Bronny, a?o I: sin pena ni gloria

Ya nadie habla de Bronny James. Al principio hubo mucho ruido, luego llegaron los susurros y, finalmente, el silencio. Al final, nada era para tanto y las expectativas se han cumplido en una temporada en la que se ha constatado esa verdad como un templo: que el primog¨¦nito ha jugado en la NBA porque as¨ª lo ha querido su padre. Pero que su nivel est¨¢ lejos del de, al menos, la burgues¨ªa de la competici¨®n norteamericana. Y que le va a costar mucho adaptarse una vez se vaya LeBron, que no puede jugar eternamente por mucho que haya veces que nos haga creer lo contrario. Algo que no es culpa de Bronny, que se ha dedicado a hacer lo que le han pedido, con escarceos de cierto m¨¦rito en la G League, pero sin continuidad en el primer equipo de los Lakers. Algo l¨®gico si tenemos en cuenta su precocidad y su nivel. Y que representa la realidad de un jugador que ha pasado su primera temporada sin pena ni gloria.

Bronny debut¨® el 22 de octubre de 2024 en la NBA, saliendo desde el banquillo en el segundo cuarto, cuando JJ Redick introdujo al mismo tiempo a ambos en la victoria (qu¨¦ lejos queda esto) frente a los Timberwolves. En total, ha disputado 27 partidos, uno como titular (el ¨²ltimo de la regular season) con promedios discretos: 2,3 puntos, 0,7 rebotes y 0,8 asistencias. El 30 de octubre, contra los Cavaliers, anot¨® su primera canasta, una suspensi¨®n celebrada por el p¨²blico local, el suyo, en su Ohio natal. Sus 6,7 minutos de media dan buena cuenta del jugador que ha sido: con un rol pr¨¢cticamente inexistente, abocado a los minutos de la basura y con un protagonismo residual. Algo l¨®gico para un jugador elegido en el puesto 55 de la segunda ronda del draft, algo que LeBron pidi¨® expresamente y que los Lakers cumplieron para no meterse en problemas con su majestad y que siguiera ligada al equipo.

No todo han sido sombras para Bronny, que ha pasado por la G League con resultados que han pasado de ser buenos a excelentes, alguna exhibici¨®n incluida con los South Bay Lakers, el afiliado del primer equipo. Su mejor actuaci¨®n fue contra Santa Cruz Warriors, cuando logr¨® unos n¨²meros realmente impresionantes: 39 puntos, con 10 de 13 en tiros de dos, 4 de 8 en triples y 5 de 6 en tiros libres. Un papel enorme que complet¨® con 7 rebotes, 4 asistencias, 4 robos y un tap¨®n. Las 7 p¨¦rdidas no ensombrecieron la exhibici¨®n del base, que pidi¨® entonces paso para la NBA. Pero la realidad es que la mejor liga del mundo se le quedaba algo grande a pesar de ir convocado a pr¨¢cticamente todos los partidos. Al final, son palabras mayores.

El joven jugador (tiene apenas 20 a?os) se qued¨® sin anotar en 13 de los 27 partidos en los que disput¨®, aunque tuvo alg¨²n ramalazo de talento y cuaj¨® su mejor partido el 20 de marzo. La contundente derrota de los Lakers (perdieron 118-89 en el Crypto Arena frente a los Bucks) le permiti¨® estar casi 30 minutos en pista para anotar 17 puntos y sumar adem¨¢s 3 rebotes y 5 asistencias con una gran serie de lanzamiento: 7 de 10 en tiros de campo, con 2 de 4 en triples y acertando el ¨²nico tiro libre del que dispuso. En el ¨²ltimo partido de la fase regular jug¨® m¨¢s que nunca, superando los 38 minutos, y no tuvo tanta suerte en el lanzamiento (2 de 10), pero tuvo una actuaci¨®n relativamente completa con 4 puntos, 3 rebotes, 6 asistencias y 4 robos. En playoffs tambi¨¦n debut¨®, disputando los 3 ¨²ltimos minutos del primer partido y los ¨²ltimos 38 segundos del tercero. Se qued¨®, eso s¨ª, sin anotar.

Al final, se ha constatado un poco lo que ya se sab¨ªa. Bronny es un jugador correcto para la G League, pero su baja estatura (1,88) le hace tener muchos problemas en la NBA. Tiene buena visi¨®n de juego, buenos movimientos laterales y manos seguras para conseguir robos. Pero, en contrapartida, es propenso a las p¨¦rdidas, no tira bien desde el exterior (ha promediado un 28,1% en triples), es irregular en general en el lanzamiento y su potencia en el salto no es comparable a su capacidad de bote. Puede defender y tiene margen de mejora, pero la realidad es que fue una petici¨®n expresa de LeBron que los Lakers cumplieron para tener contenta a la estrella. Y el padre ya ha dicho que, vaya donde vaya y juegue donde juegue sus ¨²ltimas temporadas (nadie sabe cu¨¢ndo le queda), el hijo ir¨¢ con ¨¦l. Un pack para debutar en la competici¨®n norteamericana, algo que no todo el mundo, a pesar de todo, puede decir. Y que ya es un logro en el caso de Bronny James. Por lo dem¨¢s, ya se sabe: sin pena ni gloria.

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