Superliga, ?problema o soluci¨®n?
Que un estado disfrazado de club participe en torneos contra otros clubes es muy confuso.

Lo ha logrado. La Superliga ha sido mucho m¨¢s inteligente que la UEFA. Mientras que la instituci¨®n dirigida por Ceferin ha reaccionado de manera airada ante la amenaza de otra competici¨®n europea, la Superliga ha limado las aristas menos amables de su proyecto inicial y ha cambiado el sistema de competici¨®n cerrada. En todo este tiempo, la UEFA no s¨®lo no ha propuesto soluciones sino que se ha lanzado a una carrera de amenazas y medidas punitivas. Pero, lo peor es que la UEFA a¨²n no ha sido clara con el turbio asunto de los clubes-estado. Y al rico lo que le preocupa no es un pobre sino otro m¨¢s rico que ¨¦l.
Que un estado disfrazado de club participe en torneos contra otros clubes es muy confuso. Los clubes-estado deber¨ªan jugar una competici¨®n aparte igual que en boxeo o karate los participantes se dividen en categor¨ªas seg¨²n su peso. El Manchester City tendr¨ªa un torneo para jugar contra s¨ª mismo. Y los equipos se enfrentar¨ªan s¨®lo a equipos con el mismo n¨²mero de palancas disponibles.

Desde el punto de vista sociol¨®gico, el espect¨¢culo es fascinante. Se trata de una lucha a muerte por los recursos para sobrevivir en un mundo globalizado donde el peque?o no puede ni respirar, pero el gigante necesita todo el ox¨ªgeno disponible s¨®lo para levantarse de la cama.
Ricos que s¨®lo quieren jugar contra otros ricos, antiguos ricos que sue?an con volver a serlo, superricos en busca de una narrativa y el pueblo llano que ya solo aspira a empatar o ganar de vez en cuando a un grande, lo que es una aspiraci¨®n muy limitada, un m¨ªnimo premio de consolaci¨®n. Y en medio de esta batalla, muchos clubes empiezan a ver a la UEFA como un viejo manager que vive a costa de los dem¨¢s y del que se podr¨ªa prescindir. La Superliga es consciente de la polarizaci¨®n del f¨²tbol, de que hay una desigualdad tremenda entre las ligas de distintos pa¨ªses y entre equipos de una misma liga. ?Es la Superliga la soluci¨®n o un nuevo problema? De momento, se mueve ¨¢gil como una guerrilla. La UEFA parece un ej¨¦rcito cansado.