Tocados, pero no hundidos
El Atl¨¦tico depende de s¨ª mismo para estar en octavos. Caer contra el campe¨®n de la Champions fue duro, pero de ganar a Seattle y Botafogo avanzar¨¢. Argentina, el modelo del vestuario.


¡°Nosotros perdimos el primer partido con la selecci¨®n y ganamos el Mundial. Cada partido es muy importante y una final, pero hay que mantener la calma. Suceden muchas cosas en los torneos¡±, incid¨ªa De Paul en la previa al partido contra el PSG en lo que parec¨ªa una venda previa a la herida que se ven¨ªa. Una herida que lleg¨® en forma de cornada, dolorosa, amplia e incidiendo en unas carencias que el Atl¨¦tico viene mostrando durante meses.
Un 4-0 para comenzar el torneo que obliga a la autocr¨ªtica y a una clara necesidad de espabilar para poder estar en octavos. El vestuario es consciente de la mala imagen ofrecida y el varapalo que supuso tal goleada. Pero reafirma el mensaje, hay que mantener la calma. En la hoja de ruta aparec¨ªa un miura en el estreno, el reciente campe¨®n de Champions que pas¨® de un 5-0 al Inter en la final a un 4-0 al Atl¨¦tico en el estreno de su nuevo objetivo. El equipo de Luis Enrique arrolla.
Duele m¨¢s el c¨®mo que el qu¨¦. La forma de caer m¨¢s que la derrota en s¨ª. El Atl¨¦tico est¨¢ tocado, pero no hundido. Reconoce su mal papel en el debut en Los ?ngeles, pero tambi¨¦n que los detalles desestabilizaron la balanza. La superioridad del PSG fue evidente, pero tambi¨¦n lo fue en Par¨ªs cuando el Atl¨¦tico se impuso por 1-2. Incluso en aquella victoria se vio m¨¢s sometido por el rival. Oblak vivi¨® mucho m¨¢s apurado y rematado. En el Rose Bowl, del disparo de Griezmann anta?o certero se acab¨® en el contraataque del 2-0.
Kovacs tambi¨¦n tuvo su cuota de protagonismo, anulando el gol de Juli¨¢n Alvarez que met¨ªa a los rojiblancos en el partido por un contacto previo que no vio en Nuno Mendes cuando Giuliano encaraba puerta. Era el minuto 20 y el Atl¨¦tico pod¨ªa jugar desde la primera parte en superioridad num¨¦rica. La roja s¨ª la vio Lenglet cuando varios futbolistas protestaban, el gol clamoroso fallado por Sorloth que reduc¨ªa la desventaja a 2-1 pasado el minuto 80... Momentos claves del partido siempre esquivos.
El Atl¨¦tico parece a a?os luz del PSG, pero sabe que no tendr¨ªa que volver a verse contra los parisinos hasta una hipot¨¦tica final. ¡°Ya ha pasado lo peor¡±. Y toma el argumento y el modelo argentino. Lo tiene bien a mano, con Juli¨¢n Alvarez, De Paul, Nahuel Molina y Correa como protagonistas. Tambi¨¦n la reacci¨®n tras caer por 4-0 en Lisboa ante el Benfica (y posteriormente 1-3 contra el Lille) para acabar en el Top-5 de la clasificaci¨®n de Champions. Perder el primer partido nunca es buena se?al, pero no descarta a nadie. Aunque en aquella ocasi¨®n la albiceleste no fue inferior contra Arabia Saud¨ª como s¨ª los rojiblancos ante el PSG. Ni Espa?a, que fue superior en su derrota ante Suiza previa a tocar el cielo en Sud¨¢frica. Dos casos recientes en un torneo similar, aunque de selecciones.
Las sensaciones fueron diferentes, pero el partido a partido es m¨¢s importante que nunca, se desliza. Ganar a Seattle y a Botafogo incluir¨ªa al Atl¨¦tico en octavos. Para jugar con el campe¨®n del grupo A (Oporto, Inter Miami, Al-Ahly o Palmeiras), a priori el l¨ªder de su clasificaci¨®n menos ogro. Jug¨¢rsela a vida o muerte, obligar a subir la intensidad y jugar con el cuchillo entre los dientes. Una necesidad en el Atl¨¦tico. Si no lo hace, a buen seguro merecer¨¢ hacer las maletas con destino a Madrid.
El partido ante el PSG fue un golpe de realidad. Los males se repiten en bucle. Si supone un punto de inflexi¨®n, bienvenido sea. Somos los que somos y hay que sacarlo adelante, se escucha en tierras angelinas. El Atl¨¦tico es, sobre el papel, superior a los dos rivales que le faltan en el grupo. Como lo es inferior al PSG. La diferencia de goles es un h¨¢ndicap importante, con un -4 que obliga a buscar goles en Seattle y esperar que el PSG siga con su paso de gigante (se da por hecho que los franceses no van a pinchar en los dos partidos que le restan ni van a dejar la primera plaza en el aire, aunque podr¨ªa ocurrir). Ganar y ganar, para estar en octavos. Como hizo Argentina cuando las cr¨ªticas arreciaban. Es el modelo del Atl¨¦tico. Querer dar la vuelta a la situaci¨®n con trabajo. Ahora tiene que demostrarlo.
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