Alcocer: unas elecciones en el origen del trasvase Tajo-Segura
El origen de este debate nacional se encuentra en unos peque?os pueblos del centro peninsular. Borja Castro, alcalde de uno de ellos, pone voz a una tierra silenciada por el goteo de la pol¨ªtica.
Lejos de la costa hay un mar. Entre los cerros y lomas que separan la comarca de La Alcarria, en Guadalajara, de una gigante cuenca fluvial, al norte de tierras conquenses, se encuentra la mayor ¨¢rea h¨²meda de la pen¨ªnsula. Los embalses que llenan el llamado Mar de Castilla componen la cabecera del Tajo: Entrepe?as y Buend¨ªa. Ambos desprenden un aire h¨²medo que en invierno congela al tacto y en verano invita a meter los pies. Y, en silencio, los dos juegan un papel clave en la pol¨ªtica nacional. De ellos sale el agua que abastece el trasvase Tajo-Segura.
Alcocer es uno de los pueblos que viven a?o tras a?o el dilema de una sequ¨ªa anunciada. Son 315 los vecinos que habitan las calles de la localidad ba?ada por el embalse de Buend¨ªa. No muy lejos se hallan otros 21 municipios que claman por los derechos de una tierra, personas cuya sangre est¨¢ regada, en parte, por los afluentes ribere?os de un mar en peligro. Mientras un pa¨ªs entero debate sobre c¨®mo tiene que gestionarse el agua, ellos piden una voz que sienten desde hace tiempo silenciada por un goteo que no cesa.
Borja Castro Cervig¨®n habla con Diario As. Es alcalde de Alcocer por parte del PSOE, candidato a la reelecci¨®n; pero, sobre todo, es el vicepresidente de la Asociaci¨®n de Municipios Ribere?os.
?C¨®mo afecta el trasvase a la relaci¨®n entre el votante y el pol¨ªtico?
De manera directa. Cuando llegan las elecciones, como ahora, muchos aparecen para pedir su voto; pero a las gentes de los pueblos hay que tratarlas con inteligencia. Tienen memoria y saben perfectamente qui¨¦n les ayuda y qui¨¦n defiende el territorio. Desde el Gobierno nacional ha habido una modificaci¨®n de las reglas que ha recortado los trasvases y que est¨¢ permitiendo que haya m¨¢s agua en Entrepe?as y Buend¨ªa. Incluso el auton¨®mico, encabezado por Page, ha recurrido a Europa para que se fijaran los caudales ecol¨®gicos. Por eso, la gente de los pueblos, que es inteligente y no paleta, como los ha llamado en alguna ocasi¨®n el Partido Popular de Castilla-La Mancha, saben qui¨¦nes son los aliados del territorio.
?Y en los pueblos m¨¢s cercanos a los embalses?
En el caso de los 22 alcaldes de los municipios ribere?os conviven las diferentes ideolog¨ªas, que se unen en torno a esa asociaci¨®n para defender el territorio. Dejan atr¨¢s sus siglas y anteponen las necesidades e intereses del lugar para que haya m¨¢s agua en los municipios ribere?os.
?Qu¨¦ significa el agua para estos municipios?
Es nuestra fuente de vida, la materia prima para crear trabajo y desarrollo. Antes de la creaci¨®n de los embalses, nuestros pueblos eran eminentemente agricultores y ganaderos. Y cuando se crearon las presas, se inundaron las tierras m¨¢s f¨¦rtiles. Nos dijeron que ten¨ªamos que reconvertirnos y empezar a vivir del agua. Entonces se genera un flujo de actividad importante. Al albor de ese crecimiento del agua, se disparan el turismo y la hosteler¨ªa. Se empiezan a construir casas, organizaciones, hoteles y negocios. Y todo empieza a desaparecer cuando se crea la infraestructura del trasvase hace 42 a?os.
Es decir, nos dicen que tenemos que aprender a vivir del agua y, cuando estamos aprendiendo a hacerlo, nos la quitan. Ah¨ª empez¨® a irse por la tuber¨ªa, igual que un sumidero, todo lo que se hab¨ªa creado; y, seg¨²n se iban perdiendo todas estas oportunidades, la gente empez¨® a irse a la ciudad. Para nosotros el agua no es solamente desarrollo, es un freno a la despoblaci¨®n.
?C¨®mo est¨¢ ahora mismo la situaci¨®n h¨ªdrica?
Estamos teniendo un a?o muy seco. Las aportaciones a los embalses de Entrepe?as y Buend¨ªa han ca¨ªdo un 40% en los ¨²ltimos diez a?os y esto nos est¨¢ poniendo en alerta. Cambiar la pol¨ªtica h¨ªdrica es necesario para elevar la l¨¢mina de agua en los dos embalses. Y, en esa l¨ªnea, estamos recibiendo buenas noticias con todo lo que venimos reclamando. Un ejemplo es la ayuda de 40.000.000 de euros para mejorar nuestras infraestructuras y la calidad de vida de nuestros vecinos. As¨ª podemos crear proyectos urban¨ªsticos relacionados con el agua de una forma sostenible, recortar trasvases, fijar caudales ecol¨®gicos y mucho m¨¢s.
Adem¨¢s, se acaban de publicar recientemente los planes hidrol¨®gicos del Tajo; y en esa misma publicaci¨®n del BOE, el Gobierno deja escrito otro compromiso: volver a cambiar las reglas del trasvase para volver a recortar el memor¨¢ndum que en su d¨ªa firm¨® Mar¨ªa Dolores de Cospedal como presidenta de Castilla-La Mancha traicionando a este territorio. Los votantes de Guadalajara y Cuenca no van a perdonar nunca al Partido Popular el haber vendido Castilla-La Mancha a los intereses electorales del Levante por obtener m¨¢s votos a nivel nacional.
La historia del trasvase es muy dilatada. Este punto de inflexi¨®n que comentas llega tras cinco sentencias del Tribunal Supremo en las que se da la raz¨®n al Gobierno auton¨®mico en sus denuncias sobre la falta de fijaci¨®n de caudales ecol¨®gicos. ?Crees que se ha tardado mucho en reaccionar desde el poder ejecutivo?
La pol¨ªtica, muchas veces, depende de la voluntad. Aunque unas sentencias, efectivamente, digan que se tiene que cumplir, no ha sido hasta que ha llegado un gobierno progresista cuando se han cumplido. Da la raz¨®n al Gobierno regional, pero tambi¨¦n a la Asociaci¨®n de municipios ribere?os, que fueron los primeros que denunciaron la falta de caudales ecol¨®gicos. El ¨²nico r¨ªo de Espa?a que no ten¨ªa. Ahora, obligados por los tribunales y por la Directiva Marco Europea, cambian las normas, la situaci¨®n y la gesti¨®n h¨ªdrica en este pa¨ªs.
Sin embargo, desde el Partido Popular s¨ª defienden un trasvase. ?Pueden entenderse las elecciones municipales en los pueblos de esta zona como una especie de refer¨¦ndum a favor o en contra del trasvase?
S¨ª, es as¨ª. De hecho, en algunos pueblos el debate es todav¨ªa mucho m¨¢s incendiario. Adem¨¢s, hemos escuchado recientemente las manifestaciones que ha orquestado la derecha en el Levante, llevando autobuses de regantes a Madrid. Este es un escenario que se agita siempre previo a unas elecciones. El Levante saca la bandera de ¡®El agua para regad¨ªos¡¯ y la lleva a Madrid para arrojarla al Gobierno.
El Partido Popular sabe que tiene un nicho de votos m¨¢s importante en esta zona y sacrifica a su pe¨®n en Castilla-La Mancha. No le importa y defiende que se siga alimentando el monstruo del regad¨ªo y los trasvases, ahogando y secando a los municipios ribere?os. Lo est¨¢n engordando de manera artificial con una estructura desmesurada a cientos de kil¨®metros para hacer desembocar el r¨ªo Tajo, en lugar de en Lisboa, en la Manga del Mar Menor.
?Qu¨¦ le dir¨ªas a ese regante que sale a manifestarse?
Lo primero: que lea y se informe. Muchas veces los pol¨ªticos dicen cosas que no tienen nada que ver con la realidad en una ¨¦poca previa a elecciones. Podr¨ªan leer esa publicaci¨®n en el BOE en la que se dice que el Gobierno de Espa?a les va a subvencionar el agua desalada para sustituir, al mismo precio, el agua del trasvase. Al final es un debate simplemente por el coste del agua; si la desalada fuera m¨¢s barata, un empresario o un regante, que mira su cuenta de resultados, optar¨ªa por esta opci¨®n si econ¨®micamente es m¨¢s rentable.
Le dir¨ªa que pensara de forma aut¨®noma. No se puede pretender convertir un territorio seco en la huerta de Europa con el recurso perteneciente a otra parte del territorio. Y le dir¨ªa que se pusiera nuestros zapatos. Si ellos tienen derecho a desarrollarse con el agua, nosotros tambi¨¦n la queremos (r¨ªe). Agua para todos, pero primero para nosotros, que es donde nace y est¨¢ de manera natural el recurso. Que leyeran el panorama nacional alej¨¢ndose del ego¨ªsmo. Tienen un Mar Mediterr¨¢neo con recursos h¨ªdricos infinitos. Ellos pueden desalar, nosotros no.
En una entrevista a CLM TV dec¨ªas que ¡°no solamente nos da la raz¨®n la ciencia, sino tambi¨¦n la pol¨ªtica¡±; ?qu¨¦ aspectos cient¨ªficos avalan la subida de los caudales ecol¨®gicos o defienden la ruptura del trasvase?
Son los t¨¦cnicos del ministerio los que dicen que para estabilizar los embalses de Entrepe?as y Buend¨ªa hab¨ªa que recortar el trasvase. No pod¨ªamos pasar de estar en invierno en un nivel 2 y luego en verano casi llegar a extinguir el r¨ªo. No es bueno que haya tanta fluctuaci¨®n.
Adem¨¢s, las mismas asociaciones de bi¨®logos y qu¨ªmicos del Levante alertan de las consecuencias desastrosas que est¨¢ teniendo en su territorio. Ellos son empresarios y miran por su bolsillo, pero deben mirar tambi¨¦n por la situaci¨®n medioambiental en la que se encuentra la Manga del Mar Menor, que es consecuencia directa de la contaminaci¨®n de las aguas subterr¨¢neas por la sobreexplotaci¨®n de regad¨ªos. Ese patrimonio est¨¢ perdiendo su atractivo y, adem¨¢s, est¨¢ echando a sus habitantes por los hedores a muerte y putrefacci¨®n. Deber¨ªan tener en cuenta eso en el Levante.
Alcocer est¨¢ ba?ada por las aguas del embalse de Buend¨ªa de forma natural, habl¨¢bamos del refer¨¦ndum. ?Hay una opini¨®n mayoritaria?
Cuando hablamos de las municipales, al ser n¨²cleos tan peque?os, siempre est¨¢ muy ligado el trabajo de esos cuatro a?os y la persona que encabeza la lista. Si esa persona ha dado la cara y ha estado en el d¨ªa a d¨ªa y puede mirar a la cara a sus vecinos, es determinante. El agua tiene una lectura m¨¢s en el ¨¢mbito regional, en la papeleta auton¨®mica.
?C¨®mo se plantea el futuro del trasvase?
Con esperanza. Hace cuatro a?os, cuando yo entro en la asociaci¨®n, encuentro a 21 alcaldes m¨¢s con los brazos bajos. Dec¨ªan que nada iba a cambiar, que todo iba a ser muy complicado; ve¨ªan el futuro oscuro. Y hemos dado la vuelta a esta situaci¨®n. Es cierto que nos ha ayudado bastante un gobierno progresista nacional, que ha entendido las necesidades de los municipios ribere?os en contraposici¨®n a los intereses econ¨®micos y capitalistas en el Levante. Se abre un futuro de esperanza. Estamos resucitando, dando pasos cortos, pero seguros.