La NASA se pronuncia sobre los OVNIS: ¡°La amenaza para el espacio a¨¦reo es evidente¡±
La agencia espacial publica el primer informe sobre los OVNIS encargado a expertos independientes. Se crear¨¢ un nuevo departamento de investigaci¨®n.

La presencia (o no) de vida fuera de la Tierra es algo que ha estado en la mente de muchos desde el principio de los tiempos. Los extraterrestres, hasta el momento, solo se han visto en la gran pantalla en las pel¨ªculas de ciencia ficci¨®n. Tras un informe la Administraci¨®n Nacional de Aeron¨¢utica y el Espacio (NASA) reconoc¨ªa hasta 247 avistamientos para los que no ten¨ªan explicaci¨®n.
Todos estos avistamientos llevaron a la agencia espacial de Estados Unidos a crear un equipo espec¨ªfico con el objetivo de estudiar los Fen¨®menos A¨¦reos No Identificados (UAP, por sus siglas en ingl¨¦s, lo que antes eran los OVNIS). Y durante estos ¨²ltimos meses, un antiguo cargo de inteligencia aseguraba que el Gobierno de EEUU ten¨ªa en su poder restos biol¨®gicos de extraterrestres. La pol¨¦mica, pues, estaba servida.
Ahora, y despu¨¦s de los primeros estudios y an¨¢lisis, la NASA se ha pronunciado. No le dar¨¢n la espalda a lo que pueda pasar en el cielo, ya sea algo de la Tierra o de fuera de ella. Tratar¨¢n de encontrar sentido a las diferentes ¡°anomal¨ªas en los cielos¡± que se registran cada cierto tiempo. Para ello, seg¨²n ha precisado el administrador de la NASA, Bill Nelson, se valdr¨¢n de la ¡°inteligencia artificial y el aprendizaje autom¨¢tico¡±.
En el informe, que se puede consultar en el sitio oficial de la NASA, se anuncia la creaci¨®n de un departamento especializado para el estudio de estos fen¨®menos. ¡°La NASA busca lo desconocido en el aire y en el espacio. Est¨¢ en nuestro ADN explorar y preguntar por qu¨¦ las cosas son como son¡±, se?alan desde la agencia espacial. Durante su comparecencia, Nelson ha desmentido que la NASA sea poco transparente en esta materia. No se ha encontrado, afirma, ¡°ninguna evidencia de que los UAP tengan un origen extraterrestre¡±, explica.
¡°Muchos testigos cre¨ªbles, a menudo aviadores militares, han informado haber visto objetos que no pod¨ªan reconocer sobre el espacio a¨¦reo estadounidense, se explica en el estudio. Muchos de ellos, la mayor¨ªa, se han podido explicar, pero una peque?a parte no pudo identificarse.
Una ¡°amenaza evidente¡±
El director de la NASA no ha querido anunciar qui¨¦n ser¨¢ el encargado de dirigir este nuevo departamento, que tratar¨¢ de aportar algo de luz a uno de los grandes misterios de la humanidad. Seg¨²n Bill Nelson, su Gobierno es ¡°abierto¡±en la informaci¨®n que ofrece al respecto, aunque asegura que no puede poner la mano en el fuego por otros departamentos gubernamentales implicados en el an¨¢lisis de ovnis.
Tras presentar el informe, las conclusiones que se aportan son claras. La NASA reconoce, por primera vez, que los UPA existen y son una ¡°amenaza evidente para el espacio a¨¦reo de Estados Unidos¡±. Ahora, el paso siguiente debe ser identificar qu¨¦ son y de d¨®nde proceden, sean terrestres o de fuera de nuestro planeta.
Despu¨¦s de numerosos testimonios recogidos a lo largo de los a?os, la agencia estadounidense realizar¨¢ un exhaustivo estudio que definen como un ¡°desaf¨ªo¡±. Para ello, se valdr¨¢ de nuevos m¨¦todos, las t¨¦cnicas m¨¢s novedosas y un marco de presentaci¨®n de informes sistem¨¢tico. ¡°La NASA, con su amplia experiencia en estos dominios y su reputaci¨®n global de apertura cient¨ªfica, se encuentra en una excelente posici¨®n para contribuir a los estudios¡±, concluyen.
El estudio lo firman 16 expertos independientes, todos ellos autoridades en su campo de estudio. Recomiendan a la NASA que ¡°aproveche su amplia experiencia¡± y utilice los recursos de observaci¨®n de la Tierra para estudiar las condiciones ambientales asociadas a los UAP. Con ello, se podr¨¢n eliminar las causas meteorol¨®gicas o naturales de los avistamientos.