?Hola, bonito! ?Buen chico! ?Muy bien! ?Vamos, precioso! Ahora, vuelve a leerlo. Pero hazlo con el mismo tono que empleas con tu sobrino de 14 meses. Ya sabes, como si cantaras. M¨¢s agudo, m¨¢s alto y m¨¢s... ?o?o. As¨ª es como los expertos dicen que deber¨ªas hacerlo cuando el que escucha es un perro, y sobre todo, si es un cachorro. Seg¨²n un reciente estudio publicado en la revista brit¨¢nica Proceedings of the Royal Society B y realizado por el profesor de las universidades de la Ciudad de Nueva York (EEUU) y Lyon (Francia) Nicolas Mathevon, cuando nos dirigimos a nuestras mascotas con el t¨ªpico tono que utilizamos con los ni?os se ha comprobado que reaccionan con mayor inter¨¦s.

Para llegar a esta conclusi¨®n, se llev¨® a cabo un experimento en el que los investigadores grabaron a un grupo de personas diciendo frases como "?Ven aqu¨ª!" o "?Vamos, chico!". Los participantes deb¨ªan pronunciarlas primero mirando fotograf¨ªas de perros adultos, de edad avanzada, cachorros; y despu¨¦s sin mirar ninguna imagen. Finalizada la sesi¨®n, se comprob¨® que en funci¨®n de la edad del perro, cada persona empleaba un tono distinto, siendo m¨¢s suave a medida que el animal era m¨¢s joven.

A continuaci¨®n, un grupo de perros adultos y cachorros fueron grabados con una c¨¢mara mientras escuchaban esas voces enlatadas. ?Cu¨¢l fue su reacci¨®n? El resultado vino a corroborar lo que ya especulaba Mathevon. Los m¨¢s jovencitos se sent¨ªan especialmente atra¨ªdos y pon¨ªan m¨¢s atenci¨®n cuanto m¨¢s dulces y mel¨®dicas eran las voces. Mientras que la mayor parte de los perros adultos permanec¨ªan impasibles ante las diferencias de tono.

Habla a tu perro como si cantaras

Rosana ?lvarez, veterinaria especialista en medicina del comportamiento, lleva a?os aconsejando a los due?os de los perros que acuden a su consulta que hablen a sus mascotas como si estuvieran cantando. Y no solo eso: la experta tambi¨¦n cree que "deber¨ªamos dirigirnos a nuestros perros con una sonrisa en la cara, ya que as¨ª escuchar¨¢ m¨¢s contento y leer¨¢ m¨¢s f¨¢cilmente nuestros mensajes", asegura.

Ahora bien, la voz es solo una de las v¨ªas que tenemos los humanos para llegar hasta nuestros peludos compa?eros y modificar su conducta. Es m¨¢s, seg¨²n la veterinaria ni siquiera es la principal. "Los gestos suelen ser mejor atendidos, ya que debido al proceso de domesticaci¨®n que ha representado la coevoluci¨®n de ambas especies, los perros han aprendido m¨¢s a observarnos que a escucharnos", sostiene ?lvarez, quien asegura que "siempre es m¨¢s f¨¢cil ense?ar usando gestos, ya que el perro est¨¢ atento a nuestra cara y nuestro cuerpo, lo que le permite entender tanto las indicaciones como identificar el estado emocional de su due?o".

Esto no significa que la experta est¨¦ restando importancia a la voz, ni al tono que le acompa?a. Es m¨¢s, ?lvarez defiende la idea de que "si nos expresamos con una entonaci¨®n dulce, el perro nos atender¨¢ mejor que si esta es brusca y grave".

Tu perro no es tu hijo, pero casi

M¨¢s all¨¢ de las palabras y los gestos, ?lvarez nos recuerda que los perros siempre establecen un nexo con la persona con la que conviven. "V¨ªnculo, actitud, aptitud, voz, entonaci¨®n y estado de ¨¢nimo. Todo cuenta", asegura. Eso s¨ª, la experta hace especial hincapi¨¦ en la relaci¨®n emocional que nace entre el animal y el ser humano y en la similitud que existe entre esta y la que se crea entre padres e hijos. "Nos consta a trav¨¦s de las conclusiones de algunos estudios que existe cierta semejanza entre la relaci¨®n hijo-madre y la de un perro y su due?o", apunta la et¨®loga. Dicho parang¨®n, la experta lo atribuye a la domesticaci¨®n: "Ha propiciado que muchos rasgos conductuales del perro se hayan acercado notablemente a los de un ni?o peque?o, lo que a su vez provoca en las personas actitudes maternales hacia sus mascotas".