?1.200 veces Cristiano!
El portugu谷s festej車 su partido 1.200 como profesional con una nueva exhibici車n. Gol, asistencia y un nuevo triunfo con el que el Al Nassr sigue la estela del Al Hilal.

No era un d赤a insignificante, ni un encuentro intrascendente. De hecho, era todo lo contrario. Una ocasi車n especial y un aliciente por encima de todos con un protagonista innegable con nombre y apellidos: Cristiano Ronaldo. Una fecha marcada en rojo en el calendario de Al Nassr en la que el King Saud University Stadium de Riad se visti車 de gala y, arropado por 25.000 gargantas, presenci車 un nuevo hito hist車rico del portugu谷s. Uno m芍s. El de Madeira alcanz車 un registro a la altura de tan s車lo unos pocos elegidos que evidencia y reconforta, si a迆n fuese necesario, la figura del &7∩ en el mundo del deporte rey y agranda a迆n m芍s si cabe su legado.
A sus 38 a?os, Cristiano cumpli車 su partido 1.200 como profesional con la misma incontrolable voracidad y ambici車n que aquel chaval que debut車 en los campos de Portugal con tan s車lo 17 a?os, pero con un pu?ado de t赤tulos individuales y colectivos en el bolsillo y su nombre impregnado ya con letras doradas en la p芍ginas de la historia del f迆tbol como uno de los mejores de todos los tiempos. Un d赤a m芍s en la oficina para Cristiano que, como ya hizo a lo largo de toda su carrera tanto en M芍nchester como en Madrid, volvi車 a liderar a los suyos en una aut谷ntica fiesta que fue plena y que tuvo al Al Riyadh como invitado de lujo. Porque en el d赤a D a la hora H, el de Madeira no perdon車 y demostr車 una vez m芍s que su longevidad parece ser infinita.
Algo m芍s de media hora de juego fue el tiempo que un Cristiano insaciable necesit車 para seguir engordando sus cifras goleadoras y evidenciar que vive inmerso en una eterna juventud. Con un sutil recurso y un instinto asesino que lo ha acompa?ado durante algo m芍s de dos d谷cadas en la 谷lite, el capit芍n caz車 un gran pase de Sadio Man谷 para adelantar a Al Nassr y firmar su diana n迆mero 49 en lo que va de 2023. Un gol con una celebraci車n ic車nica que guardaba una pizca de nostalgia inevitable y hac赤a recordar a sus grandes noches en el Santiago Bernab谷u. Pues esta vez, el equipo de Riad tambi谷n vest赤a de blanco.
Hasta entonces, mon車logo del equipo de Luis Castro que intent車 por tierra, mar y aire superar sin 谷xito el muro de un Al Riyadh que resisti車 con u?as y dientes los envites locales. Hasta que apareci車 el de siempre. Como la historia de nunca acabar. La diana del &7∩ llev車 la tranquilidad a Riad que festej車 el segundo antes del descanso, de nuevo, con el portugu谷s como protagonista. Pero esta vez en versi車n asistente. El Cristiano m芍s generoso ote車 el horizonte y sirvi車 a Otavio que, entrando desde segunda l赤nea como un avi車n, bati車 a Campana con un cabezazo.

La narrativa del duelo no vari車 pese al paso por vestuarios, con un Al Nassr en busca de la sentencia y un Al Riyadh con m芍s coraz車n que f迆tbol que intent車 a duras penas meterse en el partido. Aunque lo que recibi車 fue una tercera estocada. En esta ocasi車n, fue Talisca quien se visti車 de Cristiano. El brasile?o, que primero dispara y despu谷s pregunta, caz車 un bal車n de Man谷 en el punto de penalti a la media vuelta, para con pierna izquierda, fusilar sin pens芍rselo a Campana. El gol del &94∩ parec赤a definitivo, pero Al Riyadh ense?o los dientes y, liderados por el exb谷tico Juanmi, puso algo de picante al duelo. Una gran acci車n del espa?ol fue suficiente para que Gray recortase distancias.
Fue entonces cuando llegaron los minutos m芍s cr赤ticos para Al Nassr, con un Cristiano insistente, pero sin premio, y un Al Riyadh que se lanz車 a tumba abierta a una guerra a la que fue con cuchillos de pl芍stico. Y fruto de dicho caos, otra vez Talisca, y esta vez ya s赤, mand車 a la lona a los visitantes con un doblete en forma de cabezazo inapelable. Tres puntos vitales para que el equipo de Luis Castro siga la estela de un Al Hilal l赤der que, de momento, no falla, en lo que fue una fiesta para y por un Cristiano que celebr車 los 1.200 partidos a lo grande.
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