El Depor, l¨ªder por aplastamiento

El Deportivo ten¨ªa una cita con el liderato en Riazor y no falt¨® a ella. Los coru?eses siguen disfrutando de un 2024 de ensue?o metiendo un ritmo que nadie es capaz de seguir. Siete victorias seguidas para alcanzar la cima, un puesto que no pisaban desde hace dos largos a?os. 21 goles en los ¨²ltimos cinco encuentros, como para que no tiemblen los rivales. Y todo en el partido m¨¢s complicado de los ¨²ltimos tiempos, porque el Lugo fue un ambicioso rival, incluso cuando se qued¨® con uno menos. Trashorras le ha cambiado la cara, pero con eso no llega ante un equipo que est¨¢ convencido y subido a una ola que parece no tener fin. As¨ª lo entendi¨® tambi¨¦n la afici¨®n, que rompi¨® barreras con nada menos que 28.112 espectadores en Riazor. Fiesta absoluta para un Depor que sigue viendo como Lucas P¨¦rez no para de asistir y marcar, y pudieron ser m¨¢s si los palos no le dan la espalda. Como sus cachorros, Mella y Yeremay, vuelven locos a cualquiera. Y que cuando no aparece Barbero, pues lo hacen Davo y Hugo Rama desde el banquillo. Todo fluye en este nuevo Depor.

La pel¨ªcula del liderato comenz¨® con una puesta en escena impresionante con tiffo en todo el estadio al son del himno gallego. En lo futbol¨ªstico, Idiakez, tras la recuperaci¨®n de Mella y Villares, apost¨® por el once esperado. No as¨ª Trashorras, que sorprendi¨® dejando a Willy Ledesma en el banquillo para darle la titularidad a Fran M¨¦rida y colocar a Anto?¨ªn como referencia arriba. Y tal y como hab¨ªa prometido el de R¨¢bade, el Lugo sali¨® sin complejos a disputarle el bal¨®n al Depor. De hecho, a dominarlo con m¨¢s criterio en una mejor puesta en escena que los locales. Los albivermellos rozaron el primero en el 19¡ä, tras un robo de Quintana al borde del ¨¢rea que acab¨® en un pase de la muerte que Jos¨¦ ?ngel cort¨® cuando Da Costa ya se relam¨ªa. Los nervios locales se empezaron a traducir en tarjetas que culminaron con una roja a Idiakez que se march¨® al vestuario fuera de s¨ª en una imagen absolutamente in¨¦dita en el tranquilo t¨¦cnico vasco y despertar fantasmas arbitrales.

Poco a poco, los coru?eses se fueron centrando en el partido y tras la tempestad comenzaron a encontrar su juego. A llevar peligro a bal¨®n parado y en varios robos adelantados a los que la defensa lucense logr¨® dar respuesta con el gancho. La mejor¨ªa local acab¨® encontrando una fisura en la retaguardia visitante en el minuto 37. Gran pase de Lucas P¨¦rez, penetraci¨®n de Yeremay para dejar de tac¨®n a Villares, que cuando iba a rematar sufri¨® un claro penalti de Morgado. Pena m¨¢xima sin discusi¨®n, como tampoco la hubo para que Riazor celebrase la casi infalible seguridad de Lucas P¨¦rez en los once metros para poner el 1-0 en el marcador. Reaccion¨® el Lugo, que tuvo el empate tras un gran pase de Da Costa de ca?o que Ojeda remat¨® para exigir a Germ¨¢n una parada salvadora antes del descanso.

Sali¨® el Deportivo en el segundo tiempo dispuesto no verse sorprendido de nuevo por el Lugo, a no dejar que los de Trashorras se metiesen en el partido. Y tardaron seis minutos en poner el segundo en un vertiginoso contraataque tras un c¨®rner en contra. Conducci¨®n de Lucas con pase al espacio para Mella. Carrera de galgo del canterano para plantarse ante Lucas D¨ªaz y batirle con un disparo cruzado. El santiagu¨¦s, que marc¨® su primer gol con el Depor en el Anxo Carro, volv¨ªa a frustrar al Lugo. La reacci¨®n del t¨¦cnico albivermello fue inmediata metiendo de golpe en el campo a Willy Ledesma, V¨ªctor Narro y Aguza. Pudo llegar el tercero en el 60¡ä en una jugada de mago de Lucas P¨¦rez, pero su remate lo escupi¨® el larguero. De lo que pudo ser la sentencia se pas¨® en un minuto al gol de Lugo, a un cabezazo de ¡®nueve¡¯ listo de Willy tras un centro de Carlos Julio. El partido entr¨® entonces en la locura, en la b¨²squeda fren¨¦tica de los dos equipos de m¨¢s goles. El siguiente suceso fue la segunda amarilla para Alberto, expulsado en el 69¡ä tras un claro agarr¨®n a Mella. Roz¨® de nuevo el tercero Lucas, pero si antes fue el larguero, ahora el palo se cruz¨® en su fant¨¢stico remate. Como no entraba, tocaba asistir, y as¨ª lo hizo el de Monelos para que Davo pusiese de cabeza el 3-1 que cerraba el partido, que no la goleada porque faltaba Hugo Rama para ponerle la guinda de oro al ansiado liderato.