos auton¨®micos para mostrar su rechazo a la posible medida. El 20 de septiembre, a¨²n en plenas negociaciones, los procurados de las Cortes de Castilla y Le¨®n votaron al respecto, el pasado mi¨¦rcoles lo hicieron los del Parlamento de Canarias y as¨ª, en menos de tres meses, la pr¨¢ctica totalidad de los parlamentos auton¨®micos se han posicionado en contra del indulto a los encausados del proc¨¦s. Galicia y Canarias han sido las ¨²nicas autonom¨ªas que se pusieron la venda despu¨¦s de la herida, ya que emitieron el ¡°no¡±, cuando el ¡°s¨ª¡± ya hab¨ªa sido dado.

Page, la excepci¨®n

Tras las elecciones del 28-M el PP gobierna en todas las comunidades aut¨®nomas a excepci¨®n de cinco: Castilla la Mancha, Navarra y Asturias, controladas por el PSOE, el Pa¨ªs Vasco (PNV) y Catalu?a (ERC). No resulta, por tanto, sorprendente, que las votaciones salieran favorables a los populares en 14 ocasiones, por cuatro en contra. ?Qu¨¦ ocurre con la quinta comunidad? Castilla la Mancha ha sido el ¨²nico territorio que no ha permitido que se debatiera en pleno la declaraci¨®n institucional popular. Garc¨ªa Page ha sido una de las voces m¨¢s cr¨ªticas contra la medida de gracia, llegando a declarar el pasado viernes que le ¡°duele¡± ver las cosas que hace el Gobierno y que ¡°bailar al son de Puigdemont no puede traer nada bueno¡±.

Si bien la diferencia en votos totales es m¨ªnima, el PP siempre puede presentar los datos de la siguiente manera: el 88% del territorio y el 71% de la poblaci¨®n no aprueban la amnist¨ªa. Sin embargo, seg¨²n el bar¨®metro de diciembre de 40dB. para EL PA?S y la Cadena SER, los datos son m¨¢s conservadores, aunque no por ello no merezcan atenci¨®n: Un 60% de los espa?oles considera que la amnist¨ªa es injusta y supone un privilegio. El PP mantendr¨¢ la presi¨®n auton¨®mica sobre S¨¢nchez y G¨¦nova ya ha confirmado la creaci¨®n de un grupo de trabajo liderado por Cuca Gamarra en el que se intentar¨¢ coordinar una respuesta conjunta de todas ¡°sus¡± comunidades contra la amnist¨ªa, el verificador y por ¡°entregar¡± Pamplona a Bildu.