El caso es que las selecciones llevan lo mejor, que ans¨ªan el trofeo, pero las tradiciones son dif¨ªciles de construir.
Esta aclaraci¨®n a posteriori es una triste y tard¨ªa reparaci¨®n moral para los atl¨¦ticos, muchos de los cuales lo ven como una burla c¨ªnica.
Fue un acierto de la Federaci¨®n hab¨¦rselo birlado a Holanda, ya lo coment¨¦ en su d¨ªa.
Su personalidad arrolladora, que no teme a nada ni a nadie y aparta lo que le incomoda, le ha dado un control absoluto sobre una plantilla muy pareja.
Queda el recuerdo de una bonita aventura y la seguridad del retorno a Europa el curso pr¨®ximo, ganado a ley.
Y ahora se enfrenta a su ilusi¨®n m¨¢s hermosa, un t¨ªtulo europeo que no es el que m¨¢s reluce, pero en el que va a tener como oponente al Chelsea.
En la lista hay un regreso que es obligado mirar con simpat¨ªa, Isco, cuya temporada b¨¦tica le ha hecho merecedor de esto.
No se sobrevive tantos a?os en el Real Madrid si no se tienen unas condiciones extraordinarias.
Bilbao tiene para m¨ª, en futbol y en todo, un aire un tanto brit¨¢nico, as¨ª que esta final le sentaba bien.
A Modric le salv¨® el a?o pasado que se marchara Kroos, de no ser por eso estaba destinado a salir.
Hab¨ªa mucha SER y mucho Movistar, los medios en que ha ido hilando una carrera period¨ªstica.
LaLiga que pudimos suponer que ser¨ªa la de Mbapp¨¦ ha terminado por ser la de Lamine Yamal.
Se limit¨® a hacer nuevas muestras de cari?o hacia el Madrid, reales, igual¨¢ndole en su coraz¨®n con el Milan.
Para Ancelotti es una salida brillante. Tras el Real Madrid, la ¡®Penta¡¯ era el ¨²nico lugar al que pod¨ªa ir sin bajar un escal¨®n.
El VAR crea distorsiones de todo tipo, y no es la menor esta, en la que juzgamos y denostamos al ¨¢rbitro que vemos ah¨ª abajo.
El f¨²tbol es implacable en esto: las cuentas se echan en las ¨¢reas, y en ellas el Inter fue certero y Sommer estuvo inmenso.
Las miguitas que va dejando Mou por donde pasa. Ahora los interistas temen que se vuelva contra ellos.
El partido del turco queda como una carta ¡®a quien corresponda¡¯, es decir, al que venga.
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