El verdadero ave f¨¦nix resucita
Un total de 500 ejemplares del toki han poblado la isla de Sado (Jap¨®n). Los agricultores consideraban a esta especie una amenaza para los cultivos de arroz.
El verdadero ¡®ave f¨¦nix¡¯ est¨¢ de vuelta en Jap¨®n. Medio millar de ejemplares del toki (el ibis japon¨¦s) han sido localizados en la isla de Sado, una peque?a isla costera de Jap¨®n que se encuentra en aguas del mar de Jap¨®n, frente a la costa occidental de la gran isla de Honsh¨±.
La especie, tambi¨¦n conocida como ¡®Nipponia nippon¡¯ es una especie de ave pelecaniforme de la familia ¡®Threskiornithidae¡¯. Adem¨¢s de Jap¨®n, era una especie que tambi¨¦n se distribu¨ªa por otros pa¨ªses asi¨¢ticos como China o Corea. Se alimenta en los campos de arroz y anida en los ¨¢rboles altos. Con unas dimensiones de algo menos de un metro, destaca por su plumaje rosa claro, un pico fino, alargado y curvado hacia abajo, adem¨¢s de una cabeza de color rojo.
Un ejemplar de ave que ha sido reintroducido desde China a trav¨¦s de un programa de conservaci¨®n. Su presencia en esta isla nipona atrae a los numerosos turistas que visitan anualmente la isla de Sado. Hasta el descubrimiento de las 500 aves de esta especie, el ¨²ltimo dato sobre la presencia de este animal data del a?o 2003, cuando una hembra de ibis japon¨¦s llamada Kin (¡±Oro¡± en japon¨¦s) muri¨® a la edad r¨¦cord de 36 a?os como la ¨²ltima superviviente de la especie en esta isla.
Ocho a?os antes muri¨® Midori (¡±Verde¡±), que fue el ¨²ltimo macho de ibis japon¨¦s. Se trata de una especie en peligro de extinci¨®n. En el periodo Edo o era de la paz ininterrumpida de Jap¨®n, entre los a?os 1603 y 1868, gozaba de cierta protecci¨®n debido a las leyes de caza que estaban aprobadas en aquella ¨¦poca. De este modo, su caza s¨®lo se restring¨ªa a ciertas clases sociales.
Precisamente por alimentarse en los arrozales, los agricultores consideraban a esta especie una amenaza para los cultivos de arroz en el pa¨ªs nip¨®n. Seg¨²n indica la revista ¡®Journal of Applied Animal Research¡¯, factores como la p¨¦rdida de h¨¢bitat, el aumento de la poblaci¨®n humana dentro del ¨¢rea de distribuci¨®n de la especie y la contaminaci¨®n ambiental resultante del uso de agroqu¨ªmicos, influyeron en la tasa de aumento de la poblaci¨®n de ibis con cresta.
Reducci¨®n del n¨²mero de especies en la d¨¦cada de 1930
El futuro de esta especie se vio comprometido a principios del siglo XX, concretamente en la d¨¦cada de 1930, cuando quedaban unas pocas docenas de ejemplares en Jap¨®n. Debido a este hecho, el toki se clasific¨® como especie protegida en el pa¨ªs.
Adem¨¢s, el uso de pesticidas y fertilizantes en los campos y cultivos en los que sol¨ªa habitar, afectaron a su medio ambiente. En el a?o 1981 s¨®lo se encontraban cinco ejemplares de esta ave, todas ellas en la isla de Sado. Desde entonces, y hasta el conocimiento de la muerte de los dos ejemplares mencionados anteriormente, no se tuvo noticias sobre la existencia del toki en Jap¨®n hasta este a?o.