De Diego a Luis, dos caminos opuestos para una misma meta
Despu¨¦s de la deficiente configuraci¨®n de la plantilla, el primer t¨¦cnico del Espanyol fue a punto por partido; Luis Garc¨ªa no ha logrado mejorarlo, con 0,9 puntos y 2,2 goles en contra de media.


El Espanyol ha descendido a Segunda Divisi¨®n a falta de una jornada para el final del campeonato y todas las miradas (al margen de a Chen Yanseng) apuntan a la direcci¨®n deportiva. Domingo Catoira, mano de derecha de Francisco Rufete desde el verano de 2020, hered¨® el cargo sin experiencia pero con el aval de Mao Ye, CEO del club, que lo consideraba la soluci¨®n c¨®moda para consolidar al Espanyol en Primera despu¨¦s del despido fulminante de Vicente Moreno y del propio Rufete a falta de dos jornadas para el final de la Liga anterior con el equipo salvado desde hac¨ªa semanas. Pero, visto el desenlace y el rumbo de la temporada, la elecci¨®n fue el grave error del curso.
La ilusionante apuesta por Diego Mart¨ªnez y su puesta en escena el 31 de mayo de 2022 salt¨® por los aires en verano. ¡°La estrella es el equipo¡±, dijo el t¨¦cnico gallego, mensaje indirecto para Ra¨²l de Tom¨¢s. ¡°La forma de vivir este club se reflejar¨¢ en la manera de jugar¡±, lanz¨® en su presentaci¨®n. Dos meses y medio despu¨¦s, tras la llegada de los primeros fichajes y una profunda renovaci¨®n de la plantilla que ¨¦l mismo aprob¨®, rebaj¨® el souffl¨¦: ¡°Hay que reajustar expectativas¡±. Sobre el c¨¦sped, el Espanyol vivi¨® tres etapas con Diego Mart¨ªnez, cogidas todas ellas con hilos.
El atajo del camale¨®n
Despu¨¦s de un estreno ilusionante en Vigo con el modelo de juego que quiso implantar el entrenador (presi¨®n alta, utilizaci¨®n de los extremos sin tener especialistas, juego directo a Joselu como recurso, defensa adelantada...) y una reacci¨®n final (2-2), el equipo empez¨® a hacer aguas. En la jornada 5, tras el 2-3 ante el Sevilla en una primera parte en la que la defensa adelantada del Espanyol le caus¨® estragos, el equipo acumulaba cuatro puntos (0,8 por partido) y hab¨ªa recibido una media de dos tantos. Diego Mart¨ªnez instaur¨® el modo supervivencia, desnaturaliz¨® al equipo, que se convirti¨® en ¡°camale¨®nico¡±, m¨¢s reactivo (solo logr¨® ir por delante en un partido al descanso) que propositivo, con una enorme dificultad para atacar en el juego posicional (segundo equipo con menos posesi¨®n) y con una cantidad de errores individuales reflejados en el sainete de la porter¨ªa, por donde pasaron Benjamin Lecomte, ?lvaro Fern¨¢ndez y Fernando Pacheco.
El Espanyol se afe¨® en el juego pero se manten¨ªa a flote por su competitividad hasta que se abri¨® el mercado de invierno. La llegada de C¨¦sar Montes (¡±es de un nivel similar a los centrales que tenemos¡±), Pacheco, Denis Su¨¢rez (por qui¨¦n insisti¨® Diego), Jos¨¦ Gragera y Ronael Pierre Gabriel (que ha pasado desapercibido) deb¨ªan darle un plus, pero esa mejora no lleg¨® hasta que la mala racha se llev¨® por delante al t¨¦cnico gallego. Del 2-3 de Sevilla al 2-1 de Valladolid en la jornada 24, en esos 18 encuentros, el Espanyol s¨ª hizo n¨²meros de salvaci¨®n: 23 puntos (1,3 por encuentro) y 24 tantos recibidos (1,3 por partido). Redujo sus debilidades aunque cay¨® el des¨¢nimo en una plantilla que continu¨® con su juego reactivo y no evolucion¨®. Cuatro derrotas seguidas metieron al Espanyol en descenso. No hab¨ªa un estilo al que agarrarse. Diego Mart¨ªnez se march¨® con 27 puntos en 27 jornadas y una media global de 1,6 goles en contra, el lastre del curso. N¨²meros de descenso.

El libro de Luis Garc¨ªa choca con la realidad
El camino o el atajo que tom¨® Diego Mart¨ªnez era opuesto al que implant¨® su sustituto, Luis Garc¨ªa. ¡°Hay que ser protagonistas con el bal¨®n¡±, coment¨® el t¨¦cnico asturiano, que elogi¨® el trabajo del t¨¦cnico saliente pero mantuvo las distancias: ¡°No es ni mejor ni peor que lo anterior, es distinto¡±. El nuevo estilo de Luis Garc¨ªa tard¨® en arrancar, como era previsible dado el giro de 180 grados, un tiempo del que no dispon¨ªa el Espanyol y que el mismo t¨¦cnico advert¨ªa en sala de prensa. El Espanyol sum¨® un punto de los primeros 12 y se distanci¨® de la salvaci¨®n. Las diferencias en el juego eran evidentes (48% de media de posesi¨®n) o la presencia de jugadores por dentro como Nico Melamed, pero los n¨²meros eran peores (2,3 goles recibidos en cuatro encuentros).
El Espanyol llevaba un punto de 24 posibles entre la jornada 24 y la 31, entre la transici¨®n de Diego Mart¨ªnez y la primera victoria de Luis por 1-0 ante el Getafe. En los siguientes cinco encuentros, culminados por el 2-2 de Valencia, el equipo perico no gan¨® la posesi¨®n en ninguno de ellos (39% de media), recibi¨® una media de 2,6 tantos por encuentro y logr¨® sumar cinco puntos, pero el equipo desprend¨ªa otra sensaci¨®n, m¨¢s propositiva aunque a la postre tampoco fue efectiva, al margen de los clamorosos errores arbitrales ante el Valencia que pudieron alargarle la vida a los blanquiazules. A falta de una jornada, los n¨²meros de Luis Garc¨ªa empeoraron los de Diego Mart¨ªnez sobre el papel (0,9 puntos por encuentro y 2,2 goles recibidos), aunque las sensaciones del equipo fueron m¨¢s s¨®lidas.
ENTRENADOR | Partidos | Puntos | Goles a favor | Goles en contra | Posici¨®n |
---|---|---|---|---|---|
Diego Mart¨ªnez | 27 | 27 | 33 | 44 | 18? |
Luis Garc¨ªa | 10 | 9 | 16 | 22 | 19? |
La temporada liderada por Catoira desde los despachos ha condenado al Espanyol a Segunda. El desequilibrio en la plantilla y el timing (o la elecci¨®n de un modelo opuesto) a la hora de hacer un cambio en el banquillo lastraron a un Espanyol que tambi¨¦n ha reunido otros factores, de los arbitrajes a los errores especialmente en la porter¨ªa, para consumar el sexto descenso. Ni el camino que tom¨® Diego Mart¨ªnez, ni su posterior atajo, ni tampoco el sendero m¨¢s florido de Luis han reconducido un Espanyol a la deriva desde el verano, incapaz de encontrar la br¨²jula, v¨ªctima de la falta de criterio y liderazgo desde el despacho.