El peligro de cavar un hoyo de m¨¢s 0,6 metros en la playa
Si no se tiene cuidado, la arena se derrumba a una velocidad inveros¨ªmil, y una vez sepultado por ella, la tarea de rescate resulta casi imposible.

Una de las actividades m¨¢s t¨ªpicas en las playas es hacer agujeros, de distintos tama?os y profundidades, ya sea con las manos o con herramientas como palas de juguete. Sobre todo es com¨²n verlo en ni?os y ni?as peque?as, que encuentran en hacer hoyos un entretenimiento en su d¨ªa de playa, pero tampoco es raro encontrar a personas adultas cavando hoyos mucho m¨¢s grandes.
Parece una actividad inocente y sin ning¨²n tipo de peligro, pero la realidad sobre los peligros de esta pr¨¢ctica est¨¢ muy alejada de la concepci¨®n que se tiene sobre ella. Stephen P. Leatherman, investigador en ciencias costeras, explic¨® en The Conversation que cavar agujeros en la arena puede parecer inofensivo, pero si el agujero es lo suficientemente profundo y se derrumba sobre una persona, es muy dif¨ªcil escapar. De hecho, las investigaciones indican que m¨¢s personas mueren por asfixia en entierros en la arena que por ataques de tiburones.
Un estudio en EE. UU, del New England Journal of Medicine, que data de 2007, explicaba ya los riesgos de esta pr¨¢ctica. Los datos de este estudio muestran que, al a?o, entre tres y cinco ni?os mor¨ªan al a?o en este pa¨ªs mientras cavaban un hoyo. Ni?os de todas las edades, m¨¢s mayores de lo que podr¨ªas imaginar. Entre las v¨ªctimas se encuentran un chico de 17 a?os que fue enterrado en una playa de Carolina del Norte en 2023, un chico de 13 a?os que estaba cavando en una duna de arena en Utah y un chico de 18 a?os que estaba cavando con su hermana en una playa de Nueva Jersey.
La tragedia de la familia Mattingly
Pero el caso m¨¢s reciente se ha dado en Lauderdale-by-the-Sea, Florida. En febrero de 2024, una tragedia devast¨® a una familia de Indiana cuando dos ni?os quedaron atrapados en un hoyo de arena que colaps¨®. Sloan Mattingly, una ni?a de 7 a?os, y su hermano de 9 a?os, Maddox, estaban disfrutando de un d¨ªa en la playa cuando decidieron cavar un hoyo profundo, entre 1.2 y 1.5 metros. La diversi¨®n r¨¢pidamente se convirti¨® en horror cuando la estructura de arena cedi¨®, sepultando a los ni?os. A pesar de los esfuerzos desesperados de los rescatistas y los presentes, Sloan no sobrevivi¨®, mientras que su hermano fue rescatado y llevado al hospital con heridas.
La tragedia resalt¨® los peligros ocultos de actividades aparentemente inofensivas en la playa. La comunidad qued¨® consternada y los expertos en seguridad costera reiteraron la importancia de la supervisi¨®n constante y la precauci¨®n al cavar en la arena. El problema y el principal riesgo que conlleva esta actividad es la falta de tiempo de reacci¨®n. Aun siendo cierto que cuanto m¨¢s grande hagas el agujero, m¨¢s incrementa el riesgo, lo que realmente importa es que, una vez ocurre, todo pasa muy r¨¢pido y es dif¨ªcil reaccionar a tiempo.
Patrick Bafford, que trabaja como gerente de salvavidas de Clearwater, afirma que los padres, aun pudiendo ser conscientes de los riesgos, ¡°no parecen imaginar que su hijo ser¨¢ enterrado en la arena tan r¨¢pidamente. Tampoco aprecian el verdadero desaf¨ªo que supone sacar al ni?o de la arena una vez ocurrido el colapso¡±. Por tanto, advierte a las familias que si el hoyo que est¨¢n cavando sus hijos se hace muy grande, nunca les dejen solos y les paren antes de que el hoyo sea demasiado profundo.
Pero, ?por qu¨¦ ocurre esto?
Volviendo a citar a Stephen P. Leatherman, este explica que los granos de arena, una vez est¨¢n sueltos y secos ¡°forman una pila con un ¨¢ngulo de inclinaci¨®n de aproximadamente 33 grados, denominado ¨¢ngulo de reposo¡±.
Karen Daniels, f¨ªsica de la Universidad Estatal de Carolina del Norte que estudia c¨®mo se mueve la arena, tambi¨¦n avisaba en el medio Slate que la arena mojada parece inofensiva, pero que una vez seca es cuando llegan los problemas.
Es decir, ambos explican que los derrumbes en la arena ocurren porque los granos forman una pila con un ¨¢ngulo de reposo de 33 grados, manteni¨¦ndose estables solo cuando est¨¢n mojados. Sin embargo, esta estabilidad es una ¡°ilusi¨®n¡±, seg¨²n Daniels, ya que una vez que la arena se seca, los agujeros cavados se colapsan f¨¢cilmente.
Por tanto, lo que siempre nos ha parecido una actividad inocente e infantil, es mucho m¨¢s peligrosa de lo que parece. Esto no significa que debas prohibir a tus hijos que caven hoyos, pero s¨ª que no los hagan demasiado profundos y que siempre lo hagan a una distancia a la que no solo est¨¦n dentro de tu rango de visi¨®n, sino que tambi¨¦n sea lo suficientemente cerca para que te d¨¦ tiempo a reaccionar si ocurre alg¨²n accidente.
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