Mark Cavendish ha dicho basta. Al menos por el momento. Y es que el ciclista brit¨¢nico, de 33 a?os, ha decidido bajarse de la bicicleta sin una fecha clara de retorno para intentar recuperarse del virus Epstein-Barr, que le fue diagnosticado una primera vez en abril de 2017 y que le ha impedido rendir como a ¨¦l hubiera deseado.

En aquella primera ocasi¨®n s¨®lo necesito dos meses para volver a la competici¨®n, pero est¨¢ claro que el virus, que deriva en mononucleosis o enfermedad del beso, no le ha abandonado completamente y es ahora cuando tiene constancia m¨¦dica de que la situaci¨®n vuelve a repetirse m¨¢s de un a?o despu¨¦s.

¡°Esta temporada no me he sentido bien f¨ªsicamente. Sent¨ªa que algo no iba bien. Estoy contento porque ya s¨¦ qu¨¦ es lo que me imped¨ªa rendir a un nivel ¨®ptimo y siguiendo las recomendaciones m¨¦dicas, lo prudente es que me tome un tiempo de descanso para poder recuperarme totalmente¡±, asegura el ciclista del Team Dimension Data, que a lo largo de su carrera ha ganado 30 etapas del Tour de Francia o se ha proclamado campe¨®n del mundo en ruta, entre otros logros.

Un compa?ero inc¨®modo

El virus puede pasar inadvertido ya que algunos s¨ªntomas pueden parecer benignos, como una fatiga m¨¢s o menos intensa, dolor de garganta o fiebre, lo que puede explicar que Cavendish haya experimentado un baj¨®n en su forma f¨ªsica sin conocer claramente el origen de la misma. Para que se produzca un contagio se requiere de un estrecho contacto personal ya que se transmite a trav¨¦s de la saliva. Por ello, a la mononucleosis se la conoce tambi¨¦n como ¡®enfermedad del beso¡¯ o ¡®fiebre de los enamorados¡¯. Ahora, el ciclista brit¨¢nico deber¨¢ guardar reposo y aliviar los s¨ªntomas con tratamiento farmacol¨®gico si fuera necesario.